Presidente Uribe dio luz verde a segunda fase
del programa Familias en Acción
ARRANCÓ PLAN PARA QUE MILLÓN
Y MEDIO DE FAMILIAS SUPEREN LA POBREZA EXTREMA
Bogotá, 14 feb (SNE). “Manos a la obra”,
exclamó al presidente Álvaro Uribe Vélez
al dar inicio al plan para que un millón 500 mil familias
pobres, entre ellas 100 mil de Bogotá, superen la pobreza
extrema. La idea es que todos los programas sociales del Gobierno
concurran a este propósito.
De acuerdo con el presidente Uribe, esto significa que cada
familia debe recibir –por ejemplo– el subsidio de
nutrición y educación que otorga Familias en Acción,
y además ser beneficiaria del microcrédito de la
Banca de Oportunidades, el acceso a vivienda y educación,
el carné de salud subsidiada y la capacitación
que imparte el Sena.
El Mandatario dio luz verde a esta estrategia durante la presentación
de la segunda fase del programa Familias en Acción, cuyo
objetivo es ampliar su cobertura a 1,5 millones de hogares beneficiarios
(1 millón 200 mil del nivel 1 del Sisbén y 300
mil desplazados), así como masificarlo en los grandes
centros urbanos y complementarlo con todas las herramientas sociales
diseñadas por el Gobierno.
“Una meta: que millón y medio de familias colombianas
superen la pobreza absoluta. Un mecanismo de ingreso: vincularlas
a Familias en Acción. ¿Qué sigue? Cumplirles
con Familias y Acción y hacerlas beneficiarias de los
otros programas sociales del Gobierno”, dijo Uribe Vélez.
Consideró que “un millón y medio de Familias
en Acción se convierte en un universo necesario de la
población colombiana, alrededor del cual hay que poner
en marcha las otras herramientas sociales, para demostrar que
ese grupo, bien atendido, puede superar la pobreza absoluta”.
TODOS A UNA
El Jefe de Estado detalló a fondo la forma como debe
relacionarse el programa Familias en Acción con todas
las metas sociales que se ha impuesto el Gobierno.
“¿Cómo vamos a relacionar Familias en Acción
con estas metas? Todos los compatriotas de Familias en Acción
deben estar vinculados al régimen subsidiado de salud.
Se debe garantizar, como condición de Familias en Acción,
que todos los compatriotas de Familias en Acción tengan
plena cobertura en educación básica para sus hijos.
Debemos avanzar con el Sena, para darles capacitación
técnica a las mamás y a los papás de Familias
en Acción. Es bien importante”, dijo.
Adicionalmente, “estas familias deben ser beneficiarias
del programa de vivienda, que no va a alcanzar para todos, porque
son 800 mil soluciones en los cuatro años y aquí hay
millón y medio de familias. Y muy importante: en la medida
de lo posible, deben ser beneficiarias del programa de Banca
de Oportunidades”.
FAMILIAS EN ACCIÓN ES ESTRUCTURAL
Por otra parte, el Jefe de Estado consideró que el programa
Familias en Acción no es un programa asistencialista sino
de inversión social estructural, ya que “está llamado
a mejorar la distribución del ingreso en Colombia”.
Al respecto explicó: “¿Cómo puede
una de las familias aquí presentes en el futuro ser beneficiaria
del mejoramiento de la distribución del ingreso en Colombia?
Las ciencias sociales han demostrado que el camino más
eficaz para mejorar en un país la distribución
del ingreso, es el camino educativo. Y lo estamos viendo”.
“¿Cómo juega Familias en Acción allí?
En la medida que les permite a estas familias colombianas garantizar
la educación de sus hijos, acompañada de nutrición
y de salud, entonces esa nueva generación de colombianos,
los hijos de estas familias que se van a educar, van a tener
mejores oportunidades de empleo con afiliación a la seguridad
social y van a tener mejores oportunidades de movilidad social
ascendente en la sociedad colombiana”, dijo.
“Por eso nosotros decimos: esta es una herramienta fundamental
de una política social no paternalista, no asistencialista,
sino que puede tener profundos efectos estructurales”,
puntualizó el Mandatario.
AYUDAS A ANCIANOS ES ASISTENCIALISTA
No obstante esto, el Presidente admitió que el Gobierno
tiene un programa de corte asistencialista: el que provee subsidios
monetarios y de nutrición a 600 mil ancianos en todo el
país. Pero consideró que hay una razón fuerte
para mantenerlo.
“Nosotros encontramos 60 mil ancianos, hoy tenemos 600
mil y vamos para un millón. Pero una sociedad que quiera
labrarse el futuro no puede darles la espalda a los ancianos.
Esos ancianos fueron productos de la exclusión, su pobreza
es producto de la exclusión de la sociedad colombiana,
y por eso tenemos que atenderlos y no nos puede dar vergüenza
decir que es un programa asistencialista, necesario”, adujo.
“Es que lo que este país no puede es estar tranquilo
con 600 mil ancianos muriéndose de hambre en las calles
y sin atenderlos. Por eso nosotros vamos a cumplir la meta de
un millón de ancianos atendidos”, dijo.
“Entonces, por ahora, manos a la obra: millón y
medio de Familias en Acción. Y vamos a ver si esta economía
trabaja para pagar ese millón y medio de Familias en Acción
y empezar a buscar la platica para otro tanto”, concluyó el
Presidente de la República.