PALABRAS DEL PRESIDENTE URIBE AL INAUGURAR VIVIENDAS
EN CALI
Cali, 20 mar (SNE). Las siguientes son
las palabras del presidente Álvaro
Uribe Vélez, durante la inauguración de la nueva
etapa del proyecto habitacional Potrero Grande en la capital
vallecaucana.
“Qué bueno venir hoy para ver este principio de
obra tan importante. Consejo comunitario tras consejo comunitario
aparecía la problemática del Carillón. Por
fortuna ya empieza a tener respuesta. Ya es una realidad concreta:
1.756 viviendas.
Quiero agradecer a todos. Quiero agradecer al Alcalde, a su
equipo. Obras son amores y no buenas razones. Este es un gran
hecho de su administración, Alcalde.
Y tengo que aplaudir al Alcalde porque el gobernante no puede
ser calculador. Neruda decía, en un poema que escribió donde él
quería autodescribirse, en un poema que lo llama “El
autorretrato”, que él era ausente de cálculo.
Hay que ser ausente de cálculo, sobre todo en la vida
pública. Y hay que reconocer a aquellos que lo hacen bien,
por sus obras. Esta es una gran obra liderada por la Alcaldía
de Cali que nosotros apoyamos y hoy aplaudimos ante el país.
He tenido la posibilidad de trabajar con dos alcaldías
de Cali. Lo he hecho con cariño. El Alcalde en su magnífica
intervención decía que aquí suelen comentar
que quien manda en Cali es el Presidente. Alcalde, cuando vuelvan
a decir eso, digan: “El Presidente no manda en Cali, el
Presidente siente amor por Cali.”
Y quiero agradecer a la Gobernación; al doctor Angelino,
el gobernador, a su equipo, por el aporte a cada una de estas
soluciones para poder concretar su financiación.
Y quiero agradecer a las cajas de compensación, a los
constructores. Qué bueno contar con un conjunto de cajas
de compensación como el que tenemos en Cali.
Es una institucionalidad social que la quisiera cualquier país
del mundo. Por eso no vacilo en avanzar en la reforma del Seguro
Social, para que atrás quede el viejo Seguro Social de
la politiquería, de la ineficiencia, de los excesos sindicales,
y Colombia despierte viva con la ilusión de un Seguro
Social transparente, eficiente, dirigido por las cajas de compensación
en asocio del Estado colombiano.
Qué importante destacar que Colombia cuenta con cajas
de compensación como las de Cali. Por eso hay que aprovecharlas.
Y hay que aprovecharlas para avanzar con ellas en el tejido social
de Colombia. Por eso nos hemos dado a la tarea de avanzar con
ellas en la concepción de un nuevo Seguro Social para
Colombia.
Y quiero agradecer al Congreso de la República. Han sido
años muy difíciles los que nos han tocado. No difíciles,
uno no se puede quejar, mi Dios es muy bueno. Pero nos ha tocado
una chequera estrecha. Una Nación con déficit,
una Nación con endeudamiento, donde de todo hace falta.
Y todavía no hemos podido superar las adversas circunstancias,
pero ahí vamos. Quiero agradecerle al Congreso de la República
su comprensión y apoyo.
La aprobación de la nueva Ley de Vivienda, que nos facilita
en este cuatrienio aspirar a resolver 800 mil aspiraciones de
vivienda de los colombianos, con casa nuevas, con proyectos de
mejoramiento y con proyectos de legalización de escrituras.
Con la ayuda de Dios lo vamos a cumplir.
Y quiero destacar el trabajo de la bancada vallecaucana, y decir
aquí y repetirlo en todas partes, que mis amigos parlamentarios
del Valle de Cauca en lugar de estar pidiendo puestos o auxilios
parlamentarios como en la vieja política, han estado dedicados,
primero bajo el liderazgo de Claudia Blum y ahora bajo el liderazgo
de la presidente del Congreso, Dilian Francisca Toro, a sacar
adelante los grandes proyectos del Valle del Cauca como este
proyecto de Potrero Grande.
Y quiero destacar al Ministerio de Vivienda, a su anterior titular
Sandra Suárez Pérez, quien trabajó tanto
con Apolinar, el Alcalde (de Cali), para sacar adelante este
proyecto, y aplaudir el esfuerzo de Juan Lozano Ramírez,
ministro de la Vivienda, de Tony Jozame, el viceministro, y de
todos sus compañeros.
Era Juan Ministro Consejero de la Presidencia y vivía
pendiente de que pudiéramos sacar este proyecto.
Sí, los proyectos necesitan dinero, la vivienda necesita
terrenos, necesita vías, necesita servicios públicos,
pero fundamentalmente necesita, como todas las cosas difíciles
de la vida, amor. Y Juan Lozano le ha puesto amor a la tarea
que le encomendamos para servir a la ciudad de Cali, primero
como Ministro Consejero de la Presidencia y ahora como Ministro
de Ambiente y Vivienda.
Bueno, pero esto apenas es el principio. Hay que hacerlas todas.
Son 4.800 y vamos en 1.756. ¿Cuántas nos faltan?
4.800 – 1756. Seis a diez, cuatro. Seis a diez, cuatro.
Ocho a ocho, cero. ¡Uy! Falta mucho, falta mucho todavía. ¿Las
vamos a hacer todas, Juan?
Faltan 3.044 viviendas. Hay que hacerlas. Asumo un compromiso
frente a Cali. Cuenten con esos subsidios para que las hagamos
todas.
El país no puede estar pensando en lo que se hizo, sino
en lo que hay que hacer. Cualquier cosa buena que hagamos es
inferior a las inmensas necesidades del país. Por eso
todos días hay que hacer esfuerzos adicionales para lograr
nuevas metas.
El que crea que ya ganó está en la olla. El único
que gana es el que sea capaz de hacer esfuerzos adicionales para
recorrer un kilómetro más.
Veo aquí a los compañeros de Navarro. Tengan la
certeza de que el Gobierno Nacional, siguiendo las decisiones
que en esa materia tome la Alcaldía de Cali, está listo
apoyarlos para que también tengan una casa decente. Cuenten
con eso.
Investigué ayer con la señora Directora de Presupuesto
Nacional. Le dije: Voy para Cali mañana y quiero hablar
de la gran revolución de vivienda que tenemos que adelantar
allí con los dineros de los hallazgos del narcotráfico.
Platica toda para Cali y Buenaventura. Todita.
Entonces se va a proceder de la siguiente manera: primero, el
señor General Óscar Naranjo de la Policía,
comandante de la Dijín, en nombre del Gobierno Nacional
estará atento para que los jueces produzcan las sentencias
definitivas de confiscación de ese dinero.
Segundo, los parlamentarios, con el Ministro de Hacienda, los
incorporarán al Proyecto del Presupuesto de 2008. Para
no causar desfases presupuestales, que incorporan a través
del presupuesto de la Dirección Nacional de Estupefacientes.
Esos dineros se apropian como ingresos allí y se apropian
como egresos para los programas de vivienda de Cali y Buenaventura.
Es necesario tener listos los lotes en Cali. Tener listos los
lotes con los servicios públicos y la infraestructura.
Nos tiene que ayudar Emcali y la Alcaldía. Sé que
lo van a hacer.
En Cali el informe que me ha dado el Ministro (de Ambiente,
Vivienda y Desarrollo Territorial) Juan Lozano, es que se está avanzando
bien.
Mi preocupación es Buenaventura, donde les voy a pedir
al doctor Juan Lozano y a Tony Jozame, el viceministro, que definan
con la Alcaldía de Buenaventura rápidamente los
terrenos para que, lista la platica, empiece allí la obra
sin demoras. Porque este es un compromiso. Y trabajando entusiastamente
para convertir las palabras en hechos, Dios nos va a permitir
ver esa platica de los hallazgos del narcotráfico convertida
en vivienda social en Cali y convertida en vivienda social en
Buenaventura.
Encomiendo muy respetuosamente a la Alcaldía de Cali
que avancemos en los proyectos y sé que el Ministerio,
en coordinación con la Alcaldía de Buenaventura,
logrará tener listos los proyectos de Buenaventura para
esa gran respuesta en materia de vivienda.
Cuando nuestro Gobierno empezó, la pobreza en Colombia
estaba en cerca del 60 (por ciento). Grave eso. Las últimas
cifras hablan del 45. Necesitamos reducirla al final de este
Gobierno al 35, para que las administraciones que nos sucedan
puedan llevar a Colombia al año 2019, cuando se cumplirá el
Segundo Centenario de la Batalla de Boyacá, a que el nivel
de pobreza no exceda del 15 por ciento.
Nosotros tenemos varias acciones para derrotar la pobreza: plena
cobertura en la educación básica, plena cobertura
del régimen subsidiado de salud, millón y medio
de Familias en Acción (en el Valle del Cauca serán
72 mil y en Cali no menos de 17 mil), un gran avance en el Sena
que se viene dando, en créditos universitarios, cinco
millones de microcréditos. En fin, en esa tarea estamos.
Los programas de Bienestar Familiar: restaurantes escolares,
restaurantes para niños menores de 5 años, el apoyo
a los ancianos.
Tres cosas necesita el país y hay que llevarlas de la
mano: el país necesita seguridad. Sin seguridad no hay
inversión, sin seguridad el Estado no recauda los impuestos
para poder pagar los subsidios de esta obra. He ahí la
importancia de la seguridad.
Necesitamos que la economía crezca. Si no hay inversión
en Colombia, lo único que quedaría aquí para
repartir es la pobreza. Para que el país prospere y construya
equidad se necesita inversión. Y por supuesto política
social.
Hay que llevar esas tres cositas de la mano: seguridad, inversión
y política Social, de la mano. Es un trípode para
la confianza de los colombianos en la Patria, para la libertad
de la Nación, para la igualdad de la Nación, para
la fraternidad de la Nación.
Uno de los esquemas organizativos de la política social
que hemos definido es organizar millón y medio de familias,
de tal manera que cada una de esas familias tenga al alcance
la mayoría de las herramientas de políticas social
que ofrece el Estado.
Y vengo a proponerles lo siguiente: que hagamos de Potrero Grande
un gran modelo, y que entonces aquí las 1.756 que reciben
el subsidio de vivienda, todas tengan afiliación a la
salud.
Que las 1.756 familias que reciben el subsidio de vivienda tengan
los beneficios del Bienestar Familiar.
Que de las 1.756, aquellas que tengan hijos en edad escolar
puedan recibir el programa de Familias en Acción.
Y que trabajemos el tema de Banca de Oportunidades.
Entonces les voy a pedir a la doctora Alicia Arango, secretaria
de la Presidencia, y al doctor Juan Lozano, ministro, lo siguiente:
creo que es más fácil empezar el programa de erradicación
de la pobreza llevándoles todas las herramientas sociales
a las familias que reciben vivienda, que llevándoles vivienda
a las familias que reciben las otras herramientas. Porque la
solución que más tiempo toma es la solución
de vivienda.
Que le demos una reorientación, desde esta tarde, al
esquema de la política social. Y que allí donde
haya soluciones de vivienda, como las que se entregan esta tarde
en Potrero Grande, lleguen las otras soluciones.
Sé que ustedes quedan con una deuda. Sin embargo, voy
a insistir en esto: que venga la gente de Banca de Oportunidades
aquí, que trabaje con cajas de compensación, con
las ONG’s de Cali, con los bancos de Cali, con la Alcaldía,
con la Gobernación, para que hagamos el censo a ver entre
estas 1.756 familias quiénes tienen pequeños negocios,
que los quieran mejorar y requieran un microcrédito. Para
que, ya en posesión y titulares de la vivienda, les llegue
también el crédito.
Que venga la gente del Ministerio de Salud y examine a quiénes
de estas familias les falta el Seguro de Salud y se les tramita.
Que venga la gente de Bienestar Familiar, del Sena, a mirar
cómo están los programas de Bienestar Familiar
y del Sena para estas familias y se entreguen esos programas
aquí al máximo nivel.
Confío que antes de Semana Santa empiece a trabajar Banca
de Oportunidades acá, y que después de Semana Santa
pueda venir yo a mirar la entrega de los primeros cheques. Porque
necesitamos en Colombia el concepto de vivienda productiva: vivienda
más proyecto de emprendimiento. Entonces vamos a emprender
eso.
Permítanme invitarlos a algo: en Banca de Oportunidades,
de agosto a la fecha, Colombia ha entregado 700 mil microcréditos.
Doscientos mil a familias que por primera vez reciben un crédito
y han dependido del gota a gota. Pero la meta es llegar a cinco
millones.
El sábado por la mañana revisábamos el
programa en el sur de Bogotá y les pedí un favor,
que les quiero pedir a quienes hoy reciben de la Alcaldía
de Cali el crédito para estas viviendas: el programa del
microcrédito en Colombia es una revolución. Lo
grave sería que eso se frustrara. Y si la gente no nos
paga a tiempo se nos frustra. Por eso hay que hacer el esfuerzo
de pagar a tiempo, de pagar la víspera.
Ahora, veo que es un módulo de una casa, un módulo
inicial pequeño, pero con un gran potencial. Veo que son
unas casas altas, con una fachada agradable, con un lote grande
atrás, que tienen la posibilidad de crecer esa construcción
y hacerla en los dos pisos.
Ahora fui informado, cuando recorría la casa, porque
pregunté por qué no habían pintado el techo,
que ojalá lo pintaran. El eternit y el zinc se ven más
decentes con pintura, más agradables, para que los niños,
todo el mundo viva contento en esas casas.
Me decía el doctor Ortega que a las casas se les pude
quitar el techo, se puede ampliar en la parte de atrás,
para seguir el segundo piso en la parte de atrás.
Entonces, si se va bien en el servicio de este crédito,
inmediatamente se puede conseguir otro crédito para que
vayan creciendo la casita. Creo que a eso hay que jugarle. Todo
por etapas.
Hace un año aquí lo que había era una tragedia
humana. Estas 1.756 familias viviendo en tugurios en el jarillón.
Hoy por lo menos ya hay un principio de casitas decentes.
Si se va pagando cumplidamente ese crédito, vamos buscando
entre todos mecanismos para que tengan nuevos créditos
y las puedan crecer.
Inclusive aquí se podría hacer el experimento
Banco de Materiales. Traer las firmas proveedoras de materiales
a que creen aquí el sistema de ahorro. Que la gente ahorre
cualquier centavo, no importa cuánto ahorran sino que
haya la voluntad de ahorrar, para que les vayan haciendo créditos
de largo plazo en materiales, para la ampliación de las
casitas. Regalarlo todo es imposible.
Creo que lo que hay que hacer es crear oportunidades. Si aquí vienen
las firmas de materiales y crean un sistema de ahorro y financiación
de materiales, las familias pueden ir mejorando las casitas.
Entonces esta venida a Potrero Grande no tiene el significado
inaugurar unas casas, sino de constatar el avance de un programa,
que apenas empieza y que queremos llevarlo paulatinamente hasta
que las 4.800 familias tengan la solución inicial de vivienda,
paulatinamente para que todas las familias tengan las otras herramientas
sociales del Estado, y paulatinamente para que las familias tengan
la posibilidad de ir ampliando las casitas que hoy se entregan.
Es lo que quería decirles. Me ha pedido la palabra el
Presidente del Concejo de Cali. Quiere hacer un comentario. Con
el mayor gusto lo escuchamos”.