DISCURSO DEL PRESIDENTE
URIBE DURANTE EXEQUIAS DEL REPRESENTANTE ROBERTO CAMACHO
Bogotá, Nov 22. (SNE). El
siguiente es el discurso del presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez,
durante las exequias del Representante a la Cámara Roberto
Camacho Weverberg.
“Despedimos hoy a un colombiano sobresaliente que dedicó su
vida a servir con eficacia y transparencia a la Patria.
Roberto Camacho Weverberg era un líder, un hombre de convicciones,
un servidor público intachable, un noble amigo y un extraordinario
miembro de familia.
Ganó el reconocimiento de su liderazgo por la credibilidad
derivada de la consistencia de sus tesis, que exponía por
igual ante los auditorios más favorables y también
ante los más adversos, y por la congruencia entre su prédica
y su comportamiento.
La solidez de su liderazgo se reflejaba
en la credibilidad entre quienes compartían y seguían sus creencias y orientaciones,
y quienes las controvertían.
Era de firmes convicciones en el debate
y de superior grandeza en la conciliación. De este ser puede decirse que producía
afecto por su persona, generaba confianza en su calidad humana
y aglutinaba respeto por sus actitudes.
En el difícil mundo del servicio público era un
exponente que no creaba reservas ni aun en la íntima suspicacia
de sus contradictores.
La decencia era la insignia de su vida
y de su acción pública.
Nos deja un bellísimo ejemplo a todos sus compatriotas
y el más grato recuerdo a su familia y amigos. A su señora
Lyda Salazar Moreno, a sus hijos Roberto, Juan Pablo y María
José, a su madre y a sus hermanos, la expresión del
afecto y solidaridad de todo el pueblo de Colombia.
A su Partido Conservador la manifestación de nuestro dolor
por esta irreparable pérdida.
Confieso que me duele su partida; en esta
difícil causa
de la Patria tenía en él a un compañero irreemplazable.
Vengo a decir ante su féretro lo que con tanta convicción
habría querido referirle en vida.
Su voz defendió tantas veces nuestra tarea con infinita
generosidad, que cualquier intención de gratitud me quedaría
corta.
Acudo a esta Catedral a transmitir unas palabras a quien siempre
hizo valer su palabra en favor de los intereses superiores de la
Patria.
Que desde el cielo nos ayude a amar a Colombia
como el la amo”. |