Bogotá, 13 ago. (SNE).- A continuación las declaraciones que entregó este viernes el Alto Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, a periodistas en la Casa de Nariño.

“Quiero resaltar que la decisión tomada el día de ayer por las Autodefensas Unidas de Colombia, de desmovilizar de manera inmediata los frentes que operan en los Llanos orientales y de iniciar también la concentración y desmovilización del Bloque Norte que opera en los siete departamentos de la Costa Atlántica, es un paso histórico. Creo que enrumba de manera definitiva este proceso y muestra que vamos a cumplir lo pactado el 15 de julio de 2003 en el acuerdo de Santa Fe de Ralito, donde se estableció que antes de finalizar el 2005 se habrían desmovilizado todos los grupos de autodefensa en Colombia.

Recibimos con satisfacción este paso dado y lo que viene ahora después de esta decisión política, es poner en marcha toda la logística para que podamos desmovilizar a estos hombres, ofrecerles todas las condiciones para su reincorporación a la civilidad y poner en marcha unos modelos de seguridad participativa, de tal manera, que en estas zonas donde han operado las autodefensas, opere solamente el Estado legítimo brindando todas las condiciones para que los derechos de los ciudadanos no sean vulnerados”.

P.- ¿Tiene el Gobierno establecido en qué zona va a desmovilizar a Martín Llanos y a sus hombres?

R.- Sobre Martín Llanos hay que aclarar que no tenemos una respuesta de parte de el a la exigencia del Presidente de desmovilización. Creemos que las condiciones están dadas, aceptada ya la desmovilización por el grupo Centauros de Miguel Arroyave; por el grupo de Meta y Vichada, de Guillermo Torres; y por el grupo de vencedores de Arauca, de Pablo Mejía, no queda ninguna excusa, y por eso estamos a la espera de esa decisión pública de Martín Llanos, de avanzar en la desmovilización de sus hombres en el Casanare para contribuir así a la pacificación de ese territorio.

P.- ¿Qué pasaría si eso no ocurre?

R.- No me corresponde a mí, como Comisionado, decirlo. Yo hasta último momento haré esfuerzos por persuadir a los grupos de autodefensa para que entren en este proceso de manera voluntaria. Si no sucediera esto, será el Presidente de la República quien tomará las decisiones al respecto y creo que ya en su comunicado del 2 de agosto El dejó claro que si estos grupos no aceptan la desmovilización se romperá el proceso de negociación que se adelanta con ellos.

P.- Se anuncia la desmovilización del grupo norte y de otros bloques de Mancuso y de Jorge 40. ¿Ya hay proceso dirigido hacia ellos para la cual se pensaría en otras zonas de ubicación?

R.- En este momento seguimos con la Zona de Ubicación de Santa Fe de Ralito. Esa Zona tiene unos propósitos muy claros que se han venido cumpliendo: materializar los acuerdos firmados, definir un cronograma de concentraciones y desmovilizaciones, perfeccionar el cese de hostilidades y, montar un Comité para la verificación de cese de hostilidades que está funcionando. Creemos que esa Zona, que sirve de albergue a los jefes máximos de las Autodefensas, está cumpliendo su propósito. Más zonas de esas no van a haber en el país.

Eventualmente y por razones operativas, en otras regiones para ayudar a la desmovilización, podríamos definir zonas muy pequeñas, parecidas a la que utilizamos en la Ceja, únicamente con el propósito de concentrar transitoriamente a los hombres que se van a desmovilizar e identificarlos plenamente, darles las instrucciones pertinentes para que ingresen al programa de Reincorporación y a los proyectos productivos.

Igualmente se puede considerar que en alguna de estas zonas, también en un territorio definido por el Estado y muy pequeño, permanezcan durante un tiempo prudencial, algunos comandantes regionales de las autodefensas con los cuales sigamos concertando la política de pacificación de la zona, ya que es muy importante que, sobre el territorio, ellos nos colaboraren en el desmantelamiento total de las organizaciones ilícitas y, por supuesto, nos colaboren para que ningún miembro de su organización caiga en la tentación de reproducir la organización o de montar organizaciones delictivas paralelas. Entonces podríamos considerar que en zonas muy puntuales permanecieran estos jefes regionales de las autodefensas con todas las garantías por parte del Estado y en calidad de interlocutores para avanzar en el proceso de paz.

P.- ¿En términos de tiempo para la desmovilización de los hombres del Llano se ha pensado en algo?

R.- Yo creo que eso debe ser lo más inmediato posible. Ya tomada la decisión política hay que operativizarlo. Aquí no hay nada más que esperar. Cualquier día que demoremos de más, son vidas que están en peligro. Yo aspiro que al terminar este año le hayamos dado un gran regalo de paz al país, y que estas decisiones que se tomaron el día de ayer, estén materializadas en su totalidad; y si no es posible, algunas de ellas por lo menos muy avanzadas.

P.- Se habla de una Comisión gubernamental para manejar la logística de este proceso. ¿Quiénes van a integrar esa Comisión?

R.- Ya hay un Comité especial funcionando en mi Oficina, desde el día de la exigencia hecha por el Presidente. Dicho Comité ya ha avanzado en lo que podría ser una propuesta logística. Tenemos unos recursos para iniciar el proceso. Sin embargo, ustedes entienden que con la dimensión de las decisiones tomadas el día de ayer, vamos a necesitar, a lo mejor, un Comité mucho más amplio interinstitucional. Esta mañana tuve la oportunidad de conversar telefónicamente con el Ministro de Defensa, tenemos ya preparada una reunión con los Altos Mandos Militares para que, desde el punto de vista de seguridad, haya un Comité del más alto nivel que le brinde seguridad a la zona donde se va a producir la desmovilización de estos hombres.

Aquí no podemos correr riesgos con las comunidades. Sería un fracaso imperdonable que, una vez desmovilizados estos grupos, estas regiones se desestabilizaran y nuevos grupos armados ilegales irrumpieran con el ánimo de hacer retaliaciones o de asesinar pobladores. De allí que el compromiso del Gobierno, en términos de seguridad es total y manejaremos esos dos criterios: por un lado toda la política de reincorporación y reinstitucionalización, pero también toda la puesta en marcha de un modelo de seguridad para que estas zonas no corran ningún peligro.

P.- ¿Va haber alguna solicitud de cese de hostilidades para estas personas que se desmovilicen y se concentren?

R.- las personas desmovilizadas, por definición, ya no están en hostilidades. Es decir, el cese de hostilidades más perfecto es estar desmovilizados. De hecho, esta decisión se toma como una forma muy pragmática y concreta de avanzar en la reinstitucionalidad del país. Entonces, una vez desmovilizadas estas personas tendremos que tener como meta cero violencia. Allí ninguno de ellos podrá volver a recurrir a métodos violentos, porque si lo hace inmediatamente pierde los beneficios que concede el Estado y tendrá que responder ante las autoridades correspondientes.

P.- ¿Ellos aceptaron desmovilizarse a cambio de qué?

R.- Los ejes están claros en el acuerdo del 15 de julio de 2003. Uno de los grandes resultados de la reunión de ayer fue precisamente ese: que quedó en firme ese acuerdo. Hace unos días yo le había dicho al país que estaba preocupado porque, al parecer, este acuerdo había caído en el olvido. Pero como ustedes ven en el comunicado de las autodefensas, ellos retoman ese acuerdo del 15 de julio que tiene unos propósitos muy claros. Por parte del Estado: recuperación del monopolio de la fuerza y la justicia; y ofrecer condiciones de seguridad a las comunidades. Por parte de las autodefensas: desmovilización de sus hombres y en reciprocidad con esta desmovilización, ofrecer por parte del Estado todas las garantías para su reintegración a la vida civil. Ese es el marco hacia el cual marchamos. Eso quedó absolutamente claro.

Por supuesto que eso tendremos que acompañarlo de acciones conjuntas paralelas de tipo social, de recuperación institucional en lo regional, eventualmente en donde haya cultivos ilícitos poner en marcha programas puntuales para que estos cultivos sean adecuadamente erradicados, pero todo eso es complemento de estos propósitos centrales que quedaron ayer nuevamente ratificados y claramente definidos.

P.- ¿Qué va a pasar en el caso del Bloque Metro que no ha estado en una guerra con los de Ralito, pero que mantiene contacto con ustedes?

R.-con este bloque nosotros tuvimos algunos contactos que han estado suspendidos en las últimas semanas. Sin embargo, logramos avanzar mucho. En su momento hablamos muy concretamente de posibilidades de concentración y desmovilización. Entonces creemos que con esta decisión que han tomado las Autodefensas Unidas de Colombia, ya podemos avanzar con mucha mayor rapidez con el bloque Elmer Cárdenas.

Ustedes deben entender que esto es como un “rompecabezas” y, por supuesto, si el grupo más grande ya tomó la decisión de desmovilizarse, el grupo más pequeño, que es el Elmer Cárdenas, creemos que dará ese paso hacia delante. Nosotros confiamos en su voluntad de paz que no la han expresado de manera directa y también para ellos creo que llegó el momento. La noticia para el país es que llegó el momento de la desmovilización de las autodefensas, esto no tiene reversa, debe quedar clara la voluntad del Gobierno y tenemos ya el compromiso de las autodefensas para avanzar hacia el desmonte total de estos grupos armados ilegales. Ya empezará a ser cosa del pasado que en Colombia se monten dinámicas de seguridad ilegales que no tienen ninguna razón de existir.

P.- ¿De cuántos hombres estamos hablando más o menos?

R.- No quisiera aventurarme en cifras porque siempre en toda negociación hay un forcejeo final en torno al número de hombres. Nosotros tenemos nuestros propios cálculos pero son reservados del Gobierno. Les digo lo que ha dicho, a veces, el señor Arroyave en público. El dice que tiene seis mil personas bajo su mando. Eso tenemos que ajustarlo, en estos procesos de desmovilización históricamente existe la tendencia a inflar el número de personas que se desmovilizan. Por qué?, porque hay algunos que están directamente vinculados al aparato militar, hay otros que hacen partes de las redes de apoyo. Eso habrá que entrar a mirarlo con detalle. Entonces yo no quiero aventurar cifras por parte del gobierno, eso lo miraremos sobre terreno. Tendremos el cuidado de que sea el número justo, pero estamos hablando de varios miles.

P.- ¿Qué se sabe de los hombres de estos frentes, de sus cabezas, quiénes son?

R.- todos los jefes de los frentes que se desmovilizan están conversando con el gobierno desde el inicio del proceso. Nosotros no hemos admitido que entre ningún comandante nuevo ni aquí va a haber comandantes nuevos ni frentes nuevos. Nosotros tenemos el inventario muy claro y quiénes son nuestros interlocutores. Yo he dicho que aquí no hay ningún “gallo tapado”. Nosotros sabemos desde el principio con quién hablamos, eso lo tenemos plenamente certificado internamente. Le hemos pedido a las autodefensas que ellos tienen la responsabilidad de anunciarle al país quiénes son sus mandos. Nos han ratificado nuevamente que tanto al gobierno como a la OEA le vana entregar un listado detallado sobre sus mandos nacionales y regionales. Pero nosotros tenemos completamente claros cuáles son los frentes que se van a desmovilizar y aquí no habrá sorpresas de ningún tipo ni para la opinión.

P.- Usted dice que aquí no hay reversa. ¿Dónde queda, entonces, el proyecto de justicia y reparación que tiene que ir al Congreso, porque se está esperando por parte de la gente y de quienes han sufrido por parte de los paramilitares? Qué pasa con los pedidos de extradición?

R.- Son asuntos que quedan pendientes. Aquí tenemos pendiente un gran asunto: qué hacer con miembros de organizaciones armadas que han cometido delitos atroces. Qué hacer con los miembros de las autodefensas, qué hacer con los miembros del ELN y de las Farc que están comprometidos con delitos no indultables ni amnistiables. Este gobierno ha puesto el debate sobre el tapete. Ese debate no se había puesto sobre la mesa, históricamente se mantenía un gran silencio al respecto. Nosotros hemos hecho unos adelantos con la ley de Justicia y Reparación. Creemos que esa Ley tiene que salir por consenso nacional y no por mayorías gubernamentales. Tiene que salir aprobada por todos los sectores políticos con una gran legitimidad nacional e internacional. Las autodefensas entienden que ese es un asunto que está pendiente, que no depende exclusivamente del Gobierno; sino que será la sociedad en su conjunto la que defina los criterios para tratar el caso de personas que hayan cometido delitos atroces y que hayan contribuido de manera eficaz a la paz nacional.

Igual con el asunto de la extradición. Hemos dicho claramente que no vamos a modificar esa figura, que respetamos las exigencias de extradición por parte de Estados Unidos, pero también es claro que en este momento a los miembros de las autodefensas que están solicitados en extradición, pero que están conversando con el gobierno, les estamos ofreciendo todas las garantías para que continúen el proceso de paz con nosotros. Mientras permanezcan en la Zona de Ubicación de Santa Fe de Ralito bajo control del Estado y contribuyendo de manera eficaz a la paz nacional, esta personas no serán capturadas. Esa garantía la mantenemos.

Igual daremos esa garantía, que es la establecida en la Ley 782, a los miembros del ELN y de las Farc. Pero los asuntos finales en torno a la justicia y reparación están por definir. Colombia está, a penas, explorando cómo es esta delicada ecuación entre la paz y la justicia y creemos que pasos como este van a alentar el debate, y vana llevar a que la sociedad en su conjunto y el Parlamento, definan los criterios de hasta dónde podemos llegar en esta materia.

P.- ¿Pero entonces mientras tanto las personas que estén concentradas tendrían que esperar para salir de esas zonas mientras no haya ese mecanismo jurídico?

R.- Claro. Las personas que estén negociando con el gobierno y estén comprometidas en delitos graves tienen que permanecer en zonas controladas por el gobierno como sucede en Santa Fe de Ralito. Ellos no van a tener la posibilidad de estar como cualquier ciudadano. No van a estar en unas zonas específicas puntuales bajo el control del gobierno, obviamente en su condición de voceros del grupo armado ilegal y cooperando activamente en la búsqueda de la paz nacional.

P.- entonces no van a ser zonas que funcionen igual que la del Cacique Nutibara porque hay que esperar ese mecanismo jurídico.

R.- No es claro que en este momento, por ejemplo en la zona de Ralito, las personas que permanecen allí no son capturadas. Ahora, la zona está establecida para un propósito político que es facilitar las negociaciones y se mantendrá con ese propósito. Y mientras se adelante el proceso, el gobierno ofrece todas las garantías a los miembros de los grupos armados ilegales para que permanezcan allí. Por supuesto que es lo mínimo que podemos ofrecer para poder hacer sostenible un proceso de paz. Pero el asunto final atinente al tema de la justicia está por resolver. Eso lo deben entender claramente las autodefensas. Nosotros lo decimos, claramente, ante el país y será la sociedad en su conjunto y, específicamente, el Parlamento quienes definirán hasta dónde podemos llegar en esta materia.

P.- ¿Podemos decir, entonces, que en esta fase lo que se está haciendo es que hay una desmovilización del grueso de la tropa paramilitar, mas la de los jefes va a quedar en indefinición hasta que se tramite la ley de alternatividad?

R.- hay un desmonte total del aparato militar. Por supuesto, las personas que puedan recibir indulto y amnistía lo recibirán. Pero todos conocen claramente la situación de algunos jefes de las autodefensas que están comprometidos en delitos atroces y además están solicitados en extradición. Ellos permanecerán en esta Zona de Ralito bajo protección del Estado y con el compromiso de adelantar el proceso de paz. y mientras permanezcan allí, el gobierno honrará el compromiso establecido en la Ley 782 y estas personas no serán capturadas.

P.- ¿Qué se sabe de Carlos Castaño. Hay una versión en el sentido de que estaría en Europa o en Israel?

R.- Ciencia Ficción. No sabemos absolutamente nada al respecto.

Muchas gracias”.