Se preguntan ministros
de Agricultura y Ambiente
¿HAY INTERESES OSCUROS PARA QUE
NO SE APRUEBE LA LEY FORESTAL?
Bogotá, 13 dic (SNE). Al explicar que la Ley Forestal establece
controles más eficaces para impedir la explotación
ilegal del bosque, el ministro de Agricultura, Andrés Felipe
Arias, se preguntó si la resistencia a que se apruebe este
proyecto de ley en la Cámara de Representantes, por parte
de algunas personas, pueda obedecer a “intereses oscuros” que
hay de por medio.
“¿Será –se preguntó– que
hay algunos sectores interesados en que se mantenga el statu quo
para que se siga atentando contra el bosque natural? ¿Será que
hay algunas personas que hoy tienen negocios en madera que se aprovechan
del bosque natural y no quieren que este proyecto pase, para que
el Gobierno no pueda tener más herramientas de control y
sanciones más rigurosas contra este tipo de actividad? ¿Será que
hay personas que tienen negocios de reforestación que no
quieren que nadie más les entre a competir?”.
De acuerdo con el Ministro de Agricultura,
el interés del
Gobierno, al impulsar la Ley Forestal, es: “primero, construir
lo que falta para que el sector forestal pueda constituirse en
un factor de desarrollo. Falta la estabilidad jurídica y
la confianza y el proyecto de ley logra estas dos cosas. Y segundo,
ordenar y hacer más riguroso el control sobre el bosque
natural. Ambos objetivos van de la mano. Porque si doy incentivos
para que se siembren más árboles en reforestación
comercial, por supuesto que se alivia la presión sobre el
bosque natural”.
Señaló que de las 25 millones de hectáreas
disponibles, sólo se han sembrado 200 mil en plantaciones
forestales (menos del 1 por ciento): “Lo que queremos es
que esas 25 millones de hectáreas que hoy están dedicadas
a ganadería extensiva y no generan empleo, se puedan sustituir
por esta actividad forestal, tomando en cuenta que cinco hectáreas
forestales generan un empleo. En tanto que en ganadería
extensiva se necesitan hasta 100 hectáreas para generar
un empleo”.
Recordó que el proyecto de Ley Forestal mantiene intactos
los artículos 1, 13 y 14 de la Ley Segunda de 1959, que
crea, constituye y desarrolla las zonas de reserva forestal y los
parques naturales. Esto quiere decir que dichas áreas quedan
protegidas y no se puede ejecutar en ellas ningún tipo de
actividad de explotación forestal.
Citó que, dentro del trámite del proyecto, se han
celebrado más de 40 foros en distintas regiones del país
y con distintos sectores y comunidades: “Resultado de estos
foros y de toda la discusión con las bancadas del parlamento
que representan a estas comunidades, se tomó la decisión
de excluir a los territorios indígenas y a los territorios
afrocolombianos”.
El Ministro de Agricultura destacó el aporte que han hecho
instituciones y personas, como es el caso del caso del Procurador
General de la Nación, quien planteó “objeciones
concretas, serias y valederas, las cuales respetamos y acatamos”.
Esto –afirmó– no ha ocurrido con otros voceros
que han recurrido a “cuestionamientos esotéricos,
gaseosos, metafísicos y con adjetivos peyorativos”.
HABLA MINAMBIENTE
Por su parte, la ministra de Ambiente,
Sandra Suárez Pérez,
indicó que el proyecto de Ley Forestal surgió, en
el seno del Gobierno, como una necesidad para poner al país
al día en materia de normatividad, ya que la que actualmente
existe (la Ley Segunda de 1959 y el Código de Recursos Naturales
de 1974) es obsoleta y no permite impedir que se atente contra
el bosque natural.
Llamó la atención sobre el parágrafo 1 del
artículo 22 del proyecto de Ley Forestal que cursa en la
plenaria de la Cámara de Representantes, el cual es muy
claro en prohibir el cambio del uso del suelo. Ese parágrafo
establece que “no se puede efectuar eliminación de
bosques naturales con fines de ejecución de actividades
agropecuarias, ni de establecimiento de plantaciones forestales”.
Esto, en cambio, según la Ministra, “sí se
permite hoy a la luz del Código Nacional de Recursos Naturales,
norma que ya cumple 30 años”.
La Ministra citó cifras del Ideam según las cuales
cada año se talan 100 mil hectáreas de bosque en
Colombia, flagelo que es imposible de detener si no se cuenta con
las herramientas necesarias para ello. “¿Por qué hoy
tumban selva para sembrar palma?”, preguntó. “Porque
eso está habilitado por el Código de Recursos Naturales”,
dijo. |