PALABRAS DE MORITZ
AKERMAN, REPRESENTANTE DEL GRUPO DE GARANTES
La Habana (Cuba), 16 dic. (SNE).- Inició este viernes en
La Habana (Cuba), la Reunión Formal Exploratoria entre el
Gobierno Nacional y la guerrilla del ELN.
Al acto inaugural asistieron
Rafael Bauzá Céspedes,
viceministro de relaciones exteriores de Cuba; Bernardino León,
subsecretario del Ministerio de Relaciones Exteriores de España;
miembros de las delegaciones del grupo de países acompañantes
de España, Suiza y Noruega; la ex canciller María
Emma Mejía; el nobel colombiano, Gabriel García Márquez,
los senadores Carlos Gaviria y Antonio Navarro Wolf y varios miembros
de la sociedad civil colombiana.
A continuación las palabras de, en representación
de los países acompañantes del proceso de paz Moritz
Akerman, representante del grupo de garantes ciudadanos:
“El momento es de exhortación, cese la guerra entre
hermanos. Está prohibido detenernos en este camino cuya
meta es la paz.
Los garantes ciudadanos sentimos que el
pueblo colombiano aspira a que se inicie un proceso ininterrumpido,
serio y cierto, que
termine en la paz, a través de la solución política
negociada y que contribuya al fin de la guerra.
Coincide esta aspiración de la sociedad con un momento
oportuno para la negociación: en el Continente, movimientos
alternativos por el camino democrático han conquistado la
conducción de algunos Estados y en Colombia, la conducción
de alguna de las principales ciudades y regiones.
Los centros neurálgicos de poder del mundo, rodean a Colombia
en favor de la solución política, están claramente
definidos los contrarios, cohesionados sus pensamientos y sus fuerzas
y tienen el suficiente liderazgo para hacer inobjetable las concesiones
que toda negociación implica. Ustedes no pueden decirse “no”,
menos pueden decirle “no” a la sociedad y al mundo.
Existen otros desafíos, los tiempos y los espacios de negociación
se agotan, las condiciones jurídicas se estrechan, la prolongación
del conflicto lo degrada y genera paramilitarismo, las dirigencias
tienden a atomizarse, el narcotráfico debilita todas las
legitimidades reproduciendo el conflicto, las negociaciones infructuosas
aprisionan como una pesadilla el alma nacional y minan la esperanza.
La exploración que hoy inicia, puede no terminar en ésta
reunión, pero debe ser definida en el tiempo, requiere reglas
claras de juego, procedimiento precisos que permitan afrontar las
eventualidades, definición de roles para los acompañantes
internacionales, para los garantes ciudadanos y la sociedad civil,
condiciones de movilidad, seguridad y garantía para las
reuniones y los negociadores.
Pensamos que el carácter del proceso, debería implicar
la definición política del diálogo y el estatus
para los negociadores.
Las reuniones de exploración, necesariamente han de transformase
en reuniones de negociación serias y ciertas que hagan efectiva
la solución política del conflicto. Estamos esperando
alivios para la sociedad que generen esperanza y acompañamiento.
Sólo la negociación dará a la Casa de Paz,
un papel en la generación de un movimiento ciudadano que
acompañe el proceso y produzca insumos para la mesa.
La negociación para la superación del conflicto,
es asunto de los colombianos. Nadie puede negociar por nosotros.
Pero si bien, las raíces que originaron este conflicto son
histórico nacionales, también hay factores internacionales
que contribuyen hoy a determinarlo, por eso, no hay solución
enteramente nacional, es un desafío encontrar el equilibrio
entre el acompañamiento internacional y el sentir de autosuficiencia
nacional.
La continuación de la guerra es la mayor amenaza a nuestra
soberanía, el acompañamiento internacional no es
cesión de la soberanía, es la iniciativa temporal
internacional buscando fórmulas que coadyuven a que un país
soberanamente tome las decisiones que garanticen una negociación
exitosa que brinde caminos democráticos para elevar la convivencia
y profundizar la democracia, dando así contenido sólido
a la paz.
Este camino es largo, comencemos ya. Gustavo
Ruiz, Álvaro
Jiménez, Daniel García Peña, Alejo Vargas,
Moritz Akerman.
La Habana, Cuba, Diciembre 16 de 2005 |