PALABRAS
DEL PRESIDENTE EN CONGRESO DE SEGURIDAD PRIVADA DE ALTA
TECNOLOGÍA
Girardot (Cundinamarca), 28 jul.
(SNE).- La siguiente es la intervención del presidente Álvaro
Uribe Vélez en el XIV Congreso de Seguridad Privada
de Alta Tecnología:
“Acudo con mucha solidaridad a esta reunión.
A lo largo de mi carrera pública he sido distinguido
con la oportunidad –en todas las horas- de reunirme
con ustedes. He tendido ese privilegio.
Cuando era Senador de la República, cuando hacíamos
una especie de epístola insular por la Seguridad
Democrática desde la Gobernación de Antioquia
y cuando después le proponíamos esa política
al país entero.
Mantengo mucha gratitud por ustedes, apreciados compatriotas
de la seguridad privada.
Ustedes son un elemento fundamental
en un propósito
de la Patria: una Patria sin terrorismo, una Patria sin
guerrillas, una Patria sin paramilitares, una Patria
sin drogas ilícitas, una Patria sin corrupción.
Una Patria con orden, con libertades, con justicia social.
He escuchado con atención sus temas y vamos a
examinarlos con algún detenimiento.
Hace un año, en alguna reunión con su
junta directiva, promovida también por Nancy Patricia
(Gutiérrez, senadora), por el doctor Fabio, me
convirtieron a Nancy Patricia a este tema de la Seguridad
Democrática y está muy bien que lo hayan
hecho.
Hablábamos del tema del Sena. Una gran reforma
que se tramitó con el Ministro Juan Luis Londoño
(Q.E.P.D.) y que nos ha ayudado mucho a esa revolución
del Sena.
Vengo de reunirme durante muchas
horas del día
con el Congreso de Alcaldes colombianos en Pereira y
la verdad es que hoy mostramos un Sena con presencia
en toda Colombia. Eso es bien importante.
Ayer en Manizales graduaron muchísimos muchachos
del Sena, de Jóvenes Rurales, Jóvenes en
Acción. Eso sí que es importante.
Este año el Sena está capacitando 107
mil muchachos Jóvenes Rurales, son muchachos campesinos
bachilleres que no han ingresado a la universidad y que
no saben un oficio productivo. Allí, potenciales
reclutados de los grupos terroristas. ¿Qué estamos
haciendo?: mostrándoles un camino diferente.
Entonces se creó esa cuota
para las empresas de que por cada 20 empleados tuvieran
que pagar el valor
de un aprendiz.
Vinieron, después, reclamos. Muy justo el de
ustedes, porque realmente la seguridad privada es empleo.
Aquí no hay una estructura de costo diferente
a lo que se paga en mano de obra, algunas inversiones
que hay que hacer en armamento, en medios de comunicación,
etcétera. Y me gusta que, a pesar de las dificultades
que vimos inicialmente, hayan logrado superar eso.
¿Cómo lo lograron superar, doctor Darío?
- Darío Montoya,
director del Sena: Desde marzo
de 2004 el Consejo Directivo del Sena expidió una
exención de la cuota de aprendices por un año,
hasta marzo 29 de 2005. El 7 de abril se expidió un
decreto por parte del Ministerio de la Protección
en la misma dirección, haciendo la exención,
pero se requería la reglamentación por
parte del Consejo Directivo del Sena, la cual se hizo,
definitivamente excluyendo la cuota de aprendices de
las empresas de vigilancia, en julio 6 de 2005.
En este momento esa intención definitiva está para
la firma del señor Ministro de la Protección
(Diego Palacio) como presidente de nuestro Consejo Directivo.
Sin embargo, no hay en este momento obligación
de tener aprendices porque tuvimos cuidado en el acuerdo
de dejarlo así...
Presidente de la República: …hay que decir
que en materia de seguridad no se necesitan aprendices
porque en Colombia todos están aprendidos.
Darío Montoya: …porque había un
lapso entre marzo 29, que fue hasta cuando estuvo vigente
el acuerdo y el momento en que firme el Ministerio y
quede vigente ya el acuerdo definitivo de exención.
Sin embargo, en ese acuerdo habíamos dejado que,
como se cambiaba el listado de oficios del cual surge
la obligación de aprendices a las empresas y en
ese listado se excluían las empresas de vigilancia,
mientras se reglamentaba todo, quedaban exentas todas
las empresas del país. No solamente las de vigilancia,
de tener aprendices. Pero es un pequeño lapso
que por ahora no nos genera ningún problema de
multas ni de sanciones a ninguna empresa de vigilancia.
Presidente de la República: ¿Con el decreto
que está en cursos se corrige el problema definitivamente?
Darío Montoya: Sí señor,
totalmente.
Presidente de la República: Hernán (Sanín),
hágame un gran favor Superintendente (de Vigilancia
y Seguridad Privada). Apersónese usted, cójale
la firma al Ministro, hágaselo revisar –pero
no lo mande por correo-, sino usted, siéntese
y se toma un tintico mientras se lo revisa el director
de la jurídica y con el chulo de él me
lo lleva a mí y yo se lo firmo.
Le agradezco doctor Darío porque inicialmente
no veíamos espacio legal para el tema.
Quiero agradecerles inmensamente
la cooperación
de ustedes en lo que llamamos el Plan Neiva: que es la
integración de las empresas privadas de vigilancia
con la Policía, con el Ejército, para dar
seguridad. Muy importante.
¿Quién hay aquí de
Neiva?
¿Cómo van allá en
eso?
Asistente al Congreso: Donde
más se utilizó fue
para las fiestas de San Pedro donde hubo un policía
un guarda, un policía un guarda. ¿Qué función
cumplieron los guardas?: estaban presentes verificando
que no hubiera ladrones, si había algún
ladrón le avisaban al señor agente para
que hicieran lo pertinente.
Y se hacen reuniones cada mes,
cada dos meses, para sacar conclusiones de cómo va el trabajo señor
Presidente.
Presidente de la República: ¿Quién
está manejando ese tema por parte de la Policía
en el país, general (Alberto) Ruiz (Director Operativo
de la Policía)? ¿Qué cosas buenas
le ve y qué cosas tenemos que corregir? Porque
ese es un gran apoyo.
El apoyo de la seguridad privada
a la Fuerza Pública
es el puente para generalizar la alianza ciudadanía – Fuerza
Pública. Este país tiene un millón
164 mil kilómetros cuadrados, por fortuna todavía
hay 578 mil kilómetros cuadrados de selva, más
esta topografía.
Ayer estuve yo toda la tarde
en el Putumayo. Uno cree que por esta carretera que
va aquí a Neiva – Pitalito – Mocoa,
eso está allí. Un avioncito caza, que no
es el más veloz pero tampoco el más lento,
se demora de ese aeropuertico que hay allá en
Mocoa –que está aquí ya muy al norte
del Putumayo a Bogotá, hora y media- y esto está más
bien abiertico hasta el Huila. Hay que ver de ahí para
allá.
Donde nos volaron el puente en
el río Villalobos,
hay que ver qué es eso. Eso es el cruce de la
cordillera en la Bota caucana, donde nace la Cordillera
Oriental, el cruce entre el Putumayo y el Huila. Se empieza
a subir en el Putumayo todavía por detrás
del macizo colombiano y cuando se pasa al Huila ya se
ha cruzado la cordillera oriental.
Eso es topografía bastante difícil y selva.
Por más que crezcamos la Fuerza Pública –que
en este Gobierno la hemos crecido en 84 mil hombres,
más 12 mil policías cívicos, son
96 mil-, no alcanzamos.
Y una paradoja. Algunos me dicen: ‘Uribe, no más
guerra, inversión social’. Me echan el discurso
en público. Entonces yo explico: ‘no es
guerra, esa es la recuperación del orden, de la
libertad, es enfrentar este desafío del terrorismo
en un país que tiene una democracia que la honra’.
Y muchos de los que me critican
en público, en
privado me dicen: ‘necesitamos inversión
social pero también más policía’.
No hay alcalde de Colombia que no me pida las dos cosas
al mismo tiempo. No hay alcalde de Colombia que no me
pida: más inversión social, mejores vías
y más policía.
El conocimiento de este país, el diálogo
con mis compatriotas, son pruebas fehacientes de que
necesitamos llevar de la mano las dos cosas.
Ahora que se están desmovilizando esos grupos
paramilitares hay que ver mis coterráneos diciendo:
más policía para el Jordán, más
policía para la carretera San Rafael – San
Carlos, más policía para la carretera La
Ceja – Abejorral.
Ayer nos secuestraron dos biólogos en Córdoba,
en el Diamante, arriba de la represa de Urrá,
donde se acaban de desmovilizar los paras. Todo el mundo,
con razón, pidiendo más Fuerza Pública.
Necesitamos esa alianza ciudadanía – Fuerza
Pública, yo no veo más camino y ustedes
son un camino. Ustedes son una institución que
nos van conduciendo a que se dé eso. En la medida
en que ustedes nos ayuden con el Plan Neiva en todo el
país, se va dando la luz, se va abriendo la trocha,
se va dando el ejemplo para esa integración ciudadanía – Fuerza
Pública.
¿
Cuántas ciudades tenemos ya con el Plan Neiva?
- Hernán Sanín,
Superintendente de Vigilancia y Seguridad: 12.
- Presidente de la República: ¿Y cuántas
tienen programadas para este año? Necesito que
lleguemos a todos los departamentos, eso es una necesidad,
porque detrás de ustedes se anima toda la ciudadanía
a ayudarnos.
A mí me parece que lo que han hecho ustedes
en esas 12 ciudades, el señor General Ruíz,
el entusiasmo del Superintendente es muy bueno, pero
necesitamos crecerlo. Hemos mejorado, vamos ganando,
pero esto no lo hemos ganado.
Cuando yo muestro las cifras
de reducción de
secuestros, de reducción de homicidios, yo mismo
me digo esto: ‘claro que hemos disminuido mucho,
venimos de años de casi 30 mil asesinatos, terminamos
el primer semestre de este año con algo más
de 8 mil, eso es una reducción muy grande’,
pero cuando uno las muestra solas y el Primer Ministro
inglés (Tony Blair) le pregunta ¿cuántos
asesinatos se dieron en Colombia el primer semestre?,
y uno tener que decirle que se dieron 8.300 cuando allá se
dieron 300, eso es bastante complicado.
Tuvimos años de 3.050 secuestros. En el primer
semestre (de 2005) hubo 343, extorsivos mucho menos,
extorsivos 140, 160. Entonces, la tendencia es muy buena
pero todavía decir que hay más de 300 secuestros
en un semestre, en Colombia es mucho.
O sea que en esto no nos podemos
confiar. No podemos dormir con los dos ojos, hay que
dormir con un ojo abierto.
No hay más camino.
Y hay que ver todavía la preocupación
de nuestros compatriotas del Putumayo. Ayer tenía
que acompañar al doctor Darío a Manizales
a la graduación de los Jóvenes Rurales
en esa área y tenía que estar en la inauguración
del Centro de Convenciones de Pereira. Cancelé las
dos cosas y apenas metieron el último votico en
el Banco Interamericano (de Desarrollo), me fui para
el Putumayo, porque hay que estar es pensando en los
compatriotas en esas situaciones. Hay que ver la angustia
allá con una cosa bien importante: el fervor de
la gente para acompañar estas políticas.
Esos compatriotas del Putumayo,
con esa carretera aislada, con el puente Villalobos
destruido, con las torres de
energía en la cordillera de San Francisco en el
suelo, derribadas, sin energía, sin combustible,
con heridos, con carros quemados y hay que verles el
patriotismo y la firmeza para derrotar el terrorismo.
O sea que esta batalla todavía tiene un largo
trecho y necesitamos generalizar esa alianza ciudadanía – Fuerza
Pública. Y esto hay que acogerlo con mucha emoción.
Ya sabemos lo que necesita Colombia,
que es democracia. Que aquí a nadie se sanciona por lo que diga,
por lo que piense, por lo que escriba. Que haya oportunidades
democráticas para todo el mundo, que todo el mundo
pueda expresar su pensamiento político como quiera,
que la Fuerza Pública respete por igual y cuide
por igual al más fervoroso seguidor del Gobierno
y al más duro crítico del Gobierno.
¡Esto necesita dos cositas: democracia sin restricciones,
democracia pura, democracia de fondo; y una lucha firme,
totalmente determinada, con claridad, sin ambigüedades,
contra el terrorismo. Hay que llevar esas dos cositas
de la mano!.
¡El espíritu democrático
legitima y da autoridad moral para la lucha contra
el terrorismo!.
Y hay que ganar en ambas cosas,
pero ganar. Y eso necesita que esta Fuerza Pública heroica, que todos los
días aporta tanto sacrificio, la acompañemos
todos los ciudadanos. Pulamos ese Plan Neiva.
Hay cosas buenas, yo quiero hablarles
de cosas malas también. Por ejemplo: miremos la ciudad de Bogotá,
vitrina de la Nación ahora que la Nación
se ha vuelto a poner de moda para la inversión
extranjera, que la necesitamos.
Cosas buenas: en Bogotá no ha habido un solo
secuestro extorsivo este año, ni en Cundinamarca
tampoco. Hubo uno pero por ahí lo rescataron,
entonces ahí quedamos 1 – 1.
En Bogotá se ha mermado muchísimo la actividad
terrorista. Ahí hay cosas buenas.
Tenemos dos problemas: crecimiento
de homicidios y robo de vehículos. Nos tenemos
que aplicar a superar eso y nos tienen que ayudar ustedes.
Yo rogaría, general Ruiz, general (Freddy) Padilla
de León. El general Padilla de León, yo
le quiero rendir un homenaje porque es difícil
encontrar un soldado de su profesionalismo. Le he encomendado
unas tareas muy sensibles –como enfrentar todo
ese problema por las denuncias del Chocó- y a él
y al general (Jorge Daniel) Castro Castro (director de
la Polcía Nacional) les he encomendado la tarea
de la lucha contra el secuestro. Apersonados de tomar
las decisiones que haya que tomar para evitar el secuestro
y las decisiones que haya que tomar para rescatar secuestrados.
Hay que hacer ese gran esfuerzo
en Bogotá, para
reducir el homicidio y acabar con el robo de vehículos.
General Ruiz, apersónense de eso. Hernán,
revisemos qué pasa en la integración Fuerza
Pública – compañías privadas
de vigilancia.
Y demos un pasito: que las compañías privadas
de vigilancia nos ayuden con inteligencia. Porque nos
están ayudando –óigase bien y ojala
lo apuntáramos Hernán- con vigilancia y
con información, pero hace falta que nos ayuden
con inteligencia, a ver cómo vamos y acabamos
con los desguazaderos de carros en Bogotá.
Los colombianos son muy benignos
y buenas personas. Un Gobierno que les ha aumentado
los impuestos, un Gobierno
que les ha tenido que aumentar el precio del combustible –por
lo que ha pasado con el costo del petróleo- y
hay que ver la paciencia y la amabilidad y el afecto
de los colombianos por esta tarea de Gobierno. Pero el
Gobierno tiene que vivir mirando dónde tenemos
problemas.
Por ejemplo, quiero citar ese
problema de Bogotá,
entonces venía pensando en pedirles cositas a
ustedes. Nos han ayudado mucho en el Plan Neiva en vigilancia
y en información, pero nos tienen que ayudar en
inteligencia. En hacer inteligencia a ver cómo
frenamos el robo de carros en Bogotá y cómo
mostramos en Bogotá nuevamente una tendencia de
reducción del homicidio.
Yo diría que esa es una tarea principalísima.
Y cómo pasamos de las 12 ciudades que hoy tienen
el Plan Neiva, a los 32 departamentos de Colombia. La
colaboración de ustedes con la Fuerza Pública
es un ejemplo para que toda la ciudadanía colabore.