TEXTO DE LA CARTA DEL EX PRESIDENTE GAVIRIA
Bogotá, 1 sep (CNE). El siguiente es el texto de la carta que le envío el ex presidente César Gaviria al presidente Álvaro Uribe Vélez, en donde le comunica su decisión de apartarse de la decisión del partido liberal de promover la abstención activa hacia el referendo contra la corrupción y la politiquería.
“Bogotá, septiembre 1 de 2003
Excelentísimo señor
Álvaro Uribe Vélez
Presidente de la República
Ciudad
Estimado señor Presidente:
El cargo de Secretario General de la Organización de Estados Americanos me impone limitaciones en mi participación en la política de mi país. Ya he manifestado públicamente que voy a votar el referendo, pero teniendo en cuenta que este es un tema de tanto interés nacional he considerado oportuno ampliar públicamente mis opiniones. El debate sobre la participación o abstención en el referendo y, en particular, la decisión de la Dirección del Partido Liberal –mi partido– de proclamar la abstención, también me llevan a formular estas apreciaciones. Lo hago a pesar del temor que me genera que los ex presidentes tratemos de tutelar en exceso las competencias del Presidente de la República o de la Dirección del liberalismo. El tema que nos ocupa, tal vez justifica nuestra actuación en esta coyuntura.
El referendo es un instrumento fundamental de la democracia participativa establecida en la Constitución de 1991 y, por tanto, independientemente de su contenido, es de por sí una avance mayúsculo en nuestro sistema político. Por esto la participación en el referendo, sea por el Sí o por el No, es un deber de quienes creemos en la democracia de participación.
El contenido del referendo puede ser debatible como todo acto público, pero decir que favorece la corrupción es, sin duda, equivocado. Las disposiciones en él contenidas buscan erradicar prácticas políticas que han favorecido comportamientos corruptos. La eliminación de suplencias, la inhabilidad a quienes hayan sido condenados por delitos que afecten el patrimonio público, la adición de causales para pérdida de investidura, la prohibición a congresistas a gestionar individualmente proyectos de inversión, el cierre de las rendijas que han permitido que los auxilios subsistan a pesar de prohibición formal estipulada por la constituyente, son elementos que sin duda ayudarán a sanear la política.
La Corte Constitucional, en un fallo equilibrado y respetuoso del principio de la democracia participativa que orienta la Carta del 91, le dio vía libre al referendo, despojándolo de cualquier aspecto que pudiera ser utilizado para darle a éste un carácter plebiscitario o que pudiera confundir a los votantes.
Como oportunamente lo señaló el ex presidente López, de acuerdo con ese fallo “a) No se podrá votar en bloque; b) No se podrán inducir las respuestas con sugestiones encubiertas; c) No se podrán introducir artículos que impliquen reformas a las fechas electorales; d) No se podrán incluir temas ajenos al contenido sustancial del referendo; e) No podrán crear circunscripciones electorales de bolsillo”. Esto demuestra a las claras cómo muchas de las objeciones que hicieron algunos dirigentes del liberalismo, fueron satisfactoriamente resueltas.
Con su fallo, la Corte reafirmó la estirpe democrática del referendo y defendió rigurosamente la libertad de los ciudadanos para votar en conciencia en esos comicios. Defendió el derecho de cada ciudadano a disentir: esto es, a votar cada pregunta como quiera, y creo que invitar a cada ciudadano a participar, a expresar en conciencia las reformas propuestas, no puede ser señalado como una imposición o como algo que cercena el carácter democrático de las ideas que usted y yo y tantos colombianos, estamos obligado a hacer respetar.
De todas maneras, transcurrido este referendo estamos todos en la obligación de establecer si los requisitos constitucionales o los que estableció la Ley Estatutaria, son excesivos y en vez de promover la participación la están obstaculizando. El solo hecho de que haya quienes legítimamente llamen a la abstención, demuestra que se han creado mecanismos perversos que impiden en vez de estimular la participación ciudadana.
Hechas estas consideraciones, es claro que no puedo compartir la decisión de abstención activa que ha adoptado mi partido. Esta decisión también ha chocado con posiciones de un buen número de dirigentes liberales. Muchos congresistas y candidatos liberales a importantes gobernaciones y alcaldías proclaman la participación, selectiva unos o total otros, en el referendo. No se trata ahora de alentar una nueva división en el partido, ni tampoco de ampliar la bancada de gobierno.
Su convocatoria, señor Presidente, permitirá que muchos liberales lo acompañen en la defensa de la participación ciudadana y en la transformación de las instituciones políticas del país, y en la oportunidad de culminar el mandato que el pueblo le dio en las elecciones.
Del señor Presidente con toda consideración,
César Gaviria Trujillo”.