Para que utilicen químicos que no sean nocivos para la capa de ozono

RECONVERSIÓN INDUSTRIAL A 600 EMPRESAS FABRICANTES DE ESPUMAS

Bogotá, 16 sep. (CNE).- Alrededor de 600 micro, pequeñas y medianas empresas del país que producen espumas tendrán una reconversión industrial en la fabricación de sus productos y eliminar el uso de químicos nocivos para la capa de ozono, anunció hoy el director de la Unidad Técnica de Ozono (UTO) del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Jorge Sánchez.

El funcionario explicó que el Ministerio presentó, al Fondo Multilateral del Protocolo de Montreal, un proyecto de reconversión industrial para las empresas nacionales de espumas y que usan sustancias nocivas para la capa de ozono.

El proyecto apoyará la reconversión con 840 mil dólares representados en asistencia técnica para las empresas, adaptación jurídica y divulgación.

“Con la asistencia técnica pretendemos llegar a cerca de 600 empresas entre micro, pequeñas y medianas empresas a las cuales se les dotará de equipos y capacitará para asumir el cambio tecnológico”, agregó.

El funcionario explicó que la industria de espumas nacional utiliza el gas cloroflrocarbonados (CFC 11), sustancia que es totalmente dañina para la capa de ozono. Este compuesto permanece estable en la atmósfera baja, pero cuando es liberado va ascendiendo sin degradarse alcanzando la estratosfera en donde se libera el cloro que actúa sobre la capa de ozono destruyéndola.

“Por esta razón se ha llegado a un acuerdo en el Protocolo de Montreal y eliminar cerca de 130 toneladas de consumo anual de esta sustancia pasándonos a una sustancia mucho menos agresiva, una sustancia de transición que es el gas HFC141B permitido por el Protocolo de Montreal y con el cual estamos ampliando nuestras mesas de cumplimiento”, indicó.

Sánchez sostuvo que el HFC141B es un compuesto parecido en su estructura a los clorofloro carbonados con un hidrógeno adicional, elemento suficiente para que el compuesto una vez liberado reaccione en la atmósfera baja y se descomponga antes de alcanzar la estratosfera y llegue a la capa de ozono.

“En eso consiste la protección, que la sustancia a pesar de tener cloro por la composición que tiene (un hidrógeno más) no alcanza a llegar y por lo tanto no afecta de la misma manera al ozono estratosférico”, aclaró.

Anunció que hoy, en el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, se hará el lanzamiento del proyecto, que iniciará formalmente actividades en las empresas colombianas en el próximo mes de octubre, “para que dentro de dos años el uso del CFC11 esté prohibido en la fabricación de las espumas”, sostuvo.

En lo que va corrido de 2003, el agujero de la capa de ozono aumentó ligeramente.

“Del año pasado a este ha habido un pequeño aumento en el agujero. El año pasado fue el más pequeño en los últimos 14 años y el de este año es un poco mayor sin ser alarmante. No bajaremos la guardia y seguiremos avanzando para que en los próximos años --talvez en la próxima década-- la reducción sea muy sustancial”, puntualizó