| Testimonio
de los Jóvenes
Rurales "SOLAMENTE PIENSO EN SACAR ADELANTE
MI PROPIA MICROEMPRESA"
Simití, 26 jun. (SNE). Crear empresa es el gran sueño
de Leidy Cortés y Alvaro Mendoza, dos de los 5.300 muchachos
de todo el país que participaron el año anterior
en la fase experimental del programa Jóvenes Rurales.
Leidy y Alvaro, llegaron
muy temprano a Simití desde Santa
Rosa, Bolívar, para estar presentes en el lanzamiento oficial
de Jóvenes Rurales y dar testimonio de su experiencia como
beneficiarios de un programa que, como ellos mismo lo afirman,
logró darle un vuelco positivo a sus vidas y las de su familias.
Ahora, ambos solamente
piensan en la posibilidad de formar empresa, gracias a los proyectos
que lograron estructurar
durante su capacitación,
y generar empleos para contribuir con el progreso de sus municipios.
Para Leidy el curso fue
muy bueno, y la capacitación excelente. "Le
doy gracias a Dios por esto, es una alegría grandísima
y ahora solamente pienso en sacar adelante mi propia microempresa".
Por su parte Alvaro, egresado
del curso de minero empresarial, está convencido que ésta es una de las capacitaciones
que más beneficio le traerá a Santa Rosa.
"Por un lado ha mejorado la explotación minera, reduciendo
al mínimo la contaminación de las fuentes hídricas
donde se llevan a cabo los trabajos mineros. Por otro, la capacitación
nos ha permitido organizarnos y pensar en nuestras propias empresas,
no solamente mineras sino agropecuarias".
Esto, según Alvaro, no solamente hará posible brindarle
nuevas fuentes de trabajo a los mineros y a los campesinos de la
región, sino también alejar a los jóvenes
de la violencia.
"De esta manera estamos generando empleo y mejorando la calidad
de vida de los pequeños mineros y de los campesinos de la
serranía, y evitando que más jóvenes se especialicen
en la horrorosa empresa que financia la guerra en el sur de Bolívar
y en Colombia".
Una expectativa que comparte
Luis Alexander Torres, un campesino de Puerto Wilches, Santander,
quien luego
de recibir capacitación
como trabajador del cultivo de palma de aceite, logró conseguir
un empleo en una empresa de su pueblo.
"El programa de jóvenes rurales me permitió conseguir
un puesto de trabajo en una empresa, lo cual ha mejorado mi calidad
de vida y mi desarrollo personal"
Como ellos lo hicieron
en su momento, ahora Diana Morales, una joven del corregimiento
San Luis, en Simití, se alista con
mucho entusiasmo para comenzar su capacitación en el curso
de especies menores.
"Gracias al Sena tendremos la educación en la casa.
Esa es una oportunidad muy buena que voy a aprovechar mucho" dice
con mucha emoción Diana, quien dice que la idea es montar
un negocio para el sustento de su familia.
Igual ocurre con Carlos
Mario Ramírez, un pescador de Simití,
que se matriculó en el curso de defensa y recuperación
de ciénagas.
"El programa nos permitirá capacitarnos para ser jóvenes
productivos para nuestro país, para cuidar este recurso
que nos ha brindado la naturaleza, para defenderlo y recuperarlo
para que produzca más y mejores pescados para el bienestar
de nuestras familias".
Un anhelo de los casi
64 mil jóvenes de
todo el país
que ahora podrán pensar en nuevas opciones de vida y en
un país lleno de oportunidades.
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