Durante el Mes de la Niñez y la Recreación es importante destacar el juego como parte esencial en el desarrollo integral de los menores, lo cual está contemplado en la Convención de los Derechos del Niño y en el Código de la Infancia y la Adolescencia. A continuación algunas recomendaciones para que padres de familia y comunidades tengan en cuenta a la hora de generar espacios de juego, que aunque sencillos son básicos para los niños y niñas.
Bogotá, 21 abr (SP). El juego es reconocido como parte fundamental del desarrollo integral de los niños y las niñas, como lo expresa la Convención de los Derechos de los Niños, ratificada por Colombia y contemplada en el Artículo 30 del Código de la Infancia y la Adolescencia.
Los padres de familia deben reconocer que al jugar con sus hijos e hijas aportan valores a su formación y que a través del juego los menores recrean el mundo, ensayan formas de convivencia, concertan normas, aprenden de su entorno y construyen visiones de futuro. El juego es el motor que los lleve a construir modos de vida más armónicos.
El juego es un derecho porque:
• Asegura el desarrollo armónico e integral.
• Contribuye a afirmar la condición de ciudadano y miembro de una familia, comunidad y una sociedad. Únicamente cuando el niño y la niña juegan son capaces de introducirse en el mundo social de manera natural.
• El juego es una necesidad vital, de la cual no podemos ni debemos privarnos.
• Obedece a una función natural del ser humano en la convivencia.
Desde comienzos del Siglo XX sicólogos, filósofos, biólogos, historiadores, sociólogos, escritores, psicoanalistas, siquiatras, expertos en educación, pediatras, médicos y entidades que han dirigido su trabajo en la niñez, han estudiado e investigado la necesidad humana de acercar, instalar y retomar el juego en la vida diaria y su importancia en el desarrollo del ser humano.
¿Cómo generar espacios de juego en casa?
Para generar espacios de juego en casa disponga de por lo menos de 30 minutos al día.
Para empezar tenga en cuenta las siguientes tres claves para jugar con los niños y niñas:
1. Entrar en su mundo.
2. Respetar el tiempo de juego con sus padres o adultos responsables.
3. Ayudarles a ejercer su libertad y creatividad.
De acuerdo con la edad de su hijo e hija, estos son algunos de los juegos que puede hacer:
Primera Infancia (0 a 6 años) |
Edad Escolar (7 a 12 años) |
Adolescentes (12 en adelante) |
0 – 2 años: esconder objetos (pelota, muñeco) debajo de papel crepé; representar y decir imitaciones de animales, o jugar con una pelota suave.
3 – 4 años: saltar sobre una cuerda quieta en el piso; jugar haciendo conversaciones con muñecos grandes y títeres; armar cubos con tapetes armables en espuma; colorear con crayones; animar la lectura de cuentos.
5 – 6 años: armar rompecabezas de piezas grandes en cartón; lotería; rondas con movimientos; pequeñas pistas de obstáculos (pasar por aros y/o debajo de un lazo, correr, etc.) |
Propicie un juego libre en donde armar, cortar e imaginar finales de cuentos e historias sean lo más divertido.
Inventar historias con los niños y niñas.
Juegos de roles para que se comprenda, por ejemplo, cómo el niño y la niña interactúan de igual a igual es un espacio como la cocina, la casa o el colegio. Y como las niñas juegan activamente con pistas de carros y los niños con muñecas.
Saltar lazo, jugar golosa, lanzar trompo, Yo-yo, canicas y recordar con los niños y niñas los juegos de la infancia. |
Los juegos de mesa se convierten en el gran atractivo. Invite a los jóvenes a disfrutar del ajedrez o parqués.
Juegos tradicionales como las escondidas, pistas de jabón o la lleva pueden ser muy apropiados y divertidos si se juegan en familia. |
¿Cómo generar espacios en barrios, municipios y ciudades?
Se deben brindar espacios de juego, educación y expresión a través de bases móviles, que aporten opciones para ejercer el derecho al juego en familia o entre adultos y niños y niñas, focalizando la mayor población posible.
Estas actividades pueden hacerse en espacios abiertos (parques, plazas, escenarios) y/o cerrados (bibliotecas, jardines, ludotecas, colegios) para convocar a la familia y lograr que se reúnan en torno al juego.
Gracias a esta movilización que desde 1999 se genera en todo el país con la Celebración del Día de la Niñez y la Recreación, Colombia cuenta con una excelente oportunidad para sensibilizar a adultos sobre la importancia del juego en el desarrollo infantil.
La celebración ha contribuido a articular esfuerzos entre organismos estatales, Ong’s y empresas privadas que participan activamente en espacios, con diferentes públicos, en los que el principal referente son los niños y las niñas, y donde la finalidad es reconocer el juego como un derecho.
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