30 PROYECTOS COMPITEN POR PREMIOS DEL PRIMER CONCURSO DE BIOCOMERCIO SOSTENIBLE

Bogotá, 3 sep. (SNE).- Vinos de frutas producidos por indígenas del Cauca, jabones y shampoo fabricados por campesinos de Cundinamarca, artesanías elaboradas por mujeres de Nariño, plantas medicinales de Antioquia y Córdoba, café orgánico de Caldas, marañón del Meta, panela del Huila y caucho del Caquetá, instrumentos musicales del Valle y turismo ecológico de Risaralda, figuran entre una treintena de iniciativas finalistas del Primer Concurso Nacional de Biocomercio Sostenible Comunitario, informó el Instituto Alexander von Humboldt, organizador del evento.

Siete asociaciones campesinas comunitarias, cinco cooperativas, incluyendo una constituida sólo por mujeres, cuatro organizaciones afrocolombianas y dos etnias indígenas fueron seleccionadas como finalistas entre casi 200 participantes de 28 departamentos.

Ciento cuarenta y tres iniciativas calificaron en una preselección inicial, de las cuales 93 sometieron a evaluación del comité técnico de Biocomercio una versión preliminar de sus planes de negocios.

Cundinamarca (15%), Antioquia (12%) y Valle del Cauca (11%) fueron los departamentos con el mayor número de inscripciones.

Sesenta y dos por ciento de las iniciativas preseleccionadas estaban ubicadas en la categoría Sistemas Agropecuarios Sostenibles, 38% en la de Productos Naturales No Maderables, 24% en Ecoturismo y 10% en Productos Maderables.

Una vez evaluadas las propuestas ajustadas, fueron elegidas 30 iniciativas comunitarias.

Con el fin de apoyar en el mejoramiento de sus planes de negocios, se realizaron en Bogotá y Cali talleres de desarrollo empresarial donde las comunidades recibieron capacitación sobre planes de negocios.

Un jurado, conformado por representantes de Finagro, Innovar, la Universidad de los Andes y el Instituto Humboldt elegirá, finalmente, los seis mejores planes de negocios.

El jurado evalúa el impacto de cada iniciativa en la generación de empleo, el no aprovechamiento de especies o ecosistemas considerados frágiles o en peligro y el respeto por los derechos de los pueblos indígenas y las comunidades afrocolombianas.

El concurso busca estimular a las comunidades que incorporan los criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica en sus modelos empresariales, explicó al respecto José Antonio Gómez, coordinador nacional de Biocomercio Sostenible del Humboldt.

El biocomercio, definido por Gómez como el comercio de productos y servicios provenientes de la diversidad biológica, está permitido legalmente desde hace cuatro años en Colombia, país reconocido por la ONU como una de las cinco naciones megadiversas en todo el planeta.

En efecto, Colombia alberga el 15 por ciento del total de las especies terrestres conocidas. Posee, en este contexto, 45 mil especies de plantas, 1.766 de aves, 583 de anfibios, 475 de reptiles y 454 de mamíferos.

Existen en Colombia seis mil plantas con algún tipo de propiedades medicinales, cuyo mercado mundial mueve cada año 20 billones de dólares.

Asimismo es el primer país del mundo en variedad de mariposas: 3.500 especies diurnas y 45 mil nocturnas. El mercado mundial de mariposas disecadas fue el último año de cinco millones de dólares.

Seje, inchi, sábila, añil, achiote, estropajo, marañón, heliconias, café y panela orgánica, frutales, aceites esenciales, condimentos naturales, artesanías a partir de fibras naturales y paisajes incomparables para el desarrollo del turismo ecológico, constituyen una muestra mínima del potencial biodiverso nacional, que representa una ventaja comparativa para Colombia en el mercado internacional de recursos renovables y cuyo valor fue estimado por la Unctad el último año en 900 mil millones de dólares, destaca Gómez.

Miles de campesinos e indígenas colombianos elaboran productos a partir de vegetales y animales, y algunas de sus iniciativas ya se abren paso en el mercado mundial.

En este contexto, el Instituto Humboldt ayuda a empresarios y organizaciones comunitarias que producen bienes y servicios derivados del uso sostenible de la biodiversidad, con el fin de prepararlas y fortalecerlas para dar pasos significativos en el nuevo y prometedor negocio.

En esta tarea, la oficina de Biocomercio del Humboldt recibe el apoyo de Proexport, Banco Mundial, la CAF y el Fondo Ambiental Mundial.

El Primer Concurso Nacional de Biocomercio Sostenible Comunitario hace parte de toda una suma de esfuerzos por alentar iniciativas de producción y comercialización de bienes y servicios amigables con la naturaleza, insistió Gómez.

La premiación del Primer Concurso Nacional Comunitario de Biocomercio Sostenible está prevista para el próximo martes 7 de septiembre en Bogotá, con la presencia de funcionarios de alto rango del Gobierno colombiano, el cuerpo diplomático acreditado en esta capital académicos, economistas y expertos en la materia.