Bogotá, 18 ene. (SNE). -Un plan de salvamento que se
ejecutará durante los próximos 13 años y
contempla inversiones por 456 mil millones de pesos con el fin
de mejorar la situación ambiental, optimizar los recursos
hídricos y mitigar los riesgos por causas de inundación
o sequía de las zonas aledañas a las Lagunas de
Fúquene, Cucunubá y Palacio, correspondiente a
la Cuenca Ubaté – Suárez, en los departamentos
de Cundinamarca y Boyacá, aprobó el Consejo Nacional
de Política Económica y Social (Conpes).
El Departamento Nacional de Planeación informó que
las acciones aprobadas contemplan la recuperación ambiental
de zonas altas de la cuenca, en áreas de páramos
y subpáramos, a lo largo de los ríos Ubaté y
Suárez, y de las lagunas, así como la construcción
de embalses que permitan regular los caudales de ríos
y quebradas, y de 11 plantas de tratamiento de aguas residuales
y la optimización de otras cuatro.
También que es necesario el diseño y construcción
de proyectos regionales para la disposición de residuos
sólidos, adopción de técnicas de producción
más limpia en la ganadería y agricultura, ordenamiento
de la minería y la construcción de sistemas de
pretratamiento de vertimientos del sector lácteo y de
las plantas de beneficio animal.
“El desarrollo del plan, que evitaría la desaparición
de las lagunas, requiere una inversión cercana a los 456
mil millones de pesos y se desarrollará en tres etapas:
la primera entre 2007 y el 2010; la segunda, entre el 2011 y
2014 y la última entre 2015 y 2019”, señaló Planeación.
El Conpes recomendó concertar un convenio entre el Ministerio
de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, la CAR y las
autoridades territoriales que tienen jurisdicción en la
cuenta de Ubaté-Suárez, para priorizar los recursos
para el desarrollo de estrategias de manejo ambiental y realizar
evaluaciones periódicas de los resultados del plan de
acción definido para afrontar la problemática.
Por su parte, Planeación Nacional deberá evaluar
la programación y ejecución de los recursos asignados
a través del Sistema General de Participaciones a los
entes territoriales que tienen jurisdicción sobre el ecosistema
de la Laguna de Fúquene.
Así mismo deberá realizar análisis técnicos
y emitir un concepto sobre las eventuales operaciones de crédito
público que se generen para la financiación de
los proyectos de manejo ambiental.
Planeación tendrá que coordinar un Conpes para
las operaciones de crédito externo que se concreten, así como
evaluar la viabilidad de un esquema financiero (puede ser un
fondo, fiducia o patrimonio autónomo), que permita canalizar
los recursos asignados a los proyectos de regulación hídrica,
agua potable y saneamiento básico de la Cuenca.
A su vez la Comisión Reguladora de Agua Potable (CRA)
deberá evaluar si se pueden incluir los planes de saneamiento
y manejo de vertimientos municipales, como parte de los planes
de gestión y resultados.
Además tendrá que solicitarle a la Superintendencia
de Servicios Públicos que ejerza un control continuo e
implementar acciones que conlleven a la transformación
empresarial en los municipios aledaños a la Laguna.
La Superintendencia junto con la CAR, deberán controlar
los vertimientos industriales en el sistema de alcantarillado
para reducir los costos económicos y ambientales que se
generan por la contaminación de las fuentes hídricas.
La Dirección de Prevención y Atención de
Desastres del Ministerio del Interior deberá formular
y actualizar los planes de contingencia para la inclusión
de la atención de inundaciones y sequías.
Y el Incoder expedirá una reglamentación y ordenación
pesquera que permita regular y controlar esta actividad en la
Laguna de Fúquene, mientras la CAR realizará el
Plan de Ordenamiento y Manejo de la Cuenca de Ubaté y
Suárez y ejercerá un control sobre la totalidad
de usuarios que derivan agua del ecosistema.
Por su parte, la Gobernación de Cundinamarca deberá articular
e implementar el componente ambiental y de ordenamiento territorial
del Plan de Desarrollo Departamental, así como evaluar
la posibilidad de cofinanciar programas y proyectos con recursos
propios.
También deberá implementar el esquema de cobro
de las tasas retributivas y de uso de agua en su jurisdicción,
y a la vez fomentar la incorporación del programa nacional
de producción más limpia en los sectores productivos
de la región.
Para generar alternativas de ingresos para los pobladores aledaños
a la Laguna de Fúquene se puede incorporar el componente
del ecoturismo sobre, lo cual contribuirá a mejorar la
conciencia ambiental en torno a este ecosistema.
Así mismo, el Ministerio de Minas y otras autoridades
del sector definirán en el primer semestre de este año
un plan de acción para la planificación y ordenación
de la actividad minera en la cuenca Ubaté-Suárez.
Finalmente, Planeación Nacional y el Ministerio de Ambiente
definirán antes de 2008 los planes departamentales de
agua potable y saneamiento básico de los departamentos
de Cundinamarca y Boyacá.