Objetivo central es proteger al cliente
financiero
NUEVO SUPERVISOR FINANCIERO ARRANCARÁ EN
EL 2006
Bogotá, 23 jun. (SNE). - A partir del 1° de
enero de 2006 comenzará a operar en Colombia un
nuevo supervisor financiero que nacerá de la fusión
de las superintendencias Bancaria y de Valores y vigilará a
867 empresas que tienen activos por 260 billones de pesos
y manejan recursos o inversiones de más de 20
millones de ciudadanos.
El asesor del Gobierno en este proceso, el ex presidente
de la Bolsa de Valores Augusto Acosta, explicó detalladamente
cómo se ha ejecutado el proyecto, qué viene
de ahora en adelante y cuáles son los cambios
que se presentarán.
El objetivo central de la fusión de las dos superintendencias
es proteger al consumidor financiero –léase
ahorrador, cuenta corrientista, inversionista, empresa
emisora de valores, el usuario de los créditos-,
mejorar la calidad de la supervisión y adecuar
la regulación a la nueva realidad del sector financiero
y de valores.
Aclaró que la meta no es simplemente buscar ahorros
y reducir las plantas de personal de los 895 funcionarios
que en la actualidad tienen las dos superintendencias.
Acosta sostuvo que la evolución que ha tenido
el sector financiero en el país, el cambio en
los portafolios de inversión que tuvo en los últimos
años, la cantidad de las operaciones que se hacen
a diario y las nuevas fuentes de ingresos del sistema,
obliga a que se modernice la regulación financiera
en el país que se quedó rezagada.
OBJETIVOS
“Queremos realmente que sea un nuevo supervisor
financiero. Esto no se trata de que una superintendencia
asuma las funciones de la otra, ni que sigan haciendo
lo mismo pero un poquito distinto, lo que queremos es
plantear un nuevo esquema de supervisor que responda
a las nuevas realidades del sistema financiero colombiano”,
explicó el asesor del Gobierno en la fusión
de las superintendencias Bancaria y de Valores.
¿Cuál es el tamaño del sector financiero?
De acuerdo con un estudio efectuado se encontró que
hoy la Superintendencia Bancaria supervisa a 318 entidades
de diferente tamaño y origen, hay 309 emisores
de títulos valores o papeles y que la Superintendencia
de Valores supervisa la actividad de 322 entidades que
son intermediarios de valores.
Y entre esas 322 hay 82 empresas que son vigiladas simultáneamente
por las dos superintendencias.
En total hay 867 entidades que hoy hacen parte del sistema
financiero colombiano y que tendrá que vigilar
el nuevo supervisor.
Esas 867 empresas tienen activos por 260 billones de
pesos, el 33 por ciento de esos activos están
representados en inversiones de portafolio de los establecimientos
de crédito, y entre esas empresas transan 12 billones
de pesos diarios en lo mercados de activos financieros.
Las 867 empresas serán agrupadas en 9 categorías:
administradores de pensiones y cesantías, administradores
de portafolios y fiduciarias, aseguradores e intermediarios,
casas de cambio, emisores, entidades públicas
de carácter especial, intermediarios financieros,
intermediarios del mercado de valores agropecuarios y
proveedores de infraestructura.
El ex presidente de la bolsa de valores señaló que
las actividades desarrolladas por estas empresas exponen
el sistema financiero y a los usuarios o clientes, a
diversos tipos de riesgos.
“El propósito central de la supervisión
y del nuevo supervisor financiero en Colombia es proteger
al consumidor financiero, ese es el núcleo del
tema y en esa función nos establecemos”,
puntualizó.
Las bases conceptuales sobre las cuales se efectuará la
supervisión será la de clasificar los riesgos
que se presentan en las actividades del sector financiero.
Para eso se clasifican los riesgos en globales y particulares
y entre los primeros están el crediticio, de mercados,
los de lavado de activos, etc.
“Lo que se trata es de prevenir los riesgos y
la adecuada prevención y manejo de estos riesgos
depende la estabilidad del sistema y, por lo tanto, la
protección del consumidor financiero”, sintetizó.
Acosta informó que aún no se tiene claro
cuál será el ahorro que logrará el
Estado con la fusión de las superintendencias
pero fue enfático en señalar que si habrá economías
al ser una sola entidad de supervisión.
Dentro del cronograma de trabajo que se está implementando
por la fusión de las superintendencias y con el
fin de evitar traumatismos en las empresas, se informó que
en septiembre comenzará a operar un plan de transición
que seguirá después de enero de 2006, cuando
comience a operar el nuevo supervisor financiero.
También se pondrá en funcionamiento un
programa de capacitación para informar sobre los
cambios que se pondrán en práctica.
Aún no se ha definido el nombre del nuevo organismo
supervisor del sistema financiero.