INTERVENCIÓN DEL
PRESIDENTE URIBE EN LA CUMBRE MUNDIAL DE LA ONU
Nueva York, 16 sep. (SNE).- El siguiente
es el discurso del presidente de la república Álvaro
Uribe Vélez,
durante su intervención en la Cumbre Mundial de la Organización
de las Naciones Unidas, sobre las Metas del Milenio:
Señores Co-Presidentes
Distinguidos Colegas
y Representantes
Señoras y Señores,
Permítame felicitarlo a Suecia por su elección
para presidir esta Asamblea General.
Colombia reafirma su compromiso con las Naciones Unidas y con
el multilateralismo amplio e incluyente. El proceso de reforma
debe tener como objetivo central el fortalecimiento de los Estados
y su capacidad para responder de manera eficiente a las necesidades
de las poblaciones.
Las metas de desarrollo del Milenio son
alcanzables en la medida en que todos hagamos esfuerzos y concesiones.
Los países
en desarrollo podrán cumplirlas cuando sea posible competir
y tener acceso libre a los mercados. Se facilita ello con la
eliminación de subsidios, especialmente aquellos que benefician
a la agricultura en los países desarrollados.
Con el logro de las metas, más que profundizar en el
asistencialismo y la ayuda, los países deben consolidar
sus capacidades y perspectivas de desarrollo sostenible que permita
generar riqueza, progreso y bienestar.
Colombia entiende que hay que apresurar
el logro de las metas del Milenio para asegurar en el tiempo
la legitimidad democrática
que emerge de la seguridad, las libertades públicas, la
independencia de las instituciones y la transparencia.
En mi país hemos incorporado las metas del Milenio en
el Plan de Desarrollo y en un ejercicio de discusión que
hemos denominado ‘Visión Colombia, Segundo Centenario’.
Ello permitirá cumplirlas antes de 2015.
De la mano de la Seguridad Democrática para derrotar
el terrorismo y garantizar las libertades de todos mis compatriotas,
de la transparencia y la participación ciudadana para
derrotar la corrupción, nos hemos comprometido a erradicar
la pobreza y a mejorar las condiciones de equidad.
Nuestra política social cuenta hoy con 7 capítulos,
permítanme mencionarlos:
- La revolución educativa, eje de la cohesión
social, es el camino de la equidad en la distribución
del ingreso y de la apertura de canales de ascenso social sin
los cuales la democracia queda a medias.
- El país de propietarios, con énfasis en la financiación
de medianas, pequeñas empresas y microempresarios para
superar la barrera del acceso al crédito, odiosa discriminación
que oscurece la democracia.
- Y la protección social, que en tres años tener
seguro de salud para toda la población pobre, que avanza
en la alimentación de los niños para facilitar
su acceso a la educación y en la atención de los
ancianos.
Colombia debe terminar este año con 500 mil Familias
en Acción o familias pobres educadoras que reciben un
subsidio del Estado para la alimentación y educación
de sus hijos. En el próximo futuro llegaremos a un millón,
todo lo cual se suma a los crecientes esfuerzos para la revolución
educativa.
En 2006 completaremos 10 millones de niños beneficiados
por los programas de nutrición y 570 mil ancianos atendidos
con subsidio financiero y alimentación.
Hacemos grandes esfuerzos para atender a los
desplazados, a 20 mil reinsertados que han abandonado los grupos
violentos y
a 33 mil Familias Guardabosques que provienen de haber abandonado
la droga y que hoy cuidan el reestablecimiento del bosque tropical,
que reciben un estipendio por ello y por cumplir la obligación
de mantener sus áreas libres de drogas ilícitas.
Estos tres items: desplazados, reinsertados
y Familias Guardabosques, en 2006 –solamente- costarán
300 millones de dólares.
En el proceso de reforma de los órganos
de las Naciones Unidas, creemos que aquellos encargados del desarrollo
deben
ser fortalecidos y convertirse en foros reales para discutir
la problemática de los países en desarrollo con
toda su diversidad, incluyendo a los países de renta media.
La propuesta de crear una comisión de
consolidación
de la paz debe centrarse en establecer políticas y estrategias
de apoyo a las iniciativas y programas nacionales de desarrollo
de los países que superen dificultades.
El éxito de las Naciones Unidas se cristaliza
cuando, una vez se lleva a cabo la tarea encomendada, se retira
de los
países que solicitan su ayuda. Su fracaso radica cuando
permanece durante décadas y crea dependencia de las estructuras
nacionales con el sistema internacional. Su fracaso radica cuando
suplanta a los Estados en vez de facilitar que puedan gobernarse
con autonomía e independencia.
El papel de los Estados no puede ser suplantado
por la Organización.
Cada nación debe tener los medios y mecanismos para superar
los retos y responder con eficacia a las necesidades de sus pueblos.
En cuanto a la propuesta de creación
de un consejo de derechos humanos, creemos que debe orientarse
con una perspectiva
de cooperación con los Estados y de consolidación
de la capacidad de gestión de cada país. En este
consejo no deberán prevalecer los enfoques punitivos y
de señalamiento que han politizado el tema y han debilitado
la capacidad de Naciones Unidas para contribuir y apoyar a los
Estados en la promoción y protección de los derechos
humanos.
El consenso debe ser el hilo conductor de esta
reforma. De este modo, será posible responder a las expectativas
de introducir cambios reales y significativos. En este proceso
debemos participar
todos, respetando el principio de igualdad soberana y guiados
por los principios rectores de la Carta de Naciones Unidas.
Gracias.