DECLARACIÓN DEL PRESIDENTE ÁLVARO
URIBE AL INICIO DE LA RUEDA DE PRENSA
Bogotá, 11 mar. (SNE).- Las siguientes son las palabras
pronunciadas por el presidente de Colombia, Álvaro Uribe
Vélez, al inicio de la rueda de prensa ofrecida, conjuntamente,
con el presidente de los Estados Unidos, George W. Bush.
“Quiero dar de nuevo la más cálida bienvenida
al Presidente Bush, a su delegación. En el almuerzo de
trabajo que acaba de concluir, al final, pudimos leer unos bellos
párrafos
del Libertador Bolívar.
Uno, en la Carta de Angostura, en el cual destacaba la formación
de la Nación de los Estados Unidos alrededor de la libertad,
alrededor de la tolerancia y alrededor de hacer, de la ley general,
una respuesta al interés colectivo a través de
la voluntad individual.
Otra bellísima mención del Libertador, en el Congreso
Constituyente de Bolivia, sobre el legado del Presidente George
Washington.
Expresaba que las relaciones entre el pueblo colombiano y el
pueblo de los Estados Unidos, son unas relaciones sólidas,
de gran entendimiento alrededor de los valores democráticos
desde el nacimiento de nuestras dos organizaciones estatales.
Esta visita nos enaltece, nos aumenta la confianza en nuestras
relaciones, en el proceso colombiano. La agradecemos inmensamente,
Presidente Bush.
Llega usted a Colombia en un momento de agitación por
el proceso de paz, en un momento de revelaciones que agitan muchísimo
el debate público, pero que se están dando por
una razón: porque nuestra política de Seguridad
Democrática se ha propuesto derrotar el terrorismo, en
todas sus expresiones: en la expresión guerrillera, en
la expresión paramilitar. Porque nuestra política
de Seguridad Democrática se ha propuesto restablecer la
plena vigencia de las instituciones democráticas en toda
Colombia.
Estas revelaciones se dan, porque nuestra ley de Justicia y
Paz exige la verdad. Exige la verdad para que el país
conozca la dimensión de la tragedia sufrida. Exige la
verdad, para preparar un futuro libre de paramilitares, libre
de guerrilla,
libre de narcotráfico.
La ley de Justicia y paz que hoy se aplica, discutida en el
proceso de aprobación en el Congreso, discutida en su
aplicación,
tiene tres elementos que la distinguen de anteriores leyes
de paz en Colombia y en el mundo.
Esta ley exige la justicia. No puede haber amnistía ni
indulto para delitos atroces.
Esta Ley exige la reparación. No hay otro país
en el mundo, diferente de Colombia, que pueda decir, que para
conceder unos beneficios de sentencias reducidas en una ley de
paz, exige a los victimarios la entrega de sus bienes para reparar
a las víctimas. Eso no se ha dado en ninguna parte del
mundo.
Don países de América Latina trataron de compensar
víctimas de gobiernos dictatoriales pero con sumas modestas
del presupuesto. Aquí se exige compensar las víctimas
con todo el patrimonio, con todo el dinero de los victimarios.
Verdad, justicia y reparación, son tres elementos claves
de esta ley.
Este país tiene una justicia independiente, señor
Presidente Bush, que distingue a nuestra democracia.
La decisión de mi Gobierno en este proceso de recuperación
institucional, es el total apoyo a la justicia para que Colombia
supere definitivamente el tiempo del terrorismo.
Es bueno hacer algo de historia. Durante 30 años, las
guerrillas marxistas maltrataron a Colombia, propusieron una
revolución social y lograron más pobreza. Propusieron
más democracia y asesinaban alcaldes, concejales, diputados.
Asesinaban las expresiones de la democracia.
Esas guerrillas terminaron financiadas por el narcotráfico.
Mucha gente, en muchas regiones de Colombia, no sintió la
protección estatal, que hoy les llega gracias a la Seguridad
Democrática. Ese crecimiento de las guerrillas, esa falta
de protección estatal a nuestros ciudadanos, condujo a
que las mismas guerrillas engendraran el paramilitarismo y que
ese paramilitarismo cometiera los mismos crímenes atroces
de las guerrillas.
Las guerrillas marxistas trajeron a Colombia el principio de
la validez de combinar todas las formas de lucha, infiltraron
la universidad, el movimiento obrero, el movimiento campesino.
Infiltraron sectores muy importantes de movimientos intelectuales,
del periodismo. Infiltraron la política.
Esas guerrillas sembraron odio de clases, quisieron acabar con
los cimientos de fraternidad sobre los cuales se ha fundido
esta Nación.
Esas guerrillas les enseñaron a los paramilitares a combinar
todas las formas de lucha. ¿Qué pasa?: que cuando
esas guerrillas, algunas de ellas se amnistiaron, no se les exigió la
verdad que ahora se exige, entonces no dijeron cuáles
fueron los sectores de la sociedad civil que infiltraron.
A esas guerrillas no se les exigió la reparación
a las víctimas, que hoy se exige. Esas guerrillas pudieron,
a pesar de haber cometido tantos crímenes atroces, tener
amnistía o indulto por crímenes atroces. Amnistía
e indulto que hoy no se da, por crímenes atroces.
Este proceso de paz que hoy adelantamos, con las características
de verdad, justicia y reparación, marca los límites
para los procesos de paz del futuro.
La seriedad de este proceso, le dirá al mundo y a Colombia
que los procesos que Colombia adelante en el futuro con guerrillas
como el ELN y la Farc, deberán exigir –como hoy
exigimos- verdad, deberán exigir justicia y deberán
exigir reparación.
Sepa, señor Presidente Bush, que nuestro compromiso es
la total derrota del terrorismo y la recuperación total
de la justicia y de las instituciones democráticas.
Trabajamos con un modelo de Estado. Nosotros no desmantelamos
el Estado como se hizo en muchos países de América
Latina en la década del 90 ni proponemos la estatización.
No aceptamos desmantelar el Estado ni tampoco el monopolio
estatal. Nosotros estamos creando toda la confianza para la
inversión privada en Colombia, pero al mismo tiempo,
exigiendo toda la responsabilidad social.
Nosotros vemos en la confianza un medio de inversión,
en la inversión una herramienta de crecimiento y en el
crecimiento una posibilidad de superar pobreza y de construir
equidad.
Llega usted a Colombia, agitando para el Continente una tesis
necesaria: la diversificación de la canasta energética.
Después de Brasil, Colombia es el segundo país
del Continente en producción de biocombustibles. Creamos
los incentivos tributarios, aprobamos la reglamentación
de acuerdo con las normas de la Organización Internacional
de comercio (OMC), ya hay proyectos produciendo más de
un millón de litros de etanol en Colombia al día
y hay muchos que se están instalando. Tenemos seis millones
de hectáreas en la Orinoquía, en sabanas, que podemos
conquistar para biocombustibles, sin destruir un solo árbol
de nuestra selva.
Hemos agradecido al Presidente de los Estados Unidos y a su
delegación,
el apoyo a Colombia en el Plan Colombia.
La lucha contra la droga tiene apoyos, apoyos de discurso y
apoyos prácticos, el apoyo de su país, de su antecesor
el Presidente Clinton, de su Congreso, su apoyo entusiasta,
con ejemplar determinación, Presidente Bush, han sido
apoyos prácticos a la valerosa lucha del pueblo colombiano
contra las drogas.
Tuvimos la oportunidad de hablar de temas muy importantes como
nuestra agenda contra la pobreza, nuestros objetivos sociales,
nuestro programa de Familias Guardabosques –único
en el mundo- que le paga hoy a 50 mil familias campesinas para
que mantengan áreas de selva libres de bosque, libres
de droga y cuiden la recuperación del bosque allí donde
fue destruido.
Hablamos nuevamente de nuestro acuerdo de comercio. Una posibilidad
política de integración, ajeno a sectarismos
ideológicos, que busca oportunidades para la inversión,
para el empleo digno, con afiliación a la seguridad
social.
Muchas gracias por su visita, señor Presidente.
Me sentí muy orgulloso de mis compatriotas, cuando usted,
tranquilamente, después de aterrizar en el aeropuerto
Eldorado, alrededor de esos paisajes tan bellos, hizo el recorrido
hasta la Plaza de Bolívar y hasta esta Casa de Nariño.
Me siento muy orgulloso que el mundo pueda constatar, cómo
este pueblo colombiano hoy está superando las grandes
dificultades que lo han atribulado.
De nuevo, muchas gracias por su visita".