SE PREPARA SEGURO AGROPECUARIO PARA PLÁTANO, MAÍZ Y ALGODÓN

Bogotá, 4 ago. (SNE).- Hace un mes los agricultores de Urabá y Magdalena recibieron una buena noticia: el Gobierno Nacional puso en marcha el seguro agropecuario para 42 mil hectáreas de banano, con lo cual se permite cubrir estos cultivos contra los riesgos de vendavales, inundaciones, exceso de humedad por lluvias o cualquier fenómeno climatológico que las pueda afectar.

Este, que fue un compromiso del presidente Álvaro Uribe Vélez y está contemplado en el Manifiesto Democrático, se extenderá ahora a cultivos de plátano en el Quindío, maíz en Córdoba y algodón en la costa norte y la región central del país.

“A través de este esquema de seguro agropecuario se ofrece una cobertura generalizada de riesgos y producciones que permite eliminar las ayudas posteriores por riesgos asegurables, y cada año los presupuestos generales del Estado establecerán una partida concreta que será la que se destine a las ayudas antes del siniestro, en forma de subsidio al costo de la prima del asegurado”, explicó el Ministro de Agricultura, Carlos Gustavo Cano.

Por ejemplo desde que se implementó el subsidio el pasado 2 de julio, el agricultor con tan sólo 240 mil pesos, financiados a un año por el Banco Agrario de Colombia, puede asegurar su hectárea de banano en 8 millones de pesos.

“De esta manera recibe por parte de las compañías de seguro una indemnización proporcional al daño en un plazo mucho menor a un trámite de refinanciación ante cualquier entidad bancaria”, aseguró Indalecio Dangond, coordinador del Programa de Seguro Agropecuario.

Este auxilio se convierte en un gran mecanismo de apoyo agricultor, teniendo en cuenta que el desarrollo de actividad bananera genera cerca de 20.000 empleos directos.

De esta manera se pone a disposición de los agricultores un instrumento eficaz para la gestión de los riesgos pero al mismo tiempo se les compromete para que ellos sean los directamente responsables de sus cosechas.

“Mediante este seguro, el agricultor se hace corresponsable de su protección ante los riesgos de la naturaleza no controlables, como cualquier empresario en otro régimen de actividad económica”, afirmó el funcionario.

De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, el seguro se pondrá en práctica de forma progresiva hasta cubrir todas las producciones, regiones y riesgos.

Dada la confianza y seguridad que ha generado el Gobierno Nacional, compañías de reaseguro internacionales como Swiss Re, Mapfre Re, Hannoveer y Munchenner Re, han dado respaldo a este programa con reaseguro del 100 por ciento.

ABC DEL SEGURO AGROPECUARIO

¿Que es?

Es un sistema de cobertura de los daños ocasionados a las producciones agrícolas, como consecuencia de variaciones anormales de agentes naturales climáticos.

¿En qué consiste?

Se trata de un seguro que está sujeto a las condiciones de estabilidad financiera y valoración técnica de cualquier esquema de aseguramiento. Opera como instrumento de política agraria y social, permitiendo desarrollar actuaciones orientadas a la ordenación de actividades productivas.

¿Cómo funciona?

Se conceden subsidios sobre el costo de la prima, a los agricultores que contraten las correspondientes pólizas de seguro, a través del Fondo Nacional de Riesgos Agropecuarios, el cual es administrado por Finagro.

¿Cómo se obtiene?

El agricultor puede suscribir el seguro a título individual o de forma colectiva a través de organizaciones agrarias u otro tipo de asociaciones reconocidas por la ley colombiana, beneficiándose de un mayor subsidio.

¿Con quién se contrata?

Con las compañías de seguros que conforman las sociedades administradoras del seguro agropecuario. En principio operarán Mapfre, Suramericana y Previsora. El sistema requiere que se firme cada año o campaña agrícola, un nuevo contrato.

¿Qué cubre?

Ampara los perjuicios causados por siniestros naturales climáticos, ajenos al control del tomador, que afecten las actividades agropecuarias. El seguro cubre el total de las inversiones por unidad de producción financiadas con recursos de crédito o recursos propios del productor en actividades agropecuarias.