TEXTO DE LA CARTA ENVIADA A EDUARDO PIZARRO LEONGÓMEZ
Bogotá, 15 sep. (CNE).- El presidente Álvaro Uribe Vélez, envió hoy una carta al columnista Eduardo Pizarro Leongómez, a propósito de la columna que publicó hoy en el diario El Tiempo.
El siguiente es el texto de la carta:
Bogotá, 15 de septiembre de 2003
Doctor
Eduardo Pizarro Leongómez
Columnista de El Tiempo
Ciudad
Estimado doctor Eduardo:
Suele ocurrir que, para evitar un debate de fondo, gastemos las horas discutiendo sobre la forma. Es una manera de soslayar el debate sobre las diferencias.
El Presidente de la República no puede mantener la boca cerrada, si en ello va la suerte de la nación. Claro que si el tono de las palabras ofende la sensibilidad de algunos, se les ofrecerán disculpas por el tono; pero, eso sí, en la defensa de la seguridad de los colombianos, no tendremos flaquezas. En este gobierno, estimado doctor Eduardo, sólo seremos intolerantes con la intolerancia. La patria perdona el exceso de decibeles, pero demanda entusiasmo en la defensa de su dignidad.
En España, el Partido Herry Batasuna predicaba que, por haber un conflicto político, las prácticas terroristas de ETA no lo eran. Que eran, decían, una combinación de la lucha política y militar. Muchos catedráticos, periodistas y defensores de los derechos fundamentales, buscaban un equilibrio intelectual imposible y expresaban continuamente dudas sobre la legitimidad de la defensa del Estado y de la sociedad española. Fernando Savater, les dio esta respuesta: “Es indecente que, tras cada atentado de ETA, los mismos que dicen que la violencia terrorista es inaceptable nos recuerden que sin embrago existe un conflicto político. Una de dos: o el conflicto justifica la violencia (tesis de los violentos) o el uso de la violencia es el verdadero conflicto vasco que hay que resolver (tesis de los demócratas)”. Esa doctrina, ha hecho que todos los españoles estén unidos, tanto para reaccionar contra quienes ejecutan los actos terroristas, como contra quienes pretendan darles cobertura y legitimidad política.
Usted ha planteado en su artículo de hoy en El Tiempo, cuál es el verdadero debate colombiano (que no es propiamente sobre los tonos y escenarios). Retomo las palabras de su artículo y pido a los colombianos que reflexionen sobre ellas: “En Colombia se están configurando dos grandes corrientes en el campo de las ONG (…) las comprometidas con el tema de la paz (…) quienes han asumido una posición moderada, responsable, equilibrada. De otra parte, las ONG de derechos humanos que han asumido un discurso radical, condenatorio del Estado, de denuncia y de confrontación. Una lectura cuidadosa del Informe “El embrujo autoritario”, deja un mal sabor en la boca”.
Estimado doctor Eduardo: Usted, que ha sido un combatiente con las ideas, siga trabajando para que en Colombia no persista entre los intelectuales, lo que certeramente llama “actuar de manera insensata, contribuyendo a la deslegitimación total de las instituciones democráticas y a la polarización ideológica y política”.
Cordial saludo,
ÁLVARO URIBE VÉLEZ”