“El Gobierno les ofrece a los guerrilleros que liberen a los secuestrados, a los guerrilleros que abandonen la guerrilla, el Gobierno les ofrece libertad con recompensa pecuniaria. Esto es: en ningún momento amnistía, en ningún momento indulto, pero en cualquier circunstancia libertad con recompensa, y para poder realizarlo, siempre asimilaremos el caso a acuerdos de intercambio humanitario”, explicó el Presidente Álvaro Uribe Vélez.
Bogotá, 10 dic (SP). El Gobierno Nacional asimila la desmovilización de guerrilleros que traen consigo a personas que estaban secuestradas, como un intercambio humanitario, con lo cual les ofrece libertad y recompensa.
Así lo aseveró este miércoles el Presidente Álvaro Uribe Vélez, tras reiterar que si esos guerrilleros que liberan a los secuestrados “han cometido delitos atroces, no se les puede garantizar amnistía ni se les puede dar indulto”, porque la Ley lo prohíbe, “pero el Gobierno les dará libertad y les dará recompensa”.
El Jefe de Estado explicó que esa libertad se puede garantizar, sin amnistía y sin conceder indulto, si se asimila a la libertad que se tiene que otorgar en un intercambio humanitario.
“¿Cómo se puede dar libertad sin conceder a amnistía y sin conceder indulto? De la siguiente manera: Es una libertad asimilable a aquella que habría que otorgar en un intercambio humanitario”, afirmó Uribe.
Manifestó que la deserción de un guerrillero trayendo consigo a una persona que estaba secuestrada, se asemeja a un acuerdo humanitario en el que “unos tienen que salir de la cárcel y otros salen del cautiverio del secuestro”.
De esta forma, el Mandatario reiteró y garantizó la libertad de esos guerrilleros “cualquiera sea la naturaleza del delito en que estén incursos”, aplicando la fórmula del intercambio humanitario.
Además, a esas personas el Gobierno les ofrece una recompensa (pecuniaria), como ocurrió con Wilson Bueno Largo, alias ‘Isaza’, quien recibió mil millones de pesos y hoy está en Francia junto a su compañera, como reconocimiento por haber desertado de la guerrilla trayendo consigo al entonces secuestrado Óscar Tulio Lizcano.
Finalmente, el Presidente Uribe Vélez invitó nuevamente a los guerrilleros que persisten en mantener a secuestrados en el cautiverio, para que abandonen la guerrilla y liberen a esas personas.
“Hacemos el llamado a la guerrilla, que tiene en su poder a los secuestrados, para que esos integrantes de la guerrilla hagan esta reflexión y tomen estas decisiones por el bien de Colombia, por la libertad de las personas a quienes han mantenido en cautiverio y, también, para que los mismos guerrilleros se puedan reintegrar a la tranquila vida de sus hogares”, concluyó el Presidente Uribe. |