Quedó demostrado
en las elecciones de 2003
OPOSICIÓN NO TIENE PRETEXTO DE AUSENCIA DE GARANTÍAS
Bogotá, 31 mar. (SNE).– En Colombia ya
no existe el pretexto de que el Gobierno Nacional no
brinda garantías a la oposición. Esto quedó demostrado
en el referendo y las elecciones para gobernadores y
alcaldes de 2003.
En ese entonces los candidatos
de la oposición,
muchos de ellos provenientes de partidos de antiguas
guerrillas que antes eran asesinados, sintieron la protección
que les brindó la Seguridad Democrática
y, con el respaldo popular, alcanzaron posiciones de
importancia que nunca antes habían tenido.
De esta forma el presidente de
Colombia, Álvaro
Uribe Vélez, ilustró al Jefe del Gobierno
español, José Luis Rodríguez Zapatero,
sobre el proceso de profundización democrática
que avanza en Colombia y que le da a la sociedad y el
Estado colombiano el derecho de decir no a la violencia,
de calificarla como terrorismo y de no permitir que se
iguale a los soldados y policías de la Patria
con los terroristas, ni a las personas secuestradas con
los integrantes de esos grupos que están en las
cárceles.
“Le he contado a usted –refirió el
presidente Uribe–, las garantías que este
Gobierno ha dado para el ejercicio democrático.
Lo que pasó aquí con el referendo en el
año 2003, con la elección de alcaldes y
gobernadores: cómo sintieron candidatos de la
oposición, provenientes de partidos de antiguas
guerrillas que en el pasado los mataban, las garantías
de nuestra Seguridad Democrática. Cómo
pudieron llegar, protegidos de la Seguridad Democrática
del Estado y con el respaldo popular, a posiciones de
gran importancia”, dijo Uribe.
Durante la rueda de prensa que
cerró, este jueves,
la visita oficial al país del presidente Rodríguez
Zapatero, el Jefe de Estado colombiano recordó que
con todos los gobernadores y alcaldes que resultaron
elegidos en los comicios de 2003, el Ejecutivo ha construido
un proceso de gobernabilidad, “sin detenernos a
examinar el origen político que los condujo a
la elección”.
El presidente Uribe recordó que anteriormente,
en sus épocas de estudiante universitario, la
guerrilla colombiana justificaba en parte sus acciones
violentas con el argumento de que en el país no
se permitía la elección popular de alcaldes
y gobernadores. En distintos gobiernos se aplicaron no
sólo estos dos pasos simples de profundización
democrática sino otros muchos mecanismos de participación
ciudadana, que terminaron convirtiéndose en blanco
de los ataques de los violentos.
“Este país debatió –dijo–,
esos pasos simples de profundización democrática
durante más de un siglo. Se incorporó la
elección popular de alcaldes. La primera vez que
elegimos alcaldes, se aprobó la figura en el Gobierno
del presidente (Belisario) Betancur, siendo ministra
de Comunicaciones, nuestra hoy embajadora en España
(Noemí Sanín). Y se aplicó por primera
vez la figura en el Gobierno del presidente (Virgilio)
Barco, padre de nuestra muy distinguida Canciller.
“Después vino el Gobierno del presidente
Gaviria. La Constituyente. Se incorporaron cualquier
cantidad de elementos de participación democrática,
de mecanismos de participación ciudadana. Esa
Constituyente fue un buen balance entre democracia representativa
y democracia participativa, y se aprobó la elección
popular de Gobernadores”.
Este proceso de profundización democrática
ha dado un nuevo paso significativo con las garantías
que recibieron los candidatos de la oposición,
a través de la política estatal de Seguridad
Democrática, durante los citados comicios del
año 2003.
“Cuando eso ocurre en una democracia, esa democracia
por lo menos tiene el derecho de decir no a la violencia,
de calificar esa violencia como terrorismo y tiene el
derecho de decir: por favor, no nos igualen a los terroristas
con los soldados y policías. Por favor, no nos
igualen a los secuestrados con quienes están presos
en las cárceles”, concluyó el Presidente
de Colombia.