COMENZARON
CON PIE DERECHO LAS NEGOCIACIONES DEL TLC
Cartagena, 18 may (SNE). Llegó la hora cero y comenzó el
proceso de negociación para lograr un Tratado de Libre
Comercio con Estados Unidos. El ánimo para el inicio de
este proceso no podía ser mejor.
Los líderes de negociación de Colombia, Ecuador,
Perú y Estados Unidos se mostraron complacidos por comenzar
un proceso que esperan desarrollar de manera acelerada, teniendo
como base las experiencias negociadoras de otros procesos.
"La idea de estas negociaciones es que tengamos un TLC
lo más antes posible con la cobertura que nos interesa
a todos los países", dijo el jefe del equipo negociador
de Perú, Pablo De La Flor.
Para Hernando José Gómez, quien encabeza el equipo
de Colombia, las expectativas de lograr un buen acuerdo son muchas.
Sin embargo no se puede olvidar que un tratado simplemente es
una herramienta y que su éxito depende de la implementación
que se haga en cada país y del provecho que sus empresarios
saque de él.
De acuerdo con Gómez, el buen ambiente expresado por
cada líder negociador, así como un fortalecimiento
en la posición unificada de los tres países andinos,
hacen prever un buen futuro.
"Creemos que vamos a ir con posiciones conjuntas en un
alto porcentaje de la negociación. Eso fortalece nuestra
capacidad de negociación porque la experiencia de otros
países como Centroamérica muestra que toda fisura
que Estados Unidos encuentre en los países será aprovechada
inmediatamente. Por eso nuestro objetivo es mostrarnos absolutamente
unidos, como debe ser, y focalizarnos en lo que tenemos más
coincidencias", dijo el jefe negociador colombiano.
Sabemos -agregó- que tenemos muy buenos equipos negociadores,
que estamos bien preparados y con objetivos claros. Eso es importante
para fortalecer nuestra capacidad de negociación.
La primera reunión sirve para presentar los objetivos
e intereses de cada país, con el fin de ir delineando
el proceso negociador. "Eso nos va a dar la plataforma para
el proceso de acordar diferentes asuntos y temas de negociación
que comenzaremos a desarrollar en la segunda ronda de negociación",
explicó Gómez.
Los negociadores andinos están seguros de que es un buen
momento para lograr los mejores resultados, porque ya se tiene
la experiencia de otros acuerdos, pero además se han preparado
lo suficiente para tener los mejores argumentos negociadores.
"Una de las ventajas de no ser los primeros en el TLC es
que nos montamos en una curva de aprendizaje, aprovechamos las
experiencias de otros países, las técnicas y fórmulas
que han utilizado. Tenemos una película mucho más
clara sobre cuáles son las diferentes alternativas que
se pueden plantear, y en ese sentido si bien no se puede decir
cómo vamos a manejar específicamente cada producto,
sí vamos a tener una agenda que permita una implementación
adecuada del tratado con transición y unos accesos a mercados
efectivos en Estados Unidos", aseguró el jefe del
equipo negociador colombiano.
Para Cristian Velasco, jefe negociador Ecuador, es importante
poner todas las cartas sobre la mesa y dejar claro que lo que
se busca es un libre mercado sin distorsiones.
"Vamos a ver lo que se plantea y qué tienen ellos
como una propuesta y si pueden atender nuestros pedidos. Vamos
a ver qué pasa, pero la idea principal es que todo está sobre
la mesa y allí vamos a defender todo lo que debemos defender
y a buscar un resultado de apertura para nuestros productos.
La negociación empieza a priori sin ninguna exclusión",
puntualizó.
Por su parte, De La Flor explicó que ese "todo está sobre
la mesa" significa no sólo negociar los temas de
acceso sino todos los que puedan tener alguna sensibilidad adicional
con respecto de la cual una apertura pueda resultar contraproducente,
si es que no se corrigen las distorsiones existentes.
"Nosotros estamos apostando por la construcción
de una zona de libre comercio pero además libre de distorsiones
para propiciar intercambios que puedan significar edificantes
y generadores de riqueza", reiteró De La Flor.
Con respecto a las mesas temáticas, los negociadores
explicaron que inicialmente serán 14, pero a medida que
avancen las negociaciones éstas se pueden ir subdividiendo,
de tal forma que en otras rondas puedan existir más mesas.
Por ejemplo, en la primera reunión se va a trabajar de
forma conjunta servicios transfronterizos y telecomunicaciones,
pero es probable que en un futuro, por el carácter particular
técnico de este último, sea útil trabajarlo
en una mesa específica.
"En esto tenemos mucha flexibilidad en el sentido que,
de acuerdo a las necesidades de la negociación, podremos
acordar mesas nuevas para hacer más eficiente el trabajo",
dijo el negociador colombiano. |