Cartagena, 10 feb. (SNE).- Con dos propuestas
concretas llegó el
equipo negociador colombiano a la mesa agrícola que se
comenzó a discutir al medio día de este jueves,
en el desarrollo de la VII Ronda de Negociaciones que buscan
un Tratado de Libre Comercio (TLC) con estados Unidos.
El ministro de Agricultura y Desarrollo
Rural, Andrés
Felipe Arias, explicó que el sector lácteo es el
de más potencial ofensivo exportador en este tratado y
por eso es el primer paquete concreto que el gobierno colombiano
ha planteado, el cual fue acordado con el sector privado y que
genera muchas ventajas y oportunidades en materia de generación
de empleo.
“El paquete tiene temas técnicos puntuales de contingentes,
aranceles, tasas de crecimiento de los contingentes, plazos de
desgravación, condiciones con respecto a los subsidios
a la exportación que Estados Unidos otorga y eso es lo
que vamos a plantear para ver con qué responde el equipo
negociador norteamericano”, explicó Arias.
El jefe de la cartera agropecuaria dijo
que el Gobierno colombiano ya está listo para negociar paquetes completos y dos de
ellos son parte de la propuesta que se llevó a la mesa
hoy: el denominado “Cero por Cero” (productos donde
no hay sensibilidades) y el lácteo.
El paquete denominado “Cero por Cero”, pretende
que las partes (Colombia y Estados Unidos) logren una canasta
de desgravación inmediata, es decir, entren sin arancel
de forma inmediata tan pronto entre en operación el Tratado,
con productos en los cuales no hay mayor inconveniente.
Allí habrá productos de la cadena hortifrutícola
y de alcoholes, productos que pueden ser de bajo o mediano interés
para los países pero con gran potencial exportador para
Colombia.
“El cero por cero más que un paquete concreto para
Colombia, que le genere comercio importante, es una especie de
primer paso y de señal de avance en la mesa y eso es lo
que Colombia quiere en este momento”, dijo el Ministro.
Una vez se concrete el “Cero por Cero” y el paquete
lácteo, se podrá entrar a conversar sobre un paquete
de carne bovina y porcina, el sector avícola, la cadena
de maíz y alimentos balanceados.
Con respecto a la salvaguardia especial
agrícola, Arias
dijo que el texto ya está concertado entre los tres países
andinos (Colombia, Ecuador y Perú) y ya fue planteado
en la mesa.
El debate inicial en el tema giró en torno de los precios
que “dispararán” las salvaguardias agropecuarias,
en el sentido de determinar si se tienen en cuenta los promedios
de precio en un lapso determinado, o si se establecen precios
fijos para dar paso a la misma.
La salvaguardia agropecuaria se dispararía cuando los
precios internacionales bajen de cierto nivel, caso en el cual
los países afectados pueden colocar aranceles compensatorios.
Sin embargo, explicó el Embajador, cuando un producto
se va a liberar a 15 o 20 años, la razonabilidad de los
precios puede cambiar. De ahí que los andinos hayan propuesto
un promedio móvil de dos, tres o cuatro años.