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Diciembre 15

Palabras del presidente Uribe en el Consejo Comunal número 185, en la Jagua de Ibirico (Cesar)

La Jagua de Ibirico, Cesar, 15 dic (SP). “Estamos llegando hoy al último Consejo Comunitario del año. Vamos a revisar muy bien los Consejos Comunitarios para que, con la ayuda de Dios, el año entrante sean más eficaces.

Es la tercera visita a la Jagua en 2007. Primero, cuando estábamos en muy serias dificultades; después, para hacer una evaluación de las primeras mesas de trabajo, y hoy venimos con el ánimo de hacer una evaluación de lo que ha pasado en todos estos meses, que será una evaluación muy puntual.

El Gobierno exige tener una visión estratégica, tener unos objetivos también de corto plazo, no solamente de largo plazo, sino unas metas de corto plazo que vayan demostrando que se puede alcanzar la gran meta de largo plazo.

El Gobierno exige asignar responsabilidades. El Gobierno exige seguimiento. Las cosas no se pueden dejar en el discurso, hay que hacer un seguimiento riguroso.

El Gobierno exige liderazgo y gerencia. Hay que hacer ese esfuerzo.

Antes de entrar en nuestro tema de evaluación, quiero referirme a dos temas particulares: uno, orden público en el Cesar, y otro, la agenda legislativa del Congreso que terminó ayer.

Congreso de la República

Darle las gracias al Congreso por el trabajo de esta legislatura difícil. Era una legislatura que alternaba con el tema de las elecciones regionales. Creo que se ha aprobado una ley bien importante, que es la Ley que desarrolla el Acto Legislativo sobre incremento de Transferencias.

Nosotros no regresamos a la fórmula del año 91. Le hubiera dado más plata a las regiones, pero imposible de pagar.

¿Para qué les digo yo a ustedes que les voy a dar 10 si a la hora de la verdad les quedo mal? Yo creo que la fórmula que se logró es buena, porque aumenta las transferencias sin quebrar a la Nación.

Lo peor es uno, por salir del paso, por ganarse un aplauso, decir: ‘Sí, vuelvan a la fórmula del 91’. Después se quiebra la Nación y le queda mal a las regiones. Yo creo que lo que hicimos es bueno. Creo que la Ley que acaba de aprobarse en el Congreso es buena.

¿Qué sigue con el Congreso? Primero, el Gobierno Nacional empezó a hablar con los líderes del Congreso para citar a extras. Extras para el primero de febrero. ¿Con qué objeto? Hasta ahora aparece la necesidad de algunos proyectos.

Primero, el proyecto de estímulos tributarios para que personas extranjeras o colombianos que residen en el extranjero, hagan inversiones en nuestro país para tener una segunda vivienda aquí. Esos proyectos generan mucho empleo, mueven la economía colombiana.

El mundo desarrollado, en los próximos años, va a pensionar a 70 millones de personas y muchas de esas personas quieren venir a países como Colombia y contribuir a proyectos de desarrollo que generen empleo. Por eso, nuestro interés en sacar adelante ese proyecto de estímulo a esas inversiones.

Segundo, para extras, en el tema laboral, unos proyectos de gran significado: cooperativas de trabajo asociado, calificación de legalidad del derecho de huelga y tribunales de arbitramento.

Pienso que esos proyectos laborales deben tramitarse con la mayor agilidad. Son objeto de las extras que se convocarán para el primero de febrero.

Me refiero a cada uno de ellos.

Las cooperativas. ¿Qué buscamos? Que no abusen. Que las cooperativas de trabajo asociado paguen todas las prestaciones; que paguen la afiliación a la seguridad social; que las cooperativas de trabajo asociado paguen la afiliación al Sena, a las Cajas de Compensación y a Bienestar Familiar. Es una frustración de este Gobierno que hasta ahora eso no se haya podido aprobar. Llamo al Congreso de la República, desde La Jagua (de Ibirico), a que cumplamos ese deber.

Nosotros hemos reformado 415 entidades del Estado, empezando por Telecom, muchos hospitales reformados, la última Ecopetrol.

Nosotros hemos dicho que el Estado no soporta ni la politiquería ni tampoco soporta los excesos de los sindicatos. El sindicalismo es para construir equidad, no para abusar.

Pero el país no puede permitir que nos vayamos al otro extremo. Al extremo de que crezcan las cooperativas de trabajo asociado, maltratando la remuneración de los trabajadores y maltratando la afiliación de los trabajadores a las entidades de seguridad social. No solamente a las de riesgos médicos, riesgos de pensiones, riesgos de accidente de trabajo y enfermedad profesional, sino también al Sena, a las Cajas y a Bienestar Familiar.

Le pido al Congreso una reflexión en esta Navidad, para que aprobemos ese proyecto y que nos quede bien aprobado. Porque han excluido de ese proyecto, hasta el momento, la contribución a las Cajas de Compensación Familiar.

Calificación del derecho a la huelga

El segundo tema, para avanzar en la agenda de Colombia con la OIT (Organización Internacional del Trabajo). La calificación del derecho del ejercicio de la huelga. En Colombia, tradicionalmente, el ejercicio de huelga por mandato de la Ley lo califica el Ministerio de Trabajo. Es el que dice si la huelga es legal o es ilegal.

En el caso de huelgas en el sector público, la OIT ha dicho que el Gobierno es juez y parte, que hay una huelga en una entidad del Gobierno, y el mismo Gobierno es el que califica, entonces que lo lógico es que sea la administración de justicia, la Sala Laboral de la Corte Suprema de Justicia. El Gobierno acepta eso.

Lo que está en discusión es si eso se generaliza o no, si dar ese paso para que la calificación de la huelga la haga la Corte Suprema de Justicia, se restringe a las huelgas en el sector público, o se generaliza para cualquier huelga independientemente de la naturaleza de la entidad. Ese es un tema en discusión.

Tribunales de arbitramento

El otro tema, pero le pido al Congreso de la República agilizar la aprobación de ese proyecto. El otro tema es el de los tribunales de arbitramento. Hay dos tesis: una, dar más tiempo para que empresarios y trabajadores prolonguen sus conversaciones antes de que el Gobierno intervenga y convoque a un tribunal de arbitramento obligatorio.

O eliminar los tribunales de arbitramento, salvo en los servicios públicos, como tribunales obligatorios y que queden solamente como tribunales voluntarios, convocados por empleadores y trabajadores.

Estos tres temas son urgentes: el tema de las cooperativas de trabajo asociado, el tema de la calificación de la huelga y el tema de los tribunales de arbitramento.

A nosotros, internacionalmente, y la OIT nos ha pedido, que por Ley de la República se diga qué es servicio público esencial.

Yo creo que el Gobierno tiene que ser muy fuerte para decirle a la comunidad internacional que no nos obliguen a decir eso por ley, que dejemos que los jueces de la República, en decisiones jurisprudenciales, lo vayan definiendo caso a caso. A mí no me parece fácil que la ley logre contener todas las hipótesis que pueden darse.

Permítanme, en gracia de discusión, considerar dos ejemplos hipotéticos: un municipio con un hospital y otro municipio con cuatro hospitales.

En un municipio donde hay cuatro hospitales, donde hay capacidad de sobra para atender a la comunidad, la huelga en un hospital puede ser huelga en servicio público, pero ese hospital se puede considerar que no es esencial en ese municipio, dado que hay otros tres.

En cambio, en el municipio donde hay solamente un hospital, ahí sí se puede considerar que ese hospital es servicio público esencial.

Otros me han dicho: ‘Bueno, pero es que la ley puede decir que es servicio público esencial la atención de emergencia; que es servicio público esencial tal y tal labor’.

A mí me parece eso muy difícil que la ley pueda advertir todos los casos e incluirlos todos. Me parece mejor que lo haga la jurisprudencia, con un argumento adicional: Colombia tiene una justicia independiente. Eso le da mucho prestigio a la institucionalidad del país. Por eso tenemos que ser muy sólidos en ese tema.

Ahora, espero que 2008 sea un año en el cual el Ministro de Protección Social le pueda decir al país que fortalecimos la inspección laboral, para que todos los empleadores colombianos cumplan con la ley.

Sesiones extras y partidos

Entonces, hasta ahora, para extras, sesiones extras del Congreso, irían el proyecto de estímulos a las inversiones en Colombia, de extranjeros y de colombianos residentes en el extranjero, para tener una segunda vivienda en Colombia. Proyectos grandes. Mientras la persona no esté en el país, esa segunda vivienda se utiliza como hotel, para ayudar a traer turismo.

Y segundo, estos tres temas laborales: regulación y limitación de las cooperativas de trabajo asociado, para que no sigan cometiendo abusos contra los trabajadores; segundo, el tema de la calificación del ejercicio de la huelga, la legalidad o ilegalidad de la huelga; y tercero, el tema de la convocatoria de los tribunales.

Me refiero a otro tema de gran importancia para el Congreso y para el país.

Este Gobierno ha dicho que Colombia no puede pensar en revocar el Congreso. Funciona la institucionalidad.

Hay una serie de congresistas que están siendo hoy investigados por la Justicia o enjuiciados. Y el Gobierno respeta eso, es un país de leyes, advirtiendo que la mayoría de hechos que se investigan ocurrieron antes de este Gobierno.

Este Gobierno es el que ha venido a desmantelar el paramilitarismo y a debilitar la guerrilla. Que no quepa la menor duda. Llevamos 5 años y medio de lucha. Yo me posesioné el miércoles 7 de agosto de 2002 y al otro día, antes de las 6:00 de la mañana, estaba aterrizado en el Aeropuerto de Valledupar para empezar la lucha contra todos los factores terroristas.

Este departamento estaba interferido. Ay! que ese día hubiéramos dicho: vámonos en carro a la Jagua o vámonos en carro a Santa Marta o a Riohacha. Hay que recordar de dónde venimos. Y esto estaba lleno de guerrilla y de ‘paras’. Hoy me hago una pregunta con retroactividad: ¿Si los ‘paras’ eran para acabar la guerrilla, entonces por qué había tanta guerrilla?

Yo he llegado, observando a mi Patria, compatriotas, a la conclusión que lo único que nos garantiza la paz es la institucionalidad. ¿Pretender uno que va a convivir con la guerrilla dándole una platica? Cuántos colombianos nos han dicho: ‘Si yo le daba platica a la guerrilla. Pero un día llegaron y me dijeron ‘no, la que me ha dado no me es suficiente, camine lo secuestro’. O pretender uno que se va a defender con los paramilitares. Lo único que nos sirve es la institucionalidad.

Entonces, a mí, no han faltado colombianos que me digan: ‘Con tantos congresistas presos, revoquen el Congreso’. Yo he dicho, de ninguna manera. El país tiene que preservar la institucionalidad. Y creo que se ha venido entendiendo y creo que el Congreso, en medio de las dificultades, ha venido trabajando. Eso debe ser un motivo de reflexión en Navidad y en Año Nuevo.

Pero sí necesitamos continuar el proceso de mejorar la calidad del Congreso.

Propongo a los congresistas y a la opinión pública estos temas de reflexión sobre el Congreso para Navidad y Año Nuevo. Y le rogaría a César Mauricio (Velásquez, secretario de Prensa) que tomen nota sobre ellos para que hagamos una buena discusión nacional, a ver cómo se puede presentar un articulado que complemente la reforma constitucional en curso. Eso no puede ir, por ser tema constitucional, no puede ir a extras. Ese tema tendría que presentarse el 16 de marzo, cuando empieza un nuevo periodo ordinario.

En la actual reforma constitucional en curso hay unos aspectos buenos, otros criticados.

Yo, particularmente, tengo duda de la conveniencia de elevar tanto el umbral. Porque no hay que tenerle miedo a que haya partidos pequeños. No puede haber anarquía ni proliferación de partiditos, pero tampoco puede, con el umbral, cerrarse la democracia. Creo que lo definido hasta ahora amerita una nueva discusión.

Me parece que tampoco hay que afectar la libertad de la gente. Tampoco hay que restringirle a la gente el derecho de decir: ‘Estoy en este partido o me voy para aquel’.

Eso también hay que repensarlo. Me parece que hay un buen avance en ese proyecto, cual es el de decir, mire, las personas que se han desmovilizado o que se desmovilicen -la Constitución siempre es una norma intemporal, sobre todo en esas materias de orden publico- no pueden participar en las siguientes elecciones. A mí me parece que eso es útil para que la gente tenga confianza en los procesos de desmovilización.

Entonces, hay cosas buenas en el proyecto que avanza y hay otras cosas que hay que revisar y hay otros temas que hay que complementar. A mi juicio, se debe complementar lo siguiente.

Primero, tenemos que conectar al Congreso con la opinión pública. La política se legitima si está conectada con la opinión pública. Si el Congreso o el Ejecutivo cree que se le puede dar la espalda a la opinión publica, nos equivocamos.

Y eso no es un tema de discurso populista. Cuando se concibe teóricamente el Estado de Derecho se estructura bajo unos elementos y el único que, a mi juicio, distingue al Estado de Derecho es la participación de opinión pública.

Le dicen a uno, es que la Constitución escrita es elemento diferencial del Estado de Derecho. Cualquier dictadura puede tener Constitución escrita. Le dicen a uno, es que ese elemento característico del Estado de Derecho que el poder este dividido en diferentes ramas independientes. Hay mucha dictadura que ha demostrado eso; que tiene un Estado compuesto de diferentes ramas que son independientes. Es que ese elemento constitutivo y característico, diferenciador del Estado de Derecho, los órganos de control. Hay dictaduras que dicen, yo los tengo.

En mi concepto, lo que finalmente viene a distinguir el Estado de Derecho es el alto grado de participación de la opinión pública. Por eso, nuestra insistencia en los consejos comunitarios, en el Estado comunitario. ¿De ahí qué se deriva? La necesidad de que el Congreso se conecte más con la opinión pública. ¿Y de ahí que se deriva? La necesidad de tener un Congreso de opinión.

Mi respetuosa recomendación al Congreso es que aproveche las legislaturas 2008 y 2009 para que el país llegue a las elecciones del 2010 convencido de que hay un Congreso de opinión, respetuoso de la opinión.

En esa dirección, también hay un aspecto positivo de la reforma constitucional en curso. Los partidos que se descuiden en la escogencia de sus candidatos al Congreso, cuando un congresista elegido pierda la curul, ya no puede ascender el otro: la pierde el partido. Y eso es bien importante porque va a obligar a los partidos a ser más cuidadosos en la selección de los candidatos.

Pero se necesitan otras cosas. Primero, ya lo dije, que no puedan los parientes de los condenados, hasta algún grado de consanguinidad o afinidad, participar en las siguientes elecciones. Porque no es bueno para el país que un congresista este condenado, pagando una pena en una cárcel, y que un poder político que dejó pueda elegir su sucesor. Eso no es bueno; es alguna manera de violar la pureza de la democracia.

Senado de calidades

Y el otro tema: yo creo que es necesario tener un Senado de calidades. Yo invito al Congreso a que piense en una reforma constitucional para un Senado de calidades.

El otro tema: hay un reclamo nacional que dice que por lo menos cada departamento debe tener un senador; que el Senado debería ser un Senado, una base de 32 senadores, uno por cada departamento, y el resto como hoy se elige.

Yo creo que eso no se puede descartar. Hay una serie de departamentos que no tienen senador y a mí me parece bueno que cada departamento, al elegir al senador que lo va a representar, se vea obligada, su ciudadanía, a pensar en el mejor. Yo creo que eso puede ayudar.

Moción de censura

Allí hay unos temas de discusión de gran importancia. Y quiero llamar la atención del Congreso sobre un tema que me preocupa mucho. El año pasado se aprobó una reforma constitucional de moción de censura, que apenas va a operar ahora desde enero y que puede ser muy peligrosa. Yo he estado en total desacuerdo con ella.

Se le dio el instrumento de la moción de censura a los concejos y a las asambleas. Y en el Congreso se dice, así quedó en el Acto Legislativo, que yo no estuve de acuerdo con él, que el Congreso puede censurar por decisión de una sola de las cámaras. Y ya no solo a los ministros. Son censurables superintendentes, una serie de funcionarios de un rango bastante técnico.

A mí me parece esto grave por diferentes motivos. Pero, primero, para los colombianos: ¿Cuál es la razón de ser y la consecuencia de la moción de censura? La moción de censura es un instrumento de control político que le permite al Congreso decir, este funcionario no está cumpliendo bien. Por votación mayoritaria le apruebo una moción de censura. ¿Cuál es la consecuencia? Que inmediatamente tiene que ser retirado.

Motivo de preocupaciones. ¿Qué alegaban los concejos y las asambleas? Decían, nosotros necesitamos controlar políticamente al gobernador y al alcalde, dénos la moción de censura.

Yo creo que esa no es la solución. Yo creo que hay que buscar una reforma. Porque a mí me da mucho miedo que eso sea simplemente un principio de chantaje; que nos desacredite la moción de censura. ¿Y eso por qué no se ha sentido hasta ahora? Porque apenas va a empezar a operar en enero.

Entonces, aquí queda bravo el Concejo con el Alcalde de la Jagua, por las cuotas burocráticas. Y le empiezan a censurar los funcionarios y a echárselos.

Y eso sí que puede crear todo lo contrario, en lugar de que haya independencia para el control, puede crear mangualas profundas. Porque un alcalde que se quiera defender, puede decir, yo no me dejo censurar. Vaya déle cuota a fulano, déle cuota a fulano, déle un contrato a fulano y otro contrato a perano. Van a apaciguar la moción de censura con clientelismo.

Por eso, llamo al Congreso que, si queremos llegar a las elecciones del 2010 con un Congreso de opinión, respetado por la opinión pública, revisemos eso de la moción de censura.

¿Y por qué es grave, grave lo que hicieron en el nivel nacional? Por lo siguiente: la Constitución decía: La moción de censura tiene que ser aprobada por mayorías de las dos cámaras. Ahora basta por la mayoría de una cámara. Eso es bien grave. Eso rompe dos cosas: rompe la razón de ser del bicameralismo y rompe el equilibrio entre el Ejecutivo y el Legislativo.

Muchos de ustedes, compatriotas, recuerdan que cuando yo asumí la Presidencia de la República lo hice con el compromiso de proponerle al país un sistema unicameral. No fue aprobado. Y yo respeto eso, no fue aprobado.

Entonces, persistimos en el bicameralismo. ¿Qué dice el bicameralismo? Hay dos cámaras, para que la una evite excesos de la otra; hay dos cámaras para que siempre la segunda corrija lo aprobado por la primera. Y recuerden que hay una figura, que es la figura de la conciliación. Si el Senado aprueba una ley sobre un tema, con unos artículos diferentes a los que aprueba la Cámara sobre el mismo tema, se necesita que ambas cámaras nombren una comisión para conciliar, ponerse de acuerdo, a fin de que la ley que se apruebe salga igualita de Senado y Cámara.

¿Qué dice el bicameralismo? Las decisiones esenciales del Congreso tienen que ser aprobadas, en texto idéntico, por ambas cámaras. ¿Por qué esto de la moción de censura rompe el bicameralismo? Porque la moción de censura es una decisión esencial. Entonces, ahora lo aprueba solamente una cámara. Grave eso. Entonces, a un ministro lo pueden censurar porque una de las cámaras votó mayoritariamente la censura, sin tener en cuenta la otra.

Eso es un quebrantamiento de la esencia del bicameralismo y un motivo de chantaje, también, al Gobierno y de pérdida de independencia del Congreso.

Y lo defienden a los niveles técnicos. Alguien me decía, mire, uno de los cargos más difíciles de Colombia es la Superintendencia de Servicios Públicos, que tiene una gran cantidad de entidades intervenidas. Eso sí que es difícil conducir una intervención de una empresa como Emcali. Hoy queda la Superintendente expuesta a que la desvinculen a través de una moción de censura.

A mí me parece muy grave eso. Así se lo dejé saber a nuestra coalición y vamos a pedirle al Congreso y a la opinión pública colombiana que desde el 16 de marzo empiece a tramitarse un proyecto para revisar ese adefesio clientelista que es la nueva concepción de la moción de censura.

Y esto hay que decirlo con toda claridad ante el país y repetirlo. Este ha sido un Gobierno que ha respetado el Congreso; que siempre, yo creo ser el Presidente que más veces me he sentado con el Congreso a colegislar. Horas en una mesa, mirando un punto de una ley, un artículo de la otra, etcétera.

En la reelección le hice campaña al Congreso con toda convicción. No he permitido que prosperen voces que hablan de la revocatoria del Congreso por el descubrimiento de la parapolitica.

He dicho, hay que consolidar la institución. Pero lo que no podemos es permitir adefesios clientelistas. Esta moción de censura es, simplemente, como la concibieron, un arranque de rabia clientelista de sectores del Congreso, que le hace un gran daño a la institucionalidad.

El Congreso debe pensar qué quiere: ¿Un Congreso con un Gobierno callado que lo apacigüe o un Congreso respetado por la opinión pública? He pensado que es el día oportuno para hacer este llamamiento, si queremos construir un Congreso respetado por la opinión pública.

Llamo la atención de ustedes, gobernadores y alcaldes. Me parece muy difícil el manejo de asambleas y concejos, con la moción de censura que empieza a aplicarse en enero, por el último Acto Legislativo aprobado por el Congreso. Se necesita esa reforma con urgencia.

Orden público

Tema de orden público. Durante los primeros días del Gobierno, todos los lunes venía yo a Valledupar a presidir un consejo de seguridad y a buscar a ver cómo derrotábamos a unos y a otros. Y avanzamos bastante.

¿Qué me preocupa? Me preocupa que ha habido unas bandas de narcotráfico, aquí en el sur, que están incursionando en Valledupar y en la Sierra Nevada. No paramilitares.

¿De dónde surge la palabra paramilitar? La palabra paramilitar se usa en Colombia para denominar las organizaciones privadas criminales, cuyo objeto era enfrentar la guerrilla.

El Cesar vivió mucho tiempo en poder de la guerrilla. Y los gobiernos venían a tomar whisky en el Festival de Valledupar. Y después llegaron los paras. Y cuando llegó este Gobierno encontró al Cesar con ambos.

Y muchos se enojan conmigo porque dije que no encontré Estado aquí. Hoy lo reiteró. Encontramos un Estado derrotado, un poder eficazmente ejercido, eficazmente ejercido por terroristas guerrilleros y por terroristas paramilitares.

Creo que hemos avanzado en la recuperación del imperio de la ley, pero no podemos permitir retrocesos.

Me preocupa mucho lo de Aguachica, San Martín y compañía. Hay ahí un corredor con el Catatumbo, donde hay bandas criminales del narcotráfico, en las cuales participan personas de los antiguos paramilitares, que hoy no están en la idea de combatir la guerrilla. Ese ha dejado de ser su propósito. Están en la idea del narcotráfico, de la extorsión y del secuestro y ya nos han secuestrado gente.

Se ha avanzado, pero no lo suficiente. Mí pedido a los altos mandos es que no digamos más ‘se le ha dado de baja a tantos o se han capturado tantos’, sino que le podamos decir al país ‘los hemos acabado’. De ese tamaño tiene que ser.

Y me preocupa lo de Valledupar y lo de Santa Marta. En la Sierra Nevada operan unos bandidos del narcotráfico, los señores ‘Mellizos Mejía’, vinculados, anteriormente, a las autodefensas; hoy están exclusivamente en el narcotráfico.

La semana pasada, la Policía les capturó un poco de gente en la Sierra. Pero a esos bandidos no los hemos capturado.

Y me preocupa lo siguiente, general Paredes: Me preocupa que me ha llamado mucha gente de Santa Marta a decirme que hay oficiales del Ejército que son cómplices de esos bandidos. Y eso no lo podemos permitir. Ojala hubiera un investigación rápida para sacarlos y mandarlos a la cárcel.

Y este tema de orden público no se arregla sino hablando con claridad y enfrentando a los bandidos con determinación. Esto no es con chismecitos de cóctel ni uno hablando por ahí en voz baja, muerto de miedo. Esos bandidos hay que acabarlos.

Yo le pido, General, que revisemos qué pasa en el Ejército, en Santa Marta y en Valledupar. Pero no pude haber la más mínima duda sobre un oficial del Ejército. Si los hay en complicidad con esos bandidos hay que sacarlos y denunciarlos penalmente.

Porque es que yo llevó dos o tres semanas oyendo decir eso y me dicen, no vaya a decir nada Presidente. ¿Cómo? ¿Si yo no lo digo públicamente entonces quién? ¿Me aguanto ese embuchado? ¿En esta batalla que hemos dado para derrotar todos los factores de terrorismo en Colombia?

A nosotros no nos van a apaciguar; esto tiene que ser con toda claridad. ¿Ahora, con el pelo ya desteñido, vamos a perder el color del temperamento? De ninguna manera. Que se pierda el color del pelo, pero no el temple del temperamento.

Este país, el único camino que tiene para vivir en paz, es enfrentar en la palabra y en los hechos a todos estos criminales.

A mí me da vergüenza cuando un ciudadano de bien de Santa Marta me dice: Allá siguen esos bandidos extorsionando y secuestrado y tienen complicidad con el Ejército.

Y me da vergüenza cuando me lo dicen los del Cesar. ¿Qué he sabido de Valledupar? Sacaron allá un nuevo movimiento que lo llaman que ‘nuevas autodefensas’. ¡Mentiras! Eso es puro narcotráfico y pura extorsión. Y están citando a unos ciudadanos de Valledupar a que paguen extorsiones.

Anoche me lo contó la OEA, el doctor (Sergio) Caramagna. Los están citando a un sitio que se llama La Mesa, donde se hacían las reuniones que condujeron a la desmovilización de ‘Jorge 40’. Entonces eso hay que acabarlo. Esa es la presencia, hoy, de mi general Naranjo aquí: a coordinar con el Ejército y la Policía cómo los vamos a acabar.

Pero no basta con tener protección en La Mesa. Hay que capturar a esos extorsionistas, porque mi compromiso es seguridad, tranquilidad para todos los colombianos, y en todas las horas y en todos los sitios. Si simplemente hacemos presencia en La Mesa, cerca de Valledupar, se destierran esos bandidos de ahí un tiempo, pero se van a extorsionar a otra parte. Por eso lo que necesitamos es acabarlos.

Fondo para guerrilleros desmovilizados

(El Fondo para beneficios a guerrilleros que se desmovilicen y entreguen secuestrados). Ese Fondo operaría de la siguiente manera: pensemos en los guerrilleros que tienen bajo su cuidado a la doctora Ingrid Betancourt, que la torturan. El que esta allá con ella no es ‘Manuel Marulanda’. No es ese bandido ni es (Jorge) Briceño, (‘Mono’) Jojoy, el otro bandido. Ellos están, hoy ya no están con comodidades, (Manuel) ‘Marulanda’ y (Jorge) Briceño. Hoy están es escondidos y el Gobierno detrás de ellos. En la esperanza de que algún día, si no los podemos capturar, queden condenados a comer raíces.

Esos bandidos no están con los secuestrados. ¿Quiénes están con los secuestrados? Unos guerrilleros de base. Muchos de ellos campesinos engañados.

Recuerden: allá esta tan secuestrada la doctora Ingrid Betancourt como los guerrilleros que la cuidan. ¿Que estamos ofreciendo? La libertad para ambos.

Si esos guerrilleros se desmovilizan, desmovilizan su estructura, su cuadrilla y traen a la doctora Ingrid Betancourt o a cualquiera de los otros secuestrados o los liberan a todos, esos guerrilleros van a recibir el beneficio de la libertad y beneficio económico.

Vamos a buscar los beneficios jurídicos para poderles dar la libertad y el pago de recompensas económicas contra el Fondo de 100 millones de dólares.

Esto hay que difundirlo intensamente, intensamente, mi General. Hay que coger ese tema de la liberación de los secuestrados con toda la ardentía, con todo el frenesí. Y que los colombianos nos ayuden difundiéndolo por toda parte”.