PALABRAS
DEL PRESIDENTE EN LA GRADUACIÓN DE 500 CHOCOANOS ALFABETIZADOS Quibdó (Chocó), 8 sep. (SNE).- El
siguiente es el discurso del presidente de la República, Álvaro
Uribe Vélez, durante la graduación de 500 chocoanos
alfabetizados a través del programa Nacional de Alfabetización
del ministerio de Educación:
“Me emociona mucho venir nuevamente al Chocó. Siempre
se alegra el alma cuando uno encuentra esta ciudadanía
cálida, afectuosa, vibrante, que ha sufrido tanto problema
pero que tiene tantos valores.
Quiero felicitar a la señora Ministra (de Educación,
Cecilia María Vélez) por liderar este gran programa,
que es un extraordinario componente de la Revolución Educativa.
A ella, a sus compañeros en el ministerio de Educación,
a los organismos nacionales e internacionales que están
cooperando, nuestra gratitud, nuestra felicitación y nuestro
aplauso.
Muchas gracias, profesor Julio Ibargue,
noble amigo y gobernador del Chocó, por su especial atención
a este programa tan bello.
Muchas, muchas felicitaciones a los graduandos.
Hoy aquí, 400 compatriotas se gradúan en el programa
de Alfabetización. ¡Qué esfuerzo tan grande!
La señora que acaba de pasar por el escenario pidió el
micrófono y nos dijo algo que no se me va a olvidar: “tengo
seis niños, todos están estudiando y ahora yo estudio
con ellos”.
El vídeo nos mostró cosas bellas. Uno de los colombianos
que aparece en el vídeo dice: “me habían
dicho que loro viejo no da la pata, pero también dicen
que nunca es tarde para aprender”. Lo valido es lo segundo.
La vida colombiana tiene que ser un proceso
permanente de estudio y de trabajo. De lo contrario, el país
no sale adelante. Ese esfuerzo que han hecho estos colombianos
para alfabetizarse,
merece nuestro aplauso, nuestro apoyo y que sigan estudiando.
La señora Ministrame dijo: “invítelos a
que después de esta graduación, en el aprendizaje
básico de escritura y de lectura, se gradúen haciendo
un esfuerzo de un año en primaria”. En nombre de
la señora Ministra les transmito esa invitación.
Nuestro primer interés es la Revolución Educativa.
La Revolución Educativa va a mejorar la capacidad de los
colombianos de trabajar, va a mejorar el producto del trabajo
de cada colombiano, la productividad. Va a mejorar la eficiencia
que es esa combinación de hacer las cosas de la mejor
calidad al menor costo y con el mejor ingreso. Va a ayudarnos
a construir un país justo, un país con equidad,
un país cristiano no solamente en el rezo, sino en la
práctica, en la vida social. Por eso confiamos profundamente
en la Revolución Educativa.
Ayer tuvimos una buena noticia —gracias a los esfuerzos
de la señora Ministra en el año 2003, de su equipo
en educación-, que la economía empezó a
mejorar Colombia, subió 4 puntos en el índice de
Desarrollo Humano de Naciones Unidas que mide alfabetización,
expectativa de vida y acceso a la salud.
Confiamos que con lo que estamos haciendo,
con lo hecho en 2004, con lo que se hace en 2005, con lo que
se haga en 2006, el país
mejore sustancialmente en el escalafón mundial de Desarrollo
Humano.
Este país necesita que todos los colombianos estemos
estudiando. Este país necesita que todos los colombianos
tengan acceso a la salud. Este país necesita una altísima
expectativa de vida y que esa expectativa de vida se cumpla.
Por eso hay que derrotar la violencia.
Lo que se esta haciendo ahora nos va
a permitir, este año,
aumentar en otros 2 millones 400 mil cupos la afiliación
al Régimen Subsidiado de Salud. En lo que va corrido del
Gobierno llevamos casi 5 millones y la ley que se esta aprobando
en el Congreso de la República le va a permitir al país,
en poco tiempo, tener plena cobertura para los sectores de los
estratos 1, 2 y 3 en Régimen Subsidiado de Salud.
Fue muy grato venir a Quibdó el Día de la Madre
a presenciar el primer pago de Familias en Acción en esta
ciudad. Son aproximadamente 7 mil. Vamos a terminar el año,
Dios mediante, con 500 mil Familias en Acción en la Patria
en 700 municipios. Pero no nos vamos a conformar. Vamos a dejar
las bases para que el próximo Gobierno, presídalo
quien lo presida, pueda llegar a un millón de Familias
en Acción en toda la Patria, para que definitivamente
los colombianos sientan que la lucha contra la pobreza ha pasado
del discurso a los hechos.
¡Qué bueno haber venido el Día de la Madre
no a lanzar una arenga contra la pobreza, sino a cumplir el primer
pago de Familias en Acción!
¡Qué bueno haber venido hoy con la señora
Ministra, no a presentarles a ustedes un programa, sino a ser
testigos de su graduación en el programa!
La política social no puede ser más de discursos
tiene que ser de hechos, de resultados. Si fuera por los discursos
este país no tendría problemas sociales, ¡ah!
rato que los habría superado.
Entonces, ahora es una época de menos discursos y más
resultado. Ese es nuestro compromiso con ustedes, apreciados
compatriotas.
Confió que sigamos progresando en el Chocó. Fue
muy grato, hace poco, inaugurar los servicios públicos
de Cupica. Cupica empieza a ser una población ejemplar,
en Cupica hay un servicio de energía mejor o tan bueno
como el de Bogotá, mejor o tan bueno como el de Medellín.
Un servicio de acueducto mejor que el de Nueva York.
Cupica quedó en excelentes condiciones de servicios públicos
y lo hicimos con poca plata. Me dijeron en un momento que eso
costaba 15 mil millones, dije: no, este país necesita
derrotar esa mezcla perversa entre recetas caras y corrupción.
Para poderle resolver los problemas a los pobres hay que superar
la corrupción, derrotar la corrupción. Lo que iba
a costar en Cupica 15 mil millones, lo hicimos por 2.400. Es
la manera de hacer rendir la platica y de resolverle los problemas
a los pobres.
Muchas gracias Senadores y Representantes por su permanente
apoyo para sacar estos programas adelante. Ustedes tienen muy
buenos voceros en el Congreso. A toda hora peleando para que
le lleguen soluciones a este pueblo.
Confió rápidamente, Gobernador, ir con usted al área
de Bojayá a inspeccionar como van los trabajos. Confió que
las Fuerzas Militares cumplan una tarea necesaria para este pueblo:
que no haya guerrilleros, ni paramilitares.
Este país necesita tres cositas: cero terrorismo, cero
corrupción y la reivindicación de los pobres.
Que en esas carreteras del Chocó, señor General
y señores Coroneles, no se nos vuelvan a presentar secuestros
ni atentados terroristas. ¡Póngalos presos a todos!
Llámeme General todos los días y me cuenta a cuántos
puso presos, para que este departamento pueda salir adelante,
porque sufre mucho la gente con eso.
Confió que cuando vayamos a Bojayá las obras estén
más adelantadas y que ese mismo día inauguremos
la electrificación de Riosucio.
Y confió, señor Gobernador, poder ir con usted
rápidamente y con las Fuerzas Militares al sur del departamento,
al Bajo San Juan y al Baudó a ver cómo vamos mejorando
orden público y vamos extendiendo estos programas sociales
tan importantes.
Apreciados compatriotas del Chocó: felicitaciones, un
saludo con mucho afecto”.