Las redes engañaban a las mujeres prometiéndoles altos sueldos en prestigiosos restaurantes de Singapur y Hong Kong, donde al llegar eran sometidas a explotación sexual.

Bogotá, 17 oct (SP). Con la captura de diez personas, la Policía Nacional desarticuló dos redes internacionales de trata de personas que operaban en Pereira y Buenaventura, enviando jóvenes mujeres para que fueran explotadas sexualmente en el continente asiático.

La forma de atraer a las víctimas consistía en ofrecerles trabajo como meseras en prestigiosos restaurantes con una excelente remuneración, con lo cual convencían a las incautas jóvenes y ellas mismas preparaban la documentación necesaria para su viaje.

Las dos organizaciones transnacionales tenían toda la articulación para captar, trasladar, recibir, acoger y explotar en el ejercicio de la prostitución a las mujeres colombianas.

Las redes eran lideradas por tres mujeres. Una de ellas tenía nexos con las redes de Singapur y las otras dos con bandas de Hong Kong.