Erradicación del trabajo infantil
WILMER CAMBIÓ LOS LADRILLOS POR LAS ARTESANÍAS
Nemocón (Cundinamarca), 11 mar (SNE). Durante por lo
menos siete de sus 13 años de vida, Wilmer, un niño
nacido en Nemocón (Cundinamarca), trabajó en la
elaboración de ladrillos. Es un trabajo que él
mismo considera "muy duro", por el cual muy pocas veces
recibió una remuneración económica que valiera
la pena. Pero esos años difíciles quedaron atrás,
cuando llegó a Nemocón el programa de erradicación
del trabajo infantil del Ministerio de la Protección Social.
Ahora su vida es muy diferente. Wilmer fabrica artesanías.
Junto con Wilmer, otros 250 niños, quienes asisten a
la escuela Patio Bonito de Nemocón, encontraron desde
hace ocho meses una alternativa de vida distinta del trabajo
pesado en las ladrilleras. Eso sucedió cuando los funcionarios
del Ministerio empezaron a ir, de casa en casa, sensibilizando
a los padres de familia acerca de la importancia de cuidar la
integridad de sus hijos y respetar sus derechos a la educación,
la salud, la nutrición y la recreación.
"Nosotros aprendimos que los niños no debemos trabajar,
cuando pasaron por nuestra casa y le contaron a mi mamá sobre
la posibilidad de hacer otras cosas en la tarde que no fuera
ir a cargar los ladrillos", dijo al respecto uno de estos
menores.
El proyecto del Ministerio en Nemocón no es sólo
que estos niños no vuelvan al trabajo en las ladrilleras,
sino también capacitarlos en la elaboración de
productos propios de la región, en artesanías y
utensilios que son comercializados dentro y fuera del país,
con el liderazgo del Ministerio y de otras entidades que apoyan
esta iniciativa.
Los niños en Nemocón dicen que la imagen que ellos
tenían de la vida era que habían nacido para estudiar
hasta la una de la tarde y para trabajar el resto del día
en los chircales. Pero ahora esta imagen es cosa del pasado.
"Ahora voy al colegio desde las siete de la mañana
y a partir de las dos de la tarde recibo capacitación
y cada día perfecciono más las vasijas que nos
ha enseñado a hacer el profesor y tenemos tiempo para
jugar y divertirnos. El trabajo no es un juego", dice Wilmer.
Los estudiantes de la escuela Patio Bonito
de Nemocón
que recibieron este miércoles la visita de la viceministra
de Asuntos Laborales, Luz Estella Arango, emocionados le contaron
cómo ha sido su experiencia con la capacitación
que otorga el programa y con las artesanías y utensilios
de arcilla que han aprendido a elaborar, como una alternativa
para ocupar su tiempo y generar ingresos, sin necesidad de dedicarse
al trabajo pesado en las ladrilleras.
"No pensé que nosotros, que nacimos entre familias
dedicadas al oficio de la fabricación de ladrillos, pudiéramos
aprender a hacer nuevas cosas. Esto lo queremos seguir adelante
para no volver a trabajar de la forma como lo hacíamos",
dijo Wilmer quien, orgulloso, le mostró a la Viceministra
los utensilios que, como cualquier artista que se respete, hacen él
y sus compañeros de escuela.
El padre de Wilmer continua con su trabajo
en los chircales. En cambio su mamá ha tenido la oportunidad de capacitarse,
gracias también al programa. "En los pocos meses
que llevamos hemos creado una asociación para la comercialización
de nuestros productos y hemos podido comercializarlos en Milán
y Miami", concluye la madre de niño.