Bogotá, 11 mar (SNE).- La Orinoquia colombiana tiene
seis millones de hectáreas disponibles para cultivar productos
utilizados en la elaboración de biocombustibles, reveló este
domingo el presidente de la República, Álvaro Uribe
Vélez.
“Tenemos seis millones de hectáreas en la Orinoquía,
en sabanas, que podemos conquistar para biocombustibles, sin
destruir un solo árbol de nuestra selva”, señaló el
Jefe de Estado, en la declaración previa al inicio de
la rueda de prensa que ofreció en la Casa de Nariño,
junto con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush.
El mandatario colombiano destacó que en nuestro país
ya se están elaborando más de un millón
de litros diarios de alcohol carburante a partir de caña
de azúcar, cifra que lo convierte en el segundo productor
de biocombustibles en el continente, gracias a las medidas que
ha implementado el Gobierno Nacional para incentivar esta industria.
“Creamos los incentivos tributarios, aprobamos la reglamentación
de acuerdo con las normas de la Organización Internacional
de Comercio (OMC), ya hay proyectos produciendo más de
un millón de litros de etanol en Colombia al día,
y hay muchos que se están instalando”, explicó Uribe
Vélez.
Reveló que durante la reunión con el Presidente
Bush, el ministro de Minas y Energía, Hernán Martínez;
y el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Andrés
Felipe Arias, le hicieron una presentación al mandatario
estadounidense sobre todo el tema de los biocombustibles.
El Congreso de la República expidió en el año
2001 la Ley 693, mediante la cual se dictaron las normas sobre
el uso de alcohol carburante mezclado con gasolinas, para disminuir
las emisiones contaminantes derivadas de los combustibles de
los vehículos.
El Gobierno Nacional reglamentó la ley y dispuso que
las gasolinas fueran mezcladas con un 10 por ciento de alcohol
carburante.
Esta combinación se ha denominado gasolina oxigenada o
biogasolina, que debe ser utilizada por los automotores que circulan
en las ciudades con más de 500 mil habitantes.
Además de considerarse necesario y benéfico para
el medio ambiente, pues reduce las emisiones de bióxido
y monóxido de carbono, el uso de alcohol carburante mejora
la combustión en los motores de los automotores, por ser
un oxigenante para la gasolina.
En la actualidad, están en desarrollo varios proyectos
en diversas regiones del país, para producir biocombustibles
no sólo a partir de azúcar, sino también
de yuca y de aceite de palma.