El alto consejero para la Reintegración, Frank Pearl, se reunió con comandantes locales de la Fuerza Pública, representantes gremiales y ejecutivos de las 50 empresas más grandes del Atlántico. Barranquilla, 23 nov. (SP). Con la asistencia de representantes del sector público y privado de la región, se llevó a cabo este viernes en Barranquilla el primer Comité Departamental de seguimiento al proceso de reintegración, que en el Atlántico atiende a 1.135 personas. Durante el evento, el alto consejero Presidencial para la Reintegración, Frank
Pearl, se reunió con representantes de gremios, con ejecutivos de las 50 empresas más grandes del departamento y con las autoridades militares y de Policía de la región.		El alto consejero para la Reintegración, Frank Pearl (centro), junto al secretario de Gobierno del Atlántico, Luis Tapias, y el alcalde de  Baranoa, Carlos Arturo Zambrano, durante la instalación del primer Comité Departamental de Seguimiento al Proceso de Reintegración, en el que participaron representantes gremiales, empresarios y autoridades militares y de Policía. Foto: Alta Consejería para la Reintegración.

“La Fuerza Pública me informó que el aumento del índice de criminalidad no está relacionado con las personas en proceso de reintegración”, explicó el Alto Consejero al término de la reunión.

Uno de los principales resultados del comité de seguimiento fue conseguir que Metrotránsito capacite a 400 desmovilizados, como complemento a su formación para auxiliares cívicos.

Además, Cementos Argos se vinculará al programa de voluntariado de Banco de Tiempo en Barranquilla y Sabanagrande, con la intención de donar tiempo de sus empleados para asesorar los planes de negocios de los reinsertados.

De otra parte, la empresa Meals les ayudará para que se vinculen en un plan de negocios de venta y distribución de helados.

Gracias a las mesas de trabajo, las secretarías de Educación del Distrito y del departamento capacitarán a docentes y desmovilizados en derechos y deberes educativos, al mismo tiempo que se asignará una partida presupuestal para que las instituciones mejoren la atención y los servicios para esta población.

Entre las ayudas figuran la educación gratuita, la entrega de kits educativos y las aulas de apoyo a discapacitados para disminuir la deserción escolar.

El área de la salud, una de las que ha tenido mayores dificultades, será reforzada con la visita de las EPS a los talleres psicosociales, realizando, al menos, una jornada de salud cada mes.

Para mejorar la atención en prevención y promoción se establecerán perfiles epidemiológicos de los participantes, y se destinarán recursos específicos para atención en salud mental y farmacodependencia.

“En el Atlántico estamos viendo un interés muy grande por parte de la empresa privada, los gremios y las instituciones en sacar el proceso adelante. Esta es la única manera de avanzar y de darles a estas personas una verdadera oportunidad de demostrar su compromiso con la paz del país”, destacó Frank Pearl.