secuestrados antes o durante el período de la zona de despeje del Caguán, que duró 42 meses.
Por eso, les dijo a los mandatarios del mundo que no entiende por qué las Farc piden zona de despeje para el acuerdo humanitario, “si la tuvieron durante tanto tiempo y no los liberaron”.
“El país estuvo despejado muchos años, sin seguridad, lo que permitió la casi toma total por parte de la guerrilla y del paramilitarismo. Los ciudadanos no quieren terroristas, imploran la presencia única del Estado en todas las regiones”, enfatizó.
El Jefe de Estado también insistió en que las opciones que el país ha abierto para hacer posible el acuerdo humanitario “no son opciones para el posicionamiento político del terrorismo” y agregó que si las Farc quieren hacer política deben abandonar las armas y someterse a la Ley.
“Colombia no permitirá que la recuperación de su soberanía legítima y democrática se frustre para devolver espacio nacional o internacional al poder asesino del terrorismo. Si los terroristas quieren hacer política que renuncien a su actividad de derramar sangre y se sometan a la Constitución”, afirmó el mandatario y enfatizó en que “no permitiremos que la negociación sea una trampa que les facilite la destrucción de nuestra democracia”.
El presidente Uribe hizo un recuento de los esfuerzos adelantados por su Gobierno frente a este tema del acuerdo humanitario, desde la liberación unilateral de 177 integrantes de las Farc -incluido Rodrigo Granda, a petición del presidente francés Nicolás Sarkozy- hasta la facilitación de la senadora Piedad Córdoba, opositora de su Gobierno, y el apoyo del presidente venezolano Hugo Chávez.
“La única respuesta de los terroristas ha sido el asesinato aleve de los 11 diputados vallecaucanos, secuestrados durante más de cinco años, y el constante asesinato de luchadores de la democracia, como los ocurridos en la última semana, que hizo víctimas a Julio César Marentes y Alberto Martínez Barbosa, ambos candidatos municipales en el departamento del Tolima”, dijo el Presidente.
Finalmente, insistió en que el no al despeje y que los guerrilleros liberados no vuelvan a delinquir “son reservas para defender los superiores intereses de nuestra democracia” y reiteró el apoyo del Gobierno colombiano a las labores de facilitación que adelanta la senadora Piedad Córdoba y la intervención del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez.
“Hemos hecho reservas para defender los superiores intereses de nuestra democracia y estimulamos la tarea del Presidente Chávez y la Senadora Piedad Córdoba porque estamos comprometidos con la liberación de los secuestrados”, puntualizó el presidente Uribe. |