PALABRAS
DEL PRESIDENTE URIBE EN LA PLAZA PÚBLICA DE RIVERA, HUILA
Rivera (Huila) 27 feb (SNE). Las siguientes
son las palabras del presidente Álvaro Uribe Vélez, pronunciadas
en la plaza principal del municipio huilense de Rivera, al concluir
la conmemoración del fallecimiento de los concejales de
esta localidad.
“Visitamos esta tarde a Rivera en una fecha luctuosa.
Hace un año, el terrorismo les agregó dolor a las
familias colombianas, el terrorismo le agregó dolor a
la democracia colombiana. Aquí fueron asesinados por la
columna terrorista Teófilo Forero de las Farc un grupo
de concejales de Rivera, de ciudadanos que estaban prestando
un servicio, con todo el entusiasmo por su comunidad.
Hemos venido nuevamente a saludar a la comunidad, a sus autoridades,
a sus familiares de quienes aquel día fueron asesinados.
Quiero también, esta tarde, expresar mi sentimiento
de dolor, el de mis compañeros de Gobierno, por el fallecimiento
de Mario, el hijo del Alcalde. Vi al Alcalde en las dos últimas
semanas, primero en Melgar, cuando examinábamos el Plan
2.500 de pavimentos en el Huila, y después en Neiva, la
semana pasada, cuando acompañábamos al Gobernador
en la entrega del certificado de calidad por la eficiencia del
Huila en contratos y en salud. Los designios de Dios. Inesperadamente
murió el hijo del Alcalde, Mario, de 17 años, Juan
Manuel. Al Alcalde, todos nuestros sentimientos de pesar.
Comunidad: hemos examinado esta tarde temas generales de Rivera
y temas particulares de las personas afectadas, de los familiares
de las víctimas.
Temas generales de Rivera: hemos avanzado en educación,
pero, con la ayuda de Dios, vamos a llegar a plena cobertura.
Lo anuncio esta tarde en Rivera: un grupo de congresistas le
ha pedido al Gobierno que con el aumento de las transferencias
para educación, la Constitución de la República,
en su nueva leyenda, autorice que parte de los dineros vayan
a la gratuidad educativa. Y el Gobierno ha dicho sí. Confiamos
que el Congreso de la República lo apruebe.
Hemos mirado también cómo ha avanzado el Sena
en Rivera y todo el Huila, y cómo debe avanzar en los
años que vienen.
Hemos mirado el tema de Bienestar Familiar, de los niños
menores de cinco años, de los hogares comunitarios, de
los restaurantes escolares, que van a pasar de una atención
de 122 días, a un atención de 180 días.
Hemos mirado los ancianos y hemos mirado Familias en Acción.
Rivera ha tenido unas 420 Familias en Acción y ahora,
con la ayuda de Dios, cuando vamos a incrementar en el país
a millón y medio, Rivera va a quedar con casi 800 Familias
en Acción.
Nuestro Gobierno ha vinculado 600 mil ancianos a los programas
de almuerzos y a los programas de subsidios económicos.
Vamos a para un millón de ancianos. Porque un país
que le da la espalda a la tercera edad, que le da la espalda
a la tercera edad que vive pobre, que no tiene manera de proveer
a su propia subsistencia, después de haber trabajado durante
todos los años útiles, es un país que, al
darles la espalda, está diciendo que desmerece el futuro.
Por eso, para merecer el futuro, vamos a llegar a atender a
un millón de ancianos de los sectores más pobres
de la Nación en los próximos años.
Haciendo un esfuerzo entre el Ministerio de Protección,
la Gobernación y las alcaldías, logramos convertir
al Huila en el primer departamento con cobertura plena en régimen
subsidiado de salud. Vamos a consolidarlo.
Hemos examinado unos temas que nos ha pedido la localidad.
Y nos hemos comprometido con lo siguiente: a través de
los recursos de Findeter, apoyar con un crédito en condiciones
favorables el Spa, que es un proyecto turístico de generación
de empleo, que están liderando la Gobernación y
la Alcaldía.
Segundo, le hemos dicho al señor Alcalde, porque en
esto hay que tener toda la franqueza, que no podemos emprender
nuevos programas de pavimentos departamentales en el Huila. Pero
le vamos a apoyar al Gobernador un crédito internacional,
a 25 años de plazo, con una tasa de interés baja,
para que, concluidos los programas del Plan 2.500 del Gobierno
Nacional, el Gobierno departamental del Huila continúe
con el pavimento de más vías departamentales, y
el Gobierno Nacional concentrarse en las vías de competitividad:
las carreteras que comunican al Huila con el departamento del
Cauca, con miras al Pacífico; la carretera de Colombia
(Huila) a La Uribe (Meta), para comunicar la Patria desde los
Llanos Orientales, desde el Orinoco, en la frontera con Venezuela,
pasando por los Llanos Orientales, por la Cordillera Oriental,
por el sur de Sumapaz, al Valle del Magdalena en el Huila, y
por aquí remontar la Cordillera Central y la Cordillera
Occidental, para llegar al Pacífico. Como el Gobierno
Nacional se tiene que concentrar en esas vías, no podemos
atender más vías departamentales.
Y en el diálogo público, que ha sido la constante
de este Gobierno, este Gobierno que se ha hecho más en
las calles de Colombia, hablando con los ciudadanos, que en las
cerradas oficinas públicas, en el diálogo público
del Gobierno comunitario no podemos ofrecer lo que no podemos
cumplir, porque se pierde la credibilidad.
En esta Patria lo primero que tenemos que construir es confianza,
credibilidad.
Entonces al decirle al Alcalde que no podemos atender esos
pavimentos, le hemos dado una alternativa (aquí llega
mucho turista, la Seguridad Democrática es la mejor promoción
del turismo): que construyamos un paseo peatonal y ciclorruta,
de aproximadamente cinco kilómetros, para estimular el
turismo, honrar la memoria de los concejales inmolados, y además
relacionar el turismo, que le trae ingresos al pueblo, con la
Seguridad Democrática.
Ese sendero ecológico, peatonal, de bicicletas, no lo
vamos a llamar el Sendero de los Inmolados, tampoco lo denominaremos
el Sendero de los Caídos, no referiremos la palabra “tristeza” para
decirle el Sendero de la Tristeza. Lo vamos a llamar El Sendero
del Triunfo, porque la sangre de los concejales inmolados de
Rivera no puede haberse derramado en vano. Esa sangre tiene que
servir para que en Colombia prospere la democracia, para que
en Colombia triunfe la Seguridad Democrática, derrotemos
el terrorismo y garanticemos la felicidad de las nuevas generaciones
de compatriotas.
Que ese sendero tenga un austero monumento en honor de los
caídos, pero que ese sendero se llame El Sendero del Triunfo.
Con la ayuda de Dios, lo vamos a construir aquí en Rivera.
También vamos a trabajar con la Banca de Oportunidades
dos proyectos: un proyecto para financiar a los usuarios de la
galería, y otro proyecto para financiarles proyectos productivos
a las familias de los concejales muertos.
Acción Social de la Presidencia, la Gobernación
y la Alcaldía reaccionaron con la muerte de los concejales.
Ahora los familiares me decían que Acción Social
estuvo presta, solícita, y entregó oportunamente
las ayudas que manda la ley. Pero, por supuesto, son ayudas pequeñas,
y estas familias necesitan rehacer su fuente de subsistencia.
Por eso es que les vamos a ayudar en proyectos productivos
a través de Banca de Oportunidades. Puede ser que algunos
quieran hacer de su casa un pequeño hotel para recibir
turistas, otros tener unos estancos piscícolas, etcétera,
o cualquier otra atracción turística. La Banca
de Oportunidades se hará acá presente para ello.
El Ministro del Interior y de Justicia va ayudarle al señor
Alcalde en el tema del mejoramiento del palacio de la administración
municipal.
Confío rápidamente hacer un consejo comunitario
en el Huila para mirar todos estos aspectos.
Vivimos otra tragedia: la tragedia de los peces en la represa
de Betania. Pero, miren: gracias a Dios, hoy son comparables.
En aquella murieron unos peces, hay unas dificultades económicas.
Las superamos. Todo eso es superable. Aquí queda una tristeza
insuperable, porque aquí se sacrificaron, por este terrorismo
demencial, las vidas de los concejales.
En aquella tragedia de los peces salimos adelante. Con apoyos,
con créditos, con acuerdos entre el generador de energía
de la represa, los usuarios que utilizan el agua para tener las
jaulas de confinamiento de pescados. Y estarán presentes
allí el gobierno departamental y el Gobierno Nacional.
En eso salimos adelante. Y aquí, por nuestras fuerzas
vigorizadas, por el sacrificio de nuestros concejales, le pedimos
a Dios que nos ayude para que tengamos una Patria sin guerrillas
y sin paramilitares, una Patria sin narcotráfico, una
Patria sin corrupción.
Que los soldados de la República, los policías
de la Nación, hoy fortalezcan su voluntad para derrotar
todas las expresiones del crimen.
Recordemos aquello que decía El Libertador, en esa bella
carta dirigida desde Bucaramanga a la Convención de Ocaña: “Recordad,
legisladores, que la energía de la fuerza pública
es la salvaguardia del débil, la protección de
la sociedad entera, lo único que aterra al criminal. Recordad,
legisladores, que lo único que preserva la virtud de la
República, es la energía de las instituciones,
y sin energía la República carece de virtud, y
sin virtud la República perece”. ¡Energía
contra los terroristas de toda la naturaleza!
Ahora estamos discutiendo un Pacto de Transparencia para las
elecciones que vienen. Lo vamos a agitar en los 1.098 municipios
de Colombia.
Les voy a pedir a los Ministros, que dirigidos por el Ministro
del Interior y de Justicia y por el Vicepresidente (de la República),
entre todos vayamos a los 1.098 municipios de Colombia, a los
gobernadores y a los alcaldes que nos quieran acompañar,
a los dirigentes políticos que nos quieran acompañar,
a agitar un pacto de transparencia, cuyos principales puntos
deben ser los siguientes:
Primero, los aspirantes a alcaldías, a gobernaciones,
a asambleas y concejos de las más importantes capitales
o de los más humildes municipios que quieran participar
en ese Pacto de Transparencia, deben comprometerse a publicar
las donaciones a sus campañas tan pronto las reciban.
Donación recibida, donación y donante publicados,
para que el pueblo sepa el origen de los recursos que contribuyen
a sus campañas.
Segundo, todos ellos deben comprometerse a no aceptar presiones
de grupos corruptos o de grupos armados irregulares, a denunciar
esas presiones. Tan pronto como reciban una presión, deben
rechazarla y denunciarla al juez, denunciarla al fiscal, denunciarla
a los comités de garantías, al Ministerio del Interior,
a la Vicepresidencia de la República.
Tercero, deben comprometerse a garantizar la transparencia
en el manejo de los recursos del Estado. Nosotros estamos en
franca batalla contra la corrupción, y este país
no puede ver en adelante que los dineros de la salud se desvíen
hacia la corrupción para pagar deudas de campaña.
Puntos como estos tres, que acabo de mencionar, deben hacer
parte de ese Pacto de Transparencia, y ese Pacto de Transparencia
lo vamos a agitar en todas las calles de Colombia, para que este
país derrote la influencia del terrorismo y la influencia
de la corrupción, que afectan la transparencia de la democracia.
Hace casi cinco años, cuando en medio de restricciones
yo recorrí el país pidiendo el apoyo de mis compatriotas,
había unas regiones dominadas por la guerrilla y otras
por el paramilitarismo. La ciudadanía, totalmente desprotegida.
Por eso digo, no con espíritu de pleitos personales sino
de reconocer la memoria histórica, que a los colombianos
se les abandonó y que eso hay que mirarlo.
Durante años quedaron sometidos a la guerrilla, y esa
guerrilla engendró el paramilitarismo, y el país
se lo dividieron o lo compartieron entre unos y otros.
Desde el 7 de agosto de 2002 hemos emprendido la tarea de derrotarlos
a todos. Hemos sufrido, tenido reveses, dificultades. Aparecen
verdades dolorosas que hemos estimulado, pero por primera vez,
gracias a la Seguridad Democrática, en Colombia hay procesos
de paz de características diferentes a los que se dieron
en el pasado.
En el actual proceso de paz no hay amnistía ni indulto
para delitos atroces. En el pasado se amnistiaron e indultaron
delitos atroces. En el pasado se amnistiaron sin decir la verdad.
En el actual proceso de paz tienen que decir la verdad, como
condición para recibir los beneficios de la Ley.
Este es el primer proceso de paz en el mundo y en Colombia,
en el cual con los bienes de los victimarios hay que reparar
los daños deparados a las víctimas.
¡Que se tengan las Farc! Que el día que quieran
hacer un proceso de paz, los niveles van a quedar muy altos,
gracias a lo que está haciendo hoy este Gobierno.
¡Que se prepare para decir la verdad, para reparar a
las víctimas con todos los dineros que han obtenido del
narcotráfico!
¡Y que se preparen para aceptar que no podrán
ser amnistiados ni indultados por delitos atroces!
¡Que dejen la pretensión de creer que van a salir
del monte al Congreso y a la Presidencia! La democracia colombiana
no será inferior.
¡Así como a los paramilitares no se les permite,
en el caso de que hayan sido culpables de delitos atroces, de
participar en la política y de aspirar al Congreso, a
las Farc tampoco se les puede permitir, porque este país
tiene que tratar con el mismo rasero a todos los criminales de
los diferentes orígenes, apreciados compatriotas de Rivera!
Podemos avanzar en pactos de transparencia, en más reformas
políticas. Nuestro país tiene unas buenas leyes
en régimen de inhabilidades y de incompatibilidades, en
regímenes de partidos, de financiación de campañas,
pero las vamos a mejorar.
Los pueblos tienen que vivir en un proceso ininterrumpido de
mejoramiento. Todo eso es válido. Pero, finalmente, lo único
que garantiza la transparencia en la política es la Seguridad
Democrática. Lo único que garantiza que la corrupción
no enturbie la política es la Seguridad Democrática.
Lo único que garantiza que el narcotráfico, la
guerrilla y los paramilitares no interfieran en la política,
es la Seguridad Democrática.
Por eso insistiremos en la Seguridad Democrática, acompañando
a nuestros soldados y policías para que los colombianos
no tengan que dormir con el fantasma de que en algún momento
llegará la guerrilla a maltratarlos, o que en algún
momento serán convocados por los paramilitares para condicionarlos
y someterlos.
Para recuperar la libertad de este país, merecida por
la dignidad de cada uno de sus ciudadanos, necesitamos derrotar
todas, todas las expresiones del terrorismo.
Venimos hoy a Rivera a rendir un homenaje a quienes murieron
desempeñándose como líderes de la democracia
local, y venimos hoy a Rivera a reiterar con la Patria, desde
este hermoso lugar de la geografía huilense, un compromiso
del alma, un compromiso del honor, dedicar todas nuestras fuerzas
al propósito de una Nación que dé felicidad
a las nuevas generaciones, una Nación con equidad que
supere la pobreza, una Nación con confianza para invertir
y trabajar, hacer turismo, pero una Nación sin guerrilla,
sin paramilitares, sin narcotráfico, sin corrupción.
Esta tarde, esta tarde en Villavicencio un periodista me preguntaba: ¿Qué se
sabe de la Fiscalía sobre el asesinato de los concejales
de Rivera? Es un hecho notorio que los asesinó la columna
Teófilo Forero del grupo terrorista de las Farc, que lo
hizo cobardemente a través de la penetración de
la política.
¡Qué grave la penetración de la política
a través de la guerrilla, qué grave a través
de los paramilitares!
Por eso la Seguridad Democrática tiene un propósito:
cero guerrilla en la política, cero paramilitares en la
política.
Quienes leyeron y escucharon mi discurso, hace cinco años
lo escucharon a medias. Yo llegué con toda la voluntad
que venía desde la Gobernación de Antioquia, de
derrotar a la guerrilla. Pero eso era apenas un componente de
mi propósito. El otro, superior y más fundamental,
la recuperación de la institucionalidad de la Nación.
Que la Nación no esté sometida ni por la guerrilla,
ni defendida por los paramilitares, sino cada ciudadano y el
colectivo protegidos por la Constitución, a través
de la expresión legítima de los soldados y de los
policías de la Patria.
Por eso es el primer Gobierno que ha combatido a los paramilitares,
es el primer Gobierno que ha liderado las Fuerzas Armadas de
la Nación para derrotar ambas expresiones del crimen:
guerrilla y paramilitares. Es el primer Gobierno que puede mostrar
el resultado, que si bien hay un proceso de paz que debe tener éxito,
ese proceso de paz se origina en la fortaleza de la Seguridad
Democrática y en los principios claros e inequívocos
de la verdad, la justicia y la reparación a las víctimas.
Que Dios tenga en eterno descanso a nuestros concejales. Que
ellos desde el cielo nos ayuden, para darle vigor a nuestras
energías.
Unamuno solía decir que “el fuego que derrite
la manteca templa el acero”.
Que el acero de nuestras convicciones patrióticas sea
templado en nuestras horas de dolor y de dificultades, para luchar
con toda la energía en la mañana, el mediodía
y en la noche, por una Patria libre y digna, por una Patria sin
terrorismo, por una Patria cuya democracia, como lo dijera El
Libertador, garantice la felicidad de las nuevas generaciones
Compatriotas de Rivera: estamos con ustedes. Toda nuestra solidaridad.
Y ah bueno que dentro de poco empecemos la construcción
del Paseo del Triunfo, con ese austero monumento que recuerde
a nuestros concejales.
¡Que viva Rivera!
¡ Que viva este Huila democrático!
¡Que viva nuestra Patria colombiana!
¡Compatriotas, por una Patria sin guerrilla y sin paramilitares,
adelante!
¡Compatriotas, por una Patria sin narcotráfico
y sin corrupción, adelante!
Aquí en Rivera vamos a empezar el Pacto de Transparencia.
A cada uno de ustedes le vamos a entregar la hojita del Pacto
de Transparencia, para que Rivera, que fue el holocausto de los
concejales, sea también la fuente de inspiración
de un proyecto como el colombiano de nueva democracia, caracterizado
por una democracia sin terrorismo, sin interferencias corruptas.
¡Que viva Colombia!”
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