Con la venta y uso de estos productos, los más perjudicados en su mayoría son los menores de edad, además del daño ambiental que producen. El funcionario solicitó al Congreso de la República tener en cuenta estas consideraciones frente al proyecto que busca modificar el artículo 4º de la Ley 670 de 2001, relacionado con el uso y distribución de artículos pirotécnicos o fuegos artificiales.
Bogotá, 17 jun (SP). El Ministro de la Protección Social, Diego Palacio Betancourt, consideró como inaceptable que el uso de la pólvora sea declarado como una “costumbre sana”, desconociendo el peligro que esto representa especialmente para los niños. También debe tomarse en cuenta la contaminación ambiental que estos elementos producen.
Frente al proyecto de Ley que cursa en el Congreso, por medio del cual se modifica el artículo relacionado con el uso y distribución de estos artículos, el funcionario solicitó, mediante un oficio dirigido a la Presidencia de esta corporación, que esta iniciativa sea archivada o que, en caso de que se someta a votación, se haga de manera nominal.
“Contrario a lo planteado en la exposición de motivos de la iniciativa, este despacho insiste en que difícilmente puede catalogarse el uso de fuegos artificiales como una ‘costumbre sana’, cuando anualmente se registran por esta causa entre 500 y 800 casos de quemados, en su gran mayoría niños, y esto pese a existir prohibiciones”, señala el Ministro en el oficio.
De igual forma, menciona que “resultaría inaceptable que esa Honorable Corporación permitiera una afectación de tal magnitud a la salud pública legalizando una actividad sin la observancia de los mínimos requisitos de seguridad para quienes manipulan, almacenan y comercialicen estos productos y la comunidad que los rodea”.
El Ministro Palacio reiteró que los requisitos propuestos en la modificación de la Ley no constituyen garantía de seguridad para el almacenamiento, distribución, venta, uso y presentación de artículos pirotécnicos y fuegos artificiales, máxime cuando se trata de una industria de alto riesgo.
“Lo que se exige se limita a: ser mayor de edad, tener experiencia certificada por la Federación Nacional de Pirotécnicos, Fenalpi, recibir y demostrar capacitación técnica certificada por el Sena y tener una capacitación del Cuerpo Oficial de Bomberos, sin que se aclare cuál es la calidad e intensidad de la experiencia que se debe certificar, ni la intensidad horaria y las características de las capacitaciones recibidas en el Sena y el Cuerpo Oficial de Bomberos”, concluyó el titular de la Cartera de Protección Social. |