Presidente
Uribe invita a palmicultores a promover el cultivo de esta especie
PALMA DE ACEITE, GRAN MOTOR EN LA REACTIVACIÓN
SOCIAL
Santa Marta, 3 jun. (SNE).- Aumentar el
número de hectáreas
cultivadas de palma de aceite en el país, pidió este
jueves el presidente de la República, Álvaro Uribe
Vélez, a los productores de esta planta.
Para el Jefe de Estado, la meta es pasar
de las 205 mil hectáreas
existentes hoy a 280 mil al finalizar el cuatrienio, pues este
sector de la agricultura se está convirtiendo en un gran
motor de la reactivación social, compuesta por Siete Herramientas
de Equidad.
Explicó, durante la instalación del XXXII Congreso
Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, que éste es
un cultivo que permite generar ingresos hacia la revolución
educativa (primera herramienta) por la competitividad que demanda
la producción de la palma.
También la ampliación de la protección social
(segunda herramienta) porque, en la medida que reivindica amplias
masas campesinas, facilita el acceso de estas al sistema de protección.
Y, estimula la generación de empresas de economía
solidaria (tercera herramienta), como por ejemplo las sociedades
que se han formado en María la Baja, los alrededores de
Barrancabermeja y en el Sur de Bolívar.
“He visto un cultivo con unas prácticas que se acomodan
a la promoción de la economía solidaria, tanto al
hacer el tránsito de las normas laborales tradicionales
a unas relaciones laborales de economía solidaria que se
dan en muchas de las plantaciones, como al integrar el gran capital
y el pequeño propietario”, agregó Uribe.
Al mismo tiempo, el cultivo de la palma
de aceite permite, “de
manera excelente”, avanzar en el país de propietarios
(sexta herramienta) porque, “lo que amenaza el concepto de
empresa privada es la falta de capacidad del capitalismo para generar
nuevas empresas y nuevos empresarios”, pero en el caso de
la palma de aceite la situación es contraria.
CAFÉ Y PALMA, LA MISMA HISTORIA
Durante su intervención, el Presidente comparó la
historia del café con la situación que “vive” actualmente
la palma de aceite y dijo que por ello es muy optimista sobre las
posibilidades de crecimiento que tiene este sector en la agricultura.
Recordó a los asistentes al Congreso que cuando en el país
se dio inicio al cultivo del este grano, fueron muchos los escépticos
porque consideraban, entre otras, que Colombia no era competitiva,
lo que llevó al sector “a cometer varios errores”.
“Los errores fueron otros, no haber sembrado bastante café,
si quiera lo hicimos. El error fue haber acabado el café con
sombrío. El error fue no haber entrado a tiempo a las grandes
comercializadores internacionales de alimentos. El error fue no
haber empezado a tiempo la promoción de los cafés
especiales, la promoción del café orgánico,
la recuperación del café con sombrío y los
nuevos canales de mercadeo”, expresó.
Sin embargo, agregó, gracias a las políticas de
apoyo a la caficultura, el café orgánico –por
ejemplo- está creciendo al 50 y 60 por ciento anualmente
y se espera producir alrededor de dos millones de sacos del grano,
en el país.
Al mismo tiempo, para la recuperación del sector y proteger
500 mil familias que viven de esta economía, el Gobierno
trabaja la promoción de -lo que llamó Uribe- tres
conceptos: la producción de café orgánico,
la apertura de las tiendas de café con la marca ‘Juan
Valdez’ en el país y en el extranjero, y el aumento
de cultivos complementarios.
“Este año en las zonas cafeteras, en los pedacitos
de soca, donde se ha soqueado el café y se está esperando
la recuperación, se siembran 40 mil hectáreas de
maíz tecnificado, más las que se van a sembrar de
fríjol, el año pasado fueron 30 mil y bastante ayudaron
al ingreso del campesino cafetero”, indicó el Presidente.
COLOMBIA DEBE SER AMBICIOSA EN EL AGRO
Finalmente, el Presidente dijo a los cultivadores
y productores de palma de aceite que en el tema de la agricultura,
Colombia debe
ser más ambiciosa, porque es un factor que va a influir
mucho más, en el largo plazo, en la economía nacional,
como en el caso de México que hoy sustenta todo el crecimiento
de su economía y el empleo, en el agro.
“Por ejemplo, cuando uno sobrevuela del piedemonte al río
Orinoco, con los 300 mil kilómetros de esa sabana, unos
300 mil kilómetros con suelos malos pero que se pueden mejorar,
dice ¿y vamos a desperdiciar esto?, por eso en una visión
de Colombia en el largo plazo, tenemos que ser muy ambiciosos en
el agro”, insistió.
Por esta razón, no se puede subestimar y pasar por alto
sectores como el de la palma africana en Colombia y “ahora,
uno no puede escoger qué es lo que va a sembrar, uno tiene
que sembrar aquello en lo cual el país tiene ventajas potenciales
que se pueden convertir en ventajas reales.
La palma tiene una ventaja potencial de
gran importancia, convirtámosla
en ventaja real”.
|