(Según el más reciente reporte del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas, Dane, en los últimos doce meses la tasa de desempleo rural se ubicó en 7,8 por ciento, mientras que un año atrás, es decir en el período agosto de 2006 – julio de 2007, registró un 8,6 por ciento).
Allí hay una buena noticia. La mala es la del desempleo nacional.
El Gobierno tiene que manifestar su preocupación, reconocer que ahí tenemos un problema.
Hemos hecho todos los esfuerzos en materia de política de empleo, de estímulos a la inversión, de racionalización a la legislación laboral.
Ha crecido mucho el empleo en el sector de servicios, gracias a la ley (laboral) de 2002, el empleo en los hoteles, el empleo en los restaurantes, el empleo en los centros comerciales, en los almacenes de cadena.
En ausencia de la ley laboral de 2002, no habría crecido tanto ese empleo. Porque ese empleo necesita trabajar de noche, necesita trabajar los domingos.
Si no se hubiera suavizado el recargo, sería imposible crear empleo hoy en este sector de los servicios: almacenes de cadena, hoteles restaurantes, centros comerciales, etcétera.
Afiliación a cajas de compensación familiar
La semana pasada recibimos un estudio de las cajas de compensación. Lo analizamos con el Ministro de Protección.
Es bueno mirar esto: entre julio de 2007 y junio de 2008, el país creo 718 mil empleos. Ha habido creación de empleo. Lo que pasa es que se necesitaría crear más empleo.
Creó 718 mil empleos. De ellos, 442 mil se afiliaron a las cajas de compensación. Quiere decir que el 61 por ciento de ese empleo creado, es empleo ya formal.
Y hay una gran afluencia de nuevas empresas a las cajas de compensación. Crecieron. Pasamos de 249 mil empresas afiliadas a 295 mil.
La mayoría de trabajadores afiliados son de salario mínimo. Y la mayoría de las empresas son pequeñas.
Creo que estamos en mora de cambiar el sistema de calificación de la informalidad. Porque hoy califican como informales a todas las empresas pequeñas. Y una empresa pequeña de menos de 9 trabajadores, si tiene todos los trabajadores afiliados a la seguridad social, ¿por qué la van a calificar de informal?
Lo que debería importar para que se califique la empresa de informal o de formal, es la calidad del empleo. Si cumple con el mínimo salarial, si cumple con las prestaciones, si cumple con la afiliación a la seguridad social, esa empresa debe calificarse como empresa formal, independientemente del tamaño que tenga”. |
