del artista colombiano de música vallenata, Jorge Celedón, a quien invitó a interpretar algo de su repertorio.
Celedón lucía un traje oscuro y corbata. El Presidente Bush se ubicó al frente del cantante colombiano, en una silla reservada para él, y prestó atención para escuchar las canciones que se interpretarían.
El artista hizo sonar su acordeón e interpretó la canción ‘Libertad’. Contagiado por el ritmo, Bush, en su silla, movía su pie derecho al ritmo del vallenato, que inundó el recinto y contagió con sus aires de la tierra de Macondo al público asistente.
Ya para ese momento se había armado el parrandón en la Casa Blanca, y en medio la fiesta se pasó a la segunda canción. El Presidente estadounidense saltó de su silla y pidió una más.
“Aquí traigo una guitarra y un acordeón”, comenzó a cantar Celedón, y el Presidente Bush, de nuevo en su silla, se movía un poco más, siguiendo el ritmo.
Al concluir sus interpretaciones, el cantante vallenato se sorprendió al ver ponerse de pie al Mandatario estadounidense, quien lo abrazó y felicitó.
Y faltaba aún más: que los asistentes salieran del rigor del protocolo y buscaran acercarse al Presidente Bush para tomarse la foto del recuerdo. |