Advierte documento de HRW
GRUPOS ILEGALES SE CONTRADICEN SOBRE MENORES EN SUS FILAS
Bogotá, 19 (CNE).- A pesar de que sus propias normas rezan que no vincularán a menores de edad dentro de sus combatientes, todos los grupos armados al margen de la ley en Colombia violan esta medida, por lo que en el país existen 11 mil menores portando armas.
Así lo denuncia el informe de Human Rights Watch titulado “Aprenderás a no llorar”, en donde muestra las constantes contradicciones de las Farc, el Eln y las AUC en este sentido.
Según el documento, en el caso de las Farc esta organización ilegal había hecho compromisos con altos representantes de las Naciones Unidas para ponerle fin a esta práctica, pero nunca la cumplieron.
El documento recoge una serie de testimonios de niños ex combatientes que dan cuenta de su ingreso a las filas de la insurgencia antes de los 15 años, llegando a presentarse casos como el de menores que comenzaron a empuñar las armas desde los 11 años de edad.
Así mismo, la organización revela como en constantes oportunidades, a través de medios de comunicación o en reuniones con diversos funcionarios nacionales e internacionales, los cabecillas de la organización se comprometen a retirar de sus filas a los menores de edad, pero nuevos hechos demuestran lo contrario.
“Hasta la fecha, sin embargo, no ha habido ninguna muestra de disminución del reclutamiento de niños por parte de las Farc-ep. El Ejército de Colombia informó que de los 327 combatientes que habían desertado de las filas de la guerrilla en 2001, una tercera parte eran niños de entre diez y 17 años. De los 986 desertores registrados en los primeros diez meses de 2002, el 42 por ciento eran niños, y de ellos, 74 eran menores de 15 años”, dice el documento.
En cuanto al Eln, el documento de HRW relata también que sus normas internas señalan la prohibición de tener en sus filas a menores de 16 años, así como de mujeres embarazadas, no obstante, reconocen el reclutamiento de niños por supuestas “agresiones del Estado”.
“Una vez reclutados y armados, los niños se convierten en combatientes y en objetivos del enfrentamiento militar. Se multiplican a violencia a la que están expuestos tanto del enemigo como de su propio bando si se cuestiona su lealtad”, dice el documento.
Sobre las autodefensas ilegales, el documento señala que “han incumplido su propio compromiso de prohibir el reclutamiento de niños” y expresa que tiene entrevistas en las cuales se recogen testimonios de menores que ingresaron a las filas de esta organización ilegal a los siete años.
“La mayoría de los niños dijeron que se habían entrenado con otros menores. Algunos dijeron que la mayoría de sus compañeros reclutas eran adultos, pero unos cuantos afirmaron que había "muchos" niños”, expresa el documento
