Cancún, México, 16 abr (SP). “Es muy difícil una estrategia internacional en un país que tiene que afrontar unos problemas domésticos muy severos, no obstante que se viene en una tendencia muy firme de mejoramiento.

Déjenme decirles que nosotros, en nuestro Gobierno, entendemos a Colombia como una casa, grande, donde todos tenemos que caber. En el techo hemos puesto la palabra confianza, confianza para vivir en Colombia, para invertir en Colombia, para trabajar en Colombia, para todo en Colombia.

Y tiene tres pilares: seguridad desde la democracia, es bien importante, desde la democracia. América Latina tuvo muchos proyectos de seguridad desde la dictadura. Seguridad desde la democracia implica seguridad desde los derechos humanos, seguridad desde la transparencia, seguridad para todo el universo poblacional, independientemente de que si los ciudadanos son amigos o adversarios del Gobierno, independientemente de que sean líderes empresariales, de los trabajadores, etcétera.

Segundo pilar, confianza inversionista. Tercer pilar, cohesión social. Van integrados. Pero el problema de seguridad de Colombia, si no se nota una gran determinación en Colombia para derrotar ese problema de inseguridad, generado por el narcotráfico terrorista, pues la gente no va a invertir.

Ese es un presupuesto necesario, pero tampoco es el único. Se necesita, además, un gran manejo de la economía, y dar mucha confianza para que la gente invierta. Y eso genera las posibilidades de construir cohesión social.

A su vez, en la medida que se avance en la cohesión social, se legitima la política de seguridad y se legitima la política de confianza inversionista. Por eso, todos estos pilares tienen una relación transitiva, cada uno depende de los otros dos, etcétera.

En el tema de confianza inversionista, nosotros tenemos muchos puntos. Primero, persistir en la política de Seguridad Democrática, el mundo no duda de nuestra firmeza.

Segundo, darle todas las garantías al sector privado, doméstico e internacional, para invertir en Colombia. Eso que parece muy elemental es necesario repetirlo en América Latina porque hay muchas tendencias de estatismo, del estatismo que fracasó tantas veces en América Latina. Inversión con responsabilidad social.

Tercero, el buen manejo macroeconómico. Nosotros hemos descendido el déficit del Gobierno Nacional Central del 7,5 (por ciento) al 3,3. El consolidado del 4,2 al 0,7 (por ciento). Descenso del endeudamiento, lo hemos bajado del 50 por ciento del PIB al 28.

Hemos reformado 420 entidades del Estado, para tener un Estado más eficiente, más transparente, desclientelizado. La última es la empresa colombiana de petróleos, que en un ambiente hostil latinoamericano, tentado simplemente al estatismo, nosotros logramos hacerle la reforma laboral, la reforma pensional, y capitalizarla ya con aportes de ciudadanos colombianos, de 500 mil ciudadanos colombianos, aportes que la capitalizaron en un 10 por ciento.

La reforma del Estado en Colombia ha ahorrado en este Gobierno 6 puntos del PIB.

Orientar incentivos tributarios a la inversión. Los hay bien importantes. La idea no es rebajar las tasas de tributación para todo el mundo, sino introducir incentivos a la inversión. El nuevo concepto de zonas francas, zonas económicas especiales. Este año debemos terminar con 50 en Colombia.

Algo bien importante, darles a los inversionistas la posibilidad de acuerdos con el Gobierno, de que van a tener estabilidad en las reglas de juego durante 20 años, y los tratados de Comercio.

En los tratados de comercio nosotros hemos hecho el tratado Comunidad Andina – Mercosur, un tratado con Chile, ya profundizamos el tratado con Perú, para ir mucho más allá de la Comunidad Andina, romper barreras que habían a la inversión. Hemos hecho el tratado con tres países de Centroamérica: con El Salvador, con Guatemala, con Honduras.

Estamos negociando con Canadá, estamos negociando con la Unión Europea, estamos negociando un tratado de protección de inversiones con China, un tratado de protección de inversiones con India, y tenemos el TLC con los Estados Unidos.

Obstáculos del TLC, tengo que ser muy prudente en el tema.

Lo primero que nosotros albergamos, como un deseo imperativo, es que los Estados Unidos preserve una política bipartidista hacia Colombia, como ha sido.

Segundo, nosotros vamos a seguir haciendo nuestra tarea.

Tercero, tenemos que pedir que no se le tome una fotografía a Colombia, sino que se le tome un video. La fotografía muestra un momento, el video puede mostrar una tendencia. Que miren de dónde venimos, dónde estamos, porque tenemos muchos problemas pero hemos resuelto muchos.

Y así como nosotros reconocemos todo lo que falta, pedimos que la comunidad internacional, en este caso el Congreso de Estados Unidos, reconozca todo lo que se ha hecho.

Venimos, óigase bien, de una tasa de asesinatos de 68 personas por cada 100 mil, ahora la tenemos en 36, muy alta, pero la reducción es notable. Venimos de tres mil secuestros por año, a 270 el año pasado, prácticamente erradicado el secuestro en las grandes capitales.

Venimos de un país que apenas lo visitaban 500 mil personas extranjeras al año, el año pasado millón 200 (mil personas). Venimos de un país que vio en cuatro años destruir 200 municipalidades por el terrorismo, en los últimos 36 meses no han podido destruir una sola municipalidad.

Un país que ha desmovilizado 46 mil integrantes de los grupos terroristas, de 60 mil que encontramos. Un país abierto a la crítica internacional, a la observación de las Ongs.

Nosotros en este Gobierno hemos autorizado la extradición de casi 700 personas vinculadas al terrorismo narcotraficante a los Estados Unidos. Eso yo creo que no lo puede contar ningún país en el mundo.

En Colombia asesinaban 15 periodistas por año, el año pasado asesinaron 1. Y la justicia ha dicho, por razones no relacionadas con su actividad periodística. Están menos amenazados los periodistas colombianos en la región.

Hemos desmontado el paramilitarismo, hemos recuperado el concepto de que solamente el Estado puede perseguir a los grupos terroristas, puede ejercer justicia.

Y queremos que todo esto lo vea los Estados Unidos, la comunidad internacional, el Congreso Norteamericano.

En Colombia asesinaban 250 líderes sindicales al año. Todavía asesinan. El año pasado asesinaron entre maestros y líderes sindicales 26. Estamos haciendo un gran esfuerzo, porque queremos cero asesinatos.

Hemos doblado el presupuesto de la justicia, estamos superando la impunidad, hay 130 personas hoy en la cárcel por todos esos crímenes.

Doctor (Ricardo) Hausmann, (director del Centro Internacional de Desarrollo) nuestra estrategia es pedir que miren la película de Colombia, no la foto de un día, en esa materia.

Ahora, el tema de la seguridad con los vecinos. Por ejemplo, este incidente que se deriva de la circunstancia de que bajo mi responsabilidad se ordenó un bombardeo en la selva ecuatoriana, donde había un campamento del grupo terrorista de las Farc.

¿Por qué digo bajo mi responsabilidad? Porque para dar confianza en Colombia hay que darle confianza a la Fuerza Pública de la Patria.

Yo habría podido decir, y no se habría presentado un problema internacional: “no mire, eso fue un error de la Fuerza Aérea Colombiana, ha sido llamado el comandante de la Fuerza Aérea a calificar servicios”, lo habríamos podido echar. Una irresponsabilidad, se perdería la confianza en las Fuerzas Armadas.

El Presidente que ordenó el bombardeo es el que tiene que decir: “yo asumo la total responsabilidad de esa acción militar”. ¿Por qué?, porque las Farc venía instalada allí de tiempo atrás, desde allí cometiendo crímenes contra los colombianos.

¿Qué vamos a hacer? Nuestra decisión es cumplir lo acordado en el Grupo de Río, lo acordado en la OEA. Por favor que no se hospede en ningún territorio a delincuentes, a estos terroristas que asesinan a los colombianos. Que Colombia tiene toda la voluntad de cumplir el compromiso de no repetir esas acciones.

Ahora, una de las cosas que me ha obligado moralmente a asistir a México, es para darle la cara al Presidente (Felipe) Calderón, a la opinión mexicana, a la prensa mexicana, por la muerte de unos jóvenes mexicanos en eso campamento.

Tengo que repetir lo que he estado diciendo desde anoche. El Presidente Calderón en muchas oportunidades, y ayer cuando nos reunimos, me ha reclamado por la muerte de estos muchachos. El Presidente Calderón ha presentado todos sus requerimientos, sus reclamos al Gobierno colombiano, su incomodidad, su dolor. Ha pedido que el Gobierno colombiano colabore con una investigación para llegar hasta los detalles. Nosotros hemos dicho que lo vamos a hacer.

Y también extraña la circunstancia de que yo he dicho que estos muchachos son terroristas.

¿Y por qué lo he dicho? Miren, yo deploro la muerte de ellos como la muerte de cualquier persona, aún la de ‘Raúl Reyes’, lo que pasa es que uno tiene que proceder a cumplir sus deberes de protección de los ciudadanos amenazados por el terrorismo.

He dicho: ¿por qué son terroristas? Primero, ellos no estaban en este campamento de los terroristas de las Farc en cumplimiento de una misión humanitaria autorizada. Segundo, ellos no eran rehenes de las Farc. Tercero, ellos estaban voluntariamente allí. Cuarto, los videos mostrados por las mismas Fuerzas Armadas del Ecuador los muestran a ellos en una relación de familiaridad con las Farc, una familiaridad equivalente a pertenencia a las Farc, a complicidad con las Farc, grupo terrorista.

¿Por qué las Farc grupo terrorista? Por los hechos, por la financiación y porque maltrata una democracia.

Es distinto hablar de las guerrillas latinoamericanas que enfrentaban dictaduras. Por enfrentar dictaduras gozaban de alguna legitimidad. En Colombia perturban una democracia.

En el resto de América Latina no se financiaban de la droga, en Colombia se financian de la droga, además asesinan mujeres, niños, hay mil 700 personas de las Fuerzas Armadas mutiladas por las minas antipersona.

‘Raúl Reyes’, el se ese campamento con quién estaban estos jóvenes, es del grupo que secuestra a Ingrid Betancourt, esas Farc, ese grupo terrorista, en los últimos 10 años ha secuestrado muchas personas y no ha devuelto 750 de los secuestrados.

Nosotros hemos hecho todos los esfuerzos.

Además, una democracia respetable como la democracia colombiana tiene el derecho de proceder como proceden por ejemplo otras democracias respetables. Tal el caso de las democracias europeas, que dicen: “Como aquí hay todas las libertades democráticas, tenemos que señalar como terrorismo la violencia, o la amenaza de uso de la violencia”.

Nuestra estrategia es pedirle al mundo que vea nuestra película, dar la cara. Nosotros respetamos profundamente a México, a su Gobierno, a su pueblo, queremos trabajar con la mayor armonía con el Gobierno del Presidente Calderón, y queremos hablar estos temas con toda franqueza en México, en los Estados Unidos, en Europa, en Suramérica, con nuestros vecinos.

¿Qué le pedimos allá a nuestros vecinos, al otro lado de las fronteras? Por favor no alberguen terroristas.

Hoy por mí, mañana por ti.