Dice el Presidente Uribe Vélez,
en Tibú
“VISIÓN SEGUNDO CENTENARIO: PLAN DE LARGO
PLAZO QUE GUÍE LA PATRIA”
Tibú (Norte de Santander), 7 may (SNE). El Plan “Visión
de Colombia Segundo Centenario” en el que trabaja
el Gobierno Nacional –a través del Departamento
de Planeación- y en el que se quiere fijar metas
económicas y sociales para los próximos 15
años, deberá ser un “plan que guíe
a la Patria en el largo plazo”.
Al iniciar el Consejo Comunal de Gobierno número
94, el presidente Álvaro Uribe Vélez señaló que
ese documento es una visión de largo plazo para
el 7 de agosto de 2019, cuando se cumplan dos siglos de
la Batalla de Boyacá y que contiene metas parciales
para el 20 de julio de 2010, cuando se cumplan 200 años
del Grito de Independencia (en la entonces Santafé de
Bogotá, Ocaña y Pamplona).
“Este Plan, ajustado a las metas del milenio, impone
grandes retos en cómo vamos a crear sociedad con
igualdad de oportunidades, grandes retos para derrotar
la pobreza, grandes retos para mejorar el ingreso”.
Uribe recordó que el jueves y viernes pasados,
el Gobierno revisó los temas de política
energética y minera, donde Norte de Santander tiene
que cumplir un gran futuro, “pues tiene petróleo,
carbón y será gran productora de combustibles
biológicos, por eso el impulso a la palma africana”.
En la reunión, también se analizaron los
temas de comunicaciones, educación, protección
social, cuáles son las metas y cómo se tienen
que cumplir para erradicar la pobreza.
El Mandatario señaló que los pasos siguientes
serán reuniones de discusión que adelantará Planeación
Nacional con el Congreso de la República, luego
con las diferentes ramas del poder público, alcaldes,
gobernadores, asambleas, concejos, gremios, sindicatos,
juntas de acción comunal, Juntas Administradoras
Locales (JAL) y con la Colombia trabajadora y empresarial.
Recalcó el Jefe de Estado que “es una visión
de largo plazo que guíe esta Patria, que permita
que la discusión de cada plan cuatrienal de desarrollo
no parta de cero, sino que haya un hilo conductor con el
que el país pueda avanzar hacia esa visión
de largo plazo”.
En este Plan se fijan las grandes metas en materia económica
y social que deberá cumplir Colombia en los próximos
15 años para lograr un país sustentado en
los principios de libertad, tolerancia, fraternidad, sin
exclusiones y basado en la igualdad de oportunidades.
El Plan señala que en el año 2019 la economía
debe ser eficiente y capaz de garantizar un mayor nivel
de bienestar, ser una sociedad más igualitaria y
solidaria, un Estado eficiente al servicio de los ciudadanos
y una sociedad donde haya ciudadanos libres y responsables.
El Plan fija cuatro grandes objetivos del 2005 al 2019,
que son:
Para desarrollar cada uno de estos cuatro objetivos se
trabajará en 16 estrategias.
METAS ECONÓMICAS
La meta es que la economía crezca al seis por ciento
y para ello hay tres condiciones necesarias: la revolución
educativa, un crecimiento liderado por las exportaciones,
mayor inversión extranjera y estabilidad macroeconómica,
y una reducción del déficit fiscal.
Las prioridades de inversión para lograr lo anterior,
serán: salud, educación, investigación
en ciencia y tecnología, infraestructura rural y
física.
En el corto plazo se disminuirá el gasto público,
se aumentará la capacidad exportadora, se recuperará la
demanda interna, se reducirá la volatilidad de la
economía. Estas medidas deben estar acompañadas
de una política monetaria prudente y consistente
con la política fiscal y cambiaria.
En el mediano y largo plazo, para reducir los niveles
de pobreza se tiene que elevar la capacidad exportadora
y consolidar la demanda interna por productos.
Se tiene que mejorar la utilización de las tierras
aptas para cultivar. Por ejemplo, de 10,4 millones de hectáreas
con vocación agrícola únicamente se
utilizan 4,2 millones, y de 20 millones para agro reforestación,
se emplean 18,9 millones.
METAS SOCIALES
Teniendo en cuenta que el objetivo es cerrar las brechas
sociales, regionales, de género, construir ciudades
amables, consolidar un país pluriétnico y
multicultural, una de las grandes metas es reducir la pobreza.
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En el año 2019 la pobreza, que hoy está en
un 51,5 por ciento, debe bajar al 15 por ciento.
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La indigencia
tiene que descender del 16,6 por ciento al 5 por ciento.
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El Producto Interno
Bruto (PIB) per cápita,
tendrá que pasar de 1.830 dólares a 4 mil
dólares.
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La tasa de desempleo
que actualmente promedia los niveles del 13 por ciento,
deberá caer al 6
por ciento en el año 2019. Se pretende aumentar
la empleabilidad de las mujeres, igualándola
a la de los hombres.
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Se debe consolidar
un sistema formal y eficiente de capacitación y formación laboral que sea
flexible de acuerdo con los requerimientos de la demanda
laboral y se tiene que desarrollar un sistema de protección
al desempleo.
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En educación las metas implican la reducción
a cero por ciento de la tasa de analfabetismo.
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Aumentar en 2,7 años el promedio de educación
para la población entre 15 y 24 años.
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Mantener una cobertura
del 100 por ciento en educación básica (preescolar, primaria y
secundaria) y aumentar al 40 por ciento la de la educación
superior.
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En salud el objetivo
es alcanzar una cobertura del 100 por ciento en el
régimen subsidiado de salud
en el año 2016.
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Reducir la
tasa de mortalidad materna e infantil.
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Mantener la prevalencia
general de infección
del VIH por debajo del 1,2 por ciento.
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Reducir en 85 por ciento la tasa de mortalidad
por malaria y dengue.
