Ricardo Montenegro indicó que el Ministerio de Relaciones Exteriores y la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes están en el proceso de actualización y renovación de la Ley 191 del 1995 o Ley de Fronteras. La idea es “darle la posibilidad a la gente de frontera de tener una ley sólida, fuerte, robustecida, que no genere expectativa, sino que permita convertir en realidades sus aspiraciones”, manifestó. Bogotá, 15 jul (SP). El Ministerio de Relaciones Exteriores y la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes trabajan en el proceso de actualización y renovación de la Ley 191 del 1995 o Ley de Fronteras, afirmó el Director del Plan Fronteras de la Cancillería, Ricardo Montenegro. El funcionario indicó que este es uno de los mayores retos desde la Cancillería, porque la actual Ley de Fronteras tiene enormes debilidades. “Aspiramos que para el segundo semestre del presente año, con diversos parlamentarios de la Comisión Segunda de la Cámara, se pueda presentar a consideración del Congreso un Proyecto de Ley, de iniciativa parlamentaria, que trate de hacer una actualización a todos esos requerimientos que hoy tienen la zonas de fronteras”, aseguró Montenegro. El Director del Plan Fronteras se refirió a este y otros temas en entrevista con www.presidencia.gov.co
		El Director del Plan Fronteras, Ricardo Montenegro, afirmó que la cancillería y la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes preparan una reforma a la Ley 191 del 1995 o Ley de Fronteras. La idea es “darle la posibilidad a la gente de frontera de tener una ley sólida, fuerte, robustecida, que no genere expectativa, sino que permita convertir en realidades sus aspiraciones”, manifestó. Foto: Miguel Ángel Solano - SP
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Pregunta: ¿En qué consiste el Plan Fronteras y a cuántos municipios y localidades ha llegado?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Es una estrategia de carácter interinstitucional, en el marco de la Comisión Intersectorial de Integración y Desarrollo Fronterizo, creada por decreto y que preside el Canciller. Hay alrededor de unas 15 entidades de orden nacional, ministerios, entidades descentralizadas, con las cuales trabajamos muy en llave. Y la idea es que la Cancillería sirva de articulador interinstitucional para llevar una oferta importante a las regiones de frontera.

Hasta el momento hemos visitado 34 municipios. En la fase inicial se venían haciendo visitas escalonadas de carácter técnico y ministerial. Durante el 2007, se hicieron 10 visitas y este año la meta es de 20 visitas. En 2010, sobrepasaríamos las 100 comunidades de frontera visitadas durante el periodo de Gobierno del Presidente Álvaro Uribe Vélez.

Pregunta: ¿Cuáles son los departamentos en donde está haciendo presencia el Plan Fronteras?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Guajira, César, Norte de Santander, Boyacá, Arauca, Guainía, Vichada, Vaupés, Amazonas, Putumayo, Chocó y San Andrés, Providencia y Santa Catalina.

Pregunta: ¿Qué seguimiento hace el Plan Fronteras a los recursos que se invierten en esas zonas?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Es absolutamente evidente que el Plan Fronteras no culmina con las visitas del Canciller. Ese es el inicio de la fase importante e interesante del Plan.

Cuando el Canciller visita estas comunidades, con las entidades que nos acompañan, se recogen las inquietudes de manera directa con la comunidad y sus autoridades. Así mismo, se hace una matriz de seguimiento, es decir, se incluyen unos compromisos muy puntuales que posteriormente tienen, por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores, un seguimiento permanente.

Pregunta: ¿Cuál ha sido el aporte de las Fuerzas Militares al Plan Fronteras?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: El Plan Fronteras siempre ha ido de la mano con el Ministerio de Defensa y con el Comando General de las Fuerzas Armadas. Uno de los temas que siempre atendemos es el de seguridad.

Hoy hemos podido constatar, en las diferentes visitas, que la presencia de la Fuerza Pública ha llegado hasta los más pequeños rincones de la geografía Patria en las fronteras de Colombia donde, si no está la Policía, está el Ejército; si no está el Ejercito, está la Infantería de Marina o la Armada.

Pregunta: ¿De dónde salen los recursos de los que disponen las diferentes entidades?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Fundamentalmente, de la programación que anualmente se hacen dentro de los planes de inversión. En algunas entidades ha sido más fácil que en otras, algunas ya han apropiado recursos propios para el Plan Fronteras dentro de sus requerimientos particulares anuales. En otras, las entidades van, revisan la inquietud y la programan para el futuro.

Pregunta: ¿Qué entidades hacen parte del Plan Fronteras?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Fundamentalmente, todos los ministerios, así como el Departamento de Planeación Nacional. Una vez conocidos los sectores en los que desea trabajar la comunidad, invitamos a esas entidades, que no siempre son las mismas, pero digamos que tenemos una base que son los ministerios de Educación, Protección Social, Ambiente y Cultura, entre otros.

Importantísimo también para el esquema del Plan Fronteras el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena); la Escuela Superior de Administración Pública (Esap), y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), entre otras.

Quiero resaltar, particularmente, el enorme esfuerzo replegado por el Ministerio de Comunicaciones, que nos permitió suscribir un acuerdo ínteradministrativo entre la Cancillería y el programa Computadores para Educar, que nos permitirá, de aquí a diciembre, ubicar en estas pequeñas comunidades limítrofes 1.800 computadores del programa. Estamos hablando de alrededor de unas 100 instituciones educativas y culturales que serán beneficiarias y un promedio estimado de 24 mil usuarios beneficiados.

Pregunta: ¿Participan organismos de control?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: En la medida que nos ha requerido, es decir, si en las visita de avanzada nuestros funcionarios identifican que hay temas sensibles a nivel de corrupción o que ameriten la presencia de la instancia de control, en esa misma medida los estamos invitando.

Pregunta: ¿Participan entidades privadas?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Sí, hemos estado en este último año tratando de concretar el esfuerzo importante del sector privado y que, en principio, lo hemos materializado a través de la colaboración, por ejemplo, de la Fundación Corona, de HDL Express, Foto Japón.

Pregunta: ¿Cuál es el balance del Plan Fronteras?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: El balance más consolidado lo tenemos a partir del 2007. Le puedo comentar que durante las 10 visitas que se realizaron en 2007 se pudo concretar unas inversiones por un orden superior a los 26 mil millones de pesos.

En las 10 visitas, las entidades participantes realizaron un total de 305 compromisos, de los cuales únicamente un 13 por ciento no ha reportado un avance o han sido declarados sin viabilidad porque no hay los recursos, porque no fue adecuada la formulación de las propuestas o porque hubo un factor externo que lo impidió.

Pregunta: ¿Cual es la meta del Plan Fronteras para el 2010 y cuál es el desafío de este Gobierno con ese proyecto?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: El reto fundamental es poder visibilizar la gestión del Gobierno Nacional en las regiones de frontera. Me atrevo a mencionar, también, que el reto mayor que tenemos en este momento, desde la Cancillería y la Comisión Intersectorial, es, por una parte, tener una Ley adecuada para las características adecuadas de nuestras regiones de frontera. Aspiramos a que eso se dé a más tardar en el primer semestre del próximo año, pero también lograr la formulación de una política nacional de integración y desarrollo fronterizo.

El señor Presidente ha sabido captar, de primera mano, las necesidades de las regiones de fronteras. Ha sabido traducirlas en instrucciones para nuestras entidades que, paulatinamente, se van concentrando en propuestas de desarrollo que, a través del Plan Fronteras y a través de muchas otras estrategias del Gobierno, se están produciendo las mejores posibilidades para que estas comunidades no estén aisladas del desarrollo.

Aspiro a que en el 2008 se inviertan 30 mil millones de pesos en estas zonas.

Pregunta: ¿En qué consistiría la reforma a la Ley de Fronteras?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Fundamentalmente, darle cabida a algo que quedó expreso y quizá con un avance significativo en el régimen constitucional de Colombia a partir de la Constitución del 91. Dos artículos constitucionales: el 289, que les da la posibilidad a los gobernadores y a los alcaldes de frontera adelantar, conjuntamente con sus homólogos de los países vecinos, programas de cooperación dirigidos a promover la integración y el desarrollo fronterizo.

Y el artículo 337 de la Carta Política, que le da la posibilidad al Legislativo de emprender regímenes especiales en materias sociales y económicas en beneficio de estas regiones de frontera. Esto es un reconocimiento a nivel constitucional de la necesidad de generar espacios de desarrollo de manera particular para las regiones de frontera.

Hoy, las cifras que el Departamento de Planeación Nacional maneja, tanto en necesidades básicas insatisfechas como en otros indicadores sociales y económicos, dan muestra clara de que hay un evidente rezago de las regiones de frontera en comparación con el resto del territorio nacional. El reto es acercar esos indicadores y esas necesidades evidentes de las regiones de frontera al promedio nacional.

Pregunta: ¿Cree que se pueda tener ese Proyecto de Ley antes del 2010?

Ricardo Montenegro, Director del Plan Fronteras: Es nuestra aspiración. La idea es que una vez el Congreso esté de acuerdo en un proyecto que pudiera ser presentado, trabajemos interinstitucionalmente en el marco de la Comisión Intersectorial de Integración y desarrollo fronterizo, para hacer un análisis que nos permita darle la posibilidad a la gente de frontera de tener una Ley sólida, fuerte, robustecida, que no genere expectativa, sino que, por el contrario, permita convertir en realidades sus aspiraciones.