Bogotá, 7 feb. (SNE).- Una reforma al esquema de banca
de segundo piso que desarrollan algunas entidades del Estado,
es decir la función de servir de intermediario entre el
usuario y el empresario que necesita un crédito, anunció el
ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.
Al intervenir en el foro organizado por ANIF y FEDESARROLLO,
el funcionario señaló que como está la situación
del sector financiero, con tasas de interés tan bajas
y sin obstáculos a la hora de entregar préstamos,
no “alcanza el aire” para pagar los dos.
Hace unos años por la crisis económica que afectó a
algunos sectores y por la magnitud de proyectos que necesitaba
emprender el país, el sistema financiero consideró demasiado
costoso y riesgoso entregar créditos. Entonces se decidió que
diversas entidades del Estado, incluso en asocio con departamentos
y municipios, sirvieran de intermediarios para respaldar los
préstamos que se fueran a entregar.
El objetivo fue el de financiar proyectos en infraestructura,
enfocados a promover el progreso regional y urbano de beneficio
común, el desempeño agropecuario y de otros sectores,
mediante el otorgamiento de créditos. Dichos recursos
son desembolsados a través de intermediarios financieros
tales como bancos comerciales, compañías de financiamiento
comercial y corporaciones financieras, mediante el sistema de
redescuento.
Los bancos de segundo piso –es decir que no tienen oficinas
directas para la atención del público- entregan
los recursos al sistema financiero y éste los desembolsa
a los empresarios que los solicitan. Por esta intermediación
se cobra una comisión a los bancos y los bancos a su vez
cobran otra comisión por entregarlos.
Carrasquilla Barrera explicó que la banca de segundo
piso se basaba en que el fisco a través de unos patrimonios
establecidos compartía riesgos con la banca comercial
y que el negocio daba una rentabilidad tan alta que ambos podían
obtener una ganancia, tanto el Estado usando sus patrimonios
en bancos de segundo piso y redescontando, como los bancos comerciales
tomando el riesgo y participando como socio en unos proyectos
más grandes de los que ellos podían financiar.
“Con tasas de interés como las que tenemos hoy
día es crecientemente difícil hacer este tipo de
reflexión y con la integración del sector bancario
en un sentido más amplio, con un sector financiero más
amplio y más moderno, uno tiene que pensar en cómo
usar mejor esos patrimonios y esa es la reflexión que
estamos teniendo. Yo anticipo que vamos a modernizar toda esa
estructura de una manera generalizada”, aseguró.
El Ministro aclaró que la revisión del sistema
no implicará que vaya a desaparecer la banca de segundo
piso sino que el objetivo es darle el mejor uso a esos patrimonios
públicos.
“De ninguna manera desaparecerá, simplemente lo
que tenemos son unos cantidad de patrimonios públicos
invertidos en actividades que requieren ser examinadas y requieren
ser evaluadas porque de pronto –yo puedo estar equivocado-
esos patrimonios podrían tener un mejor uso desde el punto
de vista de los propósitos importantísimos que
tienen estos bancos de segundo piso, de lo que están siendo
hoy día.
Y lo digo con base en la idea de que las tasas de interés
ya no dan margen para hacer redescuentos de la misma forma como
se hacían hace unos años”, concluyó.