COMUNICADOS DE FEDECAFÉ Y
ESTADOS UNIDOS SOBRE REINGRESO A OIC
Bogotá, 21 may (SNE).- Con el fin de hacer claridad sobre las
posiciones del Gobierno de Estados Unidos y la Federación de Cafeteros,
sobre el reingreso de Estados Unidos a la OIC, enviamos a continuación
los dos comunicados textuales.
Cordialmente,
Servicio de Noticias del Estado.
Federación de Cafeteros lideró intensas gestiones diplomáticas
Inminente regreso de EE.UU. a la OIC
- El esperado anuncio fue hecho durante las
reuniones del Consejo Internacional del Café en Londres.
- La presión de Representantes a la Cámara y Senadores
de EE.UU. y el apoyo de la industria cafetera norteamericana fueron claves
para la decisión.
- Estados Unidos se retiró de la OIC en 1993, cuando se
hicieron los últimos intentos por revivir el Pacto del Café,
que se rompió el 4 de julio de 1989.
- "El regreso de Estados Unidos fortalecerá la construcción
de sólidas políticas para la solución de la crisis
cafetera": Gabriel Silva.
- "La reunión en la sede de la Federación
en Nueva York en marzo pasado con los representantes del Departamento
de Estado y el USTR fue fundamental para el proceso": Gabriel
Silva.
- La OIC amplía su agenda para trabajar en el
control de la calidad, la promoción del consumo y la conquista
de nuevos mercados.
- "Con precios justos, que permitan cubrir costos de producción
y dejen un margen de utilidad, los cafeteros de todo el mundo podrán
recuperar parte de lo que han perdido durante esta larga crisis":
Gabriel Silva.
Bogotá y Londres, mayo 21 de 2004 (Información
Cafetera) - El Gobierno de los Estados Unidos anunció hoy
oficialmente que regresará como miembro activo a la Organización
Internacional del Café (OIC) a partir de la reunión de
Septiembre, para ayudar a resolver la crisis que afronta el sector
desde hace varios años
y que ha ocasionado serios problemas económicos y sociales a 25
millones de familias productoras de todo el mundo.
La decisión fue anunciada al final de la reunión del
Consejo Internacional del Café, que concluyó hoy en Londres,
teniendo en cuenta que ya no hay pactos de precios ni control del mercado,
como ocurrió durante los 30 años que estuvo vigente el
Pacto Mundial del Café, y que en cambio ahora la Organización
está dedicada a controlar la calidad, promover el consumo mundial
y conquistar nuevos mercados. Washington realizará inmediatamente
los trámites administrativos y legales internos correspondientes
que involucran a la rama ejecutiva toda vez que no se requieren trámites
legislativos adicionales en el congreso.
El anuncio de la delegación oficial de observadores de Estados
Unidos a la Reunión de la OIC en curso, la primera en más
de una década, se logró después de dos años
de intensas gestiones diplomáticas que lideraron el Director Ejecutivo
de la OIC, el colombiano Néstor Osorio, el Gerente General de
la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia, Gabriel Silva,
con el apoyo del Gobierno del Presidente Alvaro Uribe y su Embajada en
Washington, los presidentes del Grupo de Países Productores de
Arábicos Lavados.
El regreso de Estados Unidos
a la OIC, organismo que ese país
ayudó a crear a comienzos de los años sesenta y del cual
se retiró en 1993, es fundamental para adoptar mecanismos que
permitan fortalecer el mercado y lograr una mayor justicia en los precios.
En los últimos años, debido a la sobreoferta y a la especulación
en el mercado internacional, las cotizaciones del café han caído
en más de 60% y los ingresos no alcanzan siquiera para cubrir
los costos de producción.
El Gerente General de la Federación, Gabriel Silva, celebró la
noticia y dijo que "el regreso de los Estados Unidos a la OIC no
sólo se constituye en una esperanza para 125 millones de personas
que dependen del café en más de 50 países productores,
sino que fortalece a la OIC como el máximo foro internacional
para el análisis y debate del futuro de la industria cafetera
mundial".
La clave, la promoción
de la calidad
"La decisión del Gobierno del presidente George Bush -dijo
Silva- la estábamos buscando desde hace más de dos años,
porque sin la participación del primer consumidor del mundo la
OIC no tiene el carácter de universalidad que se necesita para
que las decisiones tengan un impacto verdaderamente global ". Estados
Unidos compra, aproximadamente, el 25% de los 85 millones de sacos que
importan los países consumidores cada año.
Tanto los productores como
la industria torrefactora esperan ahora que los Estados Unidos apoyen
la aplicación de la Resolución
407 de la OIC con las modificaciones incluidas en la Resolución
420 del día de hoy. "Se calcula que cada año circulan
por el mundo entre 8 y 10 millones de sacos de café de ese tipo,
que al ser utilizados en las mezclas de la industria tostadora afectan
directamente a los consumidores", explicó el Gerente de Federacafé.
La Resolución 407 de la OIC, que ha recibido el apoyo de la
mayoría de los países productores, entró en vigencia
el 1° de octubre del 2002 en México, los países Centroamericanos
y en Colombia. De acuerdo con el primer balance de sus resultados, presentado
en la cumbre de Cartagena, durante el primer año se alcanzaron
a sacar del torrente cafetero mundial cerca de cuatro millones de sacos
de 60 kilos. Con el apoyo de Estados Unidos y otros países, la
cifra se podría duplicar.
Gabriel Silva dijo que "el mercado necesita de cafés de
calidad, si se avanza en la promoción del consumo mundial y se
mejoran los bajos niveles de consumo por habitante en la mayoría
de los países productores, como lo hizo Brasil, en pocos años
el sector quedará fortalecido para afrontar una crisis similar".
El consumo mundial de café se ha estancado en 4.5 kilos por habitante
al año.
"Si se logran resultados en esos frentes y repuntan los precios
por el mayor consumo se le pondrá un freno al avance de la sustitución
de cultivos de café por cultivos ilícitos, que se ha comenzado
a observar en Colombia, Perú, India y otros países productores",
aseguró el Gerente de Federacafé. Hasta el momento, en
Colombia se han detectado siembras de cultivos ilícitos en medio
de los cafetales en unas 25.000 hectáreas, cifra marginal comparada
con un parque cafetero que ronda las 800.000 hectáreas.
Gestión diplomática
El regreso de Estados Unidos
a la OIC es el resultado de una gestión
diplomática realizada en todo el mundo, que desde hace varios
años ha estado bajo el liderazgo de las autoridades cafeteras
colombianas.
Desde noviembre de 2001 la National
Coffee Association of América
y la Specialty Coffee Association of America hicieron un primer llamado
al presidente Bush para que estudiara el tema, a comienzos del 2002,
el presidente de la Comisión Europea, Romano Prodi, y los gobiernos
de los Países Bajos también se pronunciaron en igual sentido,
pero no se pudo avanzar.
En julio del 2002, poco después de su posesión como nuevo
Gerente de Federacafé, Gabriel Silva viajó a los Estados
Unidos para atender una invitación de un grupo de parlamentarios
que quería conocer más sobre la crisis y sus efectos para
Colombia y los demás países productores de América
Latina. Con esa visita y la difusión mundial que hizo en septiembre
la Organización No Gubernamental Oxfam en todo el mundo sobre
los efectos de la crisis, el tema volvió al debate de la política
económica mundial.
Posteriormente, en nuevas reuniones
del Gerente de Federacafé con
parlamentarios del Comité de Relaciones Internacionales de la
Cámara de Representantes de Estados Unidos y la Embajada en Bogotá,
se analizaron los efectos de la crisis y el crecimiento de los cultivos
ilícitos en las zonas cafeteras, y se concluyó que era
recomendable que Estados Unidos regresara a la OIC.
En la Reunión del Consejo Internacional del Café, en
septiembre del 2002 en Londres, se expidió la Resolución
413 invitando oficialmente a los Estados Unidos a tomar una decisión.
Desde entonces, representantes de algunos países centroamericanos,
el Director Ejecutivo de la OIC y el Gerente de Federacafé intensificaron
sus gestiones ante el Gobierno Bush.
Gabriel Silva realizó otra visita en abril de 2003 a las principales
agencias del Gobierno Bush, con el apoyo de Honduras y la participación
de delegados de varios países del Grupo de Arábigos Lavados,
que fue muy fructífera porque se consiguió el apoyo conjunto
de la National Coffee Association y la Specialty Coffee Association,
principales agremiaciones de la industria cafetera norteamericana.
Los presidentes de Centroamérica y el Presidente Álvaro
Uribe, que se habían pronunciado en la cumbre de Quebec y en las
reuniones de Lima y República Dominicana, le enviaron una carta
al Presidente Bush en la que resaltaban la importancia de que su país
trabaje de la mano de los demás países productores y consumidores
en la OIC para buscarle soluciones a la crisis cafetera. El Presidente
Bush les respondió que su gobierno iba a considerar cuidadosamente
esa solicitud.
Las últimas gestiones
El 8 de septiembre pasado, el
Comité de Relaciones Internacionales
de la Cámara de Representantes de Estados Unidos le envió una
carta al Secretario de Estado, Colin Powell, en la cual, por primera
vez, solicitaron formalmente el regreso de ese país a la OIC.
Entre sus argumentos, destacaron que si no se adoptada esa decisión,
la seguridad nacional norteamericana estaría en juego ante el
crecimiento de los cultivos ilícitos en la zona cafetera colombiana
y el consiguiente aumento de los recursos para financiar actividades
narcoterroristas.
Una semana después, en la Cumbre Internacional del Café,
que conmemoró los 40 años de existencia de la organización
en Cartagena, los presidentes de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva; de
Honduras, Ricardo Maduro Joest, en representación de Centro América,
y de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, volvieron a insistir
sobre el tema.
El 24 de septiembre, el subsecretario
adjunto para asuntos legislativos del Departamento de Estado, Paul
Kelly, en
respuesta a los congresistas
que habían pedido el regreso, manifestó que estaban analizando
los beneficios que representaría esa decisión para Estados
Unidos. Para ello tuvieron en cuenta los informes de los dos representantes
de la Agencia de Cooperación de los Estados Unidos (USAID), que
asistieron a la Cumbre de la OIC en Cartagena.
De ese momento en adelante,
se sucedieron una serie de reuniones de varios representantes del Comité de Relaciones Internacionales
de la Cámara con Paul Kelly, el Subsecretario para Asuntos Económicos
del Departamento de Estado, Alan Larson; y Subsecretario de Estado, Richard
Armitage, para volver a analizar el tema y las alternativas de Estados
Unidos para ayudar a resolver la crisis cafetera.
En diciembre de 2003 se celebró una reunión entre las
distintas agencias de la Administración Bush que tienen injerencia
en el proceso para el regreso a la OIC. En esa reunión las agencias
estuvieron de acuerdo en que Estados Unidos debería volver a la
OIC y que sería necesario cumplir una serie de pasos antes de
hacer un anuncio definitivo.
En enero de 2004 el proceso
entró en su recta final. Una delegación
del Departamento de Estado y de la Oficina del Representante Comercial
de los Estados Unidos (USTR) visitó la sede de la OIC en Londres
y se reunió con el Director Ejecutivo de la OIC y con los Embajadores
en Londres de Colombia y de algunos países centroamericanos. El
objetivo era conocer por dentro a la Organización, sus programas,
el presupuesto, el procedimiento para la toma decisiones, el número
de miembros, entre otros.
El pasado 15 de marzo, la Federación de Cafeteros de Colombia
convocó a una reunión en sus oficinas en Nueva York a los
países productores de cafés arábigos lavados (México,
Honduras, Guatemala El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica y Colombia),
al Director de la OIC y a los representantes del Departamento de Estado
y del USTR. Dicha reunión sirvió para ultimar algunos de
los detalles que Estados Unidos quería resolver antes de su ingreso
y al mismo tiempo para obtener la cooperación de los países
asistentes en la resolución de ciertas preocupaciones que tenían
los norteamericanos frente algunas disposiciones del Acuerdo Internacional
del Café y sobre los instrumentos implementados por la OIC en
el Programa de Mejoramiento de la Calidad del Café. El Gerente
de la Federación, Gabriel Silva, manifestó que la "reunión
en la sede de la Federación en Nueva York fue fundamental para
el proceso porque generó las soluciones a las preocupaciones de
Estados Unidos en varios de los temas claves de la OIC y hubieran podido
retrasar la decisión".
La importancia de que los Estados Unidos sean miembros de la OIC
La argumentación esgrimida por el Gerente de la Federación
de Cafeteros para convencer a los Estados Unidos de regresar a la OIC
y que fue acogida por los países productores que acompañaron
la gestión diplomática, se basó en la necesidad
de la cooperación multilateral para resolver un problema de una
enorme dimensión social: la crisis cafetera internacional. Los
principales puntos fueron los siguientes:
- La crisis ha tenido graves consecuencias sociales,
económicas
y políticas en los países productores (y en los Estados
Unidos). Su efecto más inmediato ha sido el de afectar la
sostenibilidad de la industria cafetera mundial.
- La gravedad de la situación y la desesperación de
los caficultores es tal que lo que se debe hacer es evitar los desacuerdos
y las confrontaciones
en la industria y fomentar e incrementar la cooperación para
resolver la crisis.
- La crisis no solamente tiene su origen en
la sobreproducción,
también obedece a un descenso en el consumo. Parte de la solución
a la misma descansa en estrategias innovadoras y orientadas hacia
el mercado que fomenten el consumo.
- La Alianza Global para el Desarrollo
es parte de la solución.
El gobierno, la sociedad civil y el sector privado todos convergen
en la OIC, habilitando a dicha organización para coordinar
y gerenciar proyectos a una escala mundial.
- El mercado de café está completamente
interrelacionado y su carácter global hace que cualquier acción
en uno de los componentes de la cadena influya en el resultado general.
- La necesidad de construir alianzas y estrategias
de largo plazo requiere de un marco institucional permanente para
coordinar y darle las bases
legales, políticas y duraderas a una acción conjunta
de carácter internacional.
- La nueva OIC es la plataforma ideal
para construir el consenso sobre la base de soluciones multilaterales
orientadas al mercado y de proveer
los instrumentos para implementar las políticas, programas
y proyectos.
El ingreso de Estados
Unidos a la OIC otorgaría
beneficios concretos:
Políticos:
- Una expresión de voluntad a muy bajo costo para cooperar en
la solución de una crisis que afecta 25 millones de familias.
- Liderazgo en la agenda cafetera internacional y capacidad para influenciar
todas sus iniciativas
Fortalecimiento de los principios democráticos y de las soluciones
basadas en el libre mercado.
Sociales:
- El café no es solamente un producto, es una red social que sostiene
la estabilidad y el bienestar. Por ello, el ingreso a la OIC y las acciones
concretas para enfrentar la crisis cafetera mejorarán la estabilidad
social y el bienestar en los países productores.
- Una industria cafetera fuerte y consolidada
es la mejor política
antinarcóticos ya que la sustitución de café por
cultivos ilícitos es fácil y común.
Económicos:
- El café es el segundo producto básico, detrás
del petróleo, más comercializado en el mundo. Su producción
representa un importante porcentaje del PIB y del ingreso por exportaciones
de la mayoría de los países productores, que a su vez
son importantes consumidores de productos estadounidenses.
- La OIC es
el vehículo apropiado para defender la sostenibilidad
de la industria cafetera.
- La OIC es el lugar donde se pueden ejecutar
políticas domésticas
orientadas al mercado.
- La OIC es el lugar para coordinar la apertura
de nuevos mercados e incrementar el consumo de café.
- El ingreso
a la OIC permitiría defender la diversidad de proveedores
y la multiplicidad de orígenes del café, así como
defender la calidad para proteger a los consumidores.
- El ingreso a
la OIC permitirá a la industria de los Estados Unidos
fortalecer sus relaciones con los países productores.
PRONUNCIAMIENTO DE ESTADOS UNIDOS
(TRADUCCIÓN NO
OFICIAL)
"Declaración de Estados Unidos con respecto a la reunión
de la OIC
Estados Unidos participó en reuniones de la Organización
Internacional del Café (OIC) al margen de las mismas. Discutimos
con la OIC los términos de una eventual reintegración de
los Estados Unidos a dicha organización.
Aunque entendemos que ser miembros
de la OIC no solucionará la
crisis del café, estamos conscientes de que la organización
tiene un rol muy importante al unir a todas las partes involucradas.
Logramos un buen progreso al
resolver nuestras preocupaciones y al dejar claras las condiciones
que podrían hacer posible que Estados Unidos
se reintegre a la Organización Internacional del Café.
Estas acciones nos proporcionan
una fundación firme para completar
nuestras deliberaciones y para tomar una decisión final referente
a nuestro reintegro a la OIC en un futuro cercano.
Queremos agradecer a los miembros
de la OIC y a la Secretaría
de la OIC su cooperación y arduo trabajo".
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