El jefe de la cartera agropecuaria, indicó que el Ministerio de Agricultura y el Comité Directivo de la Federación decidieron utilizar estos recursos para incrementar el subsidio a los fertilizantes. En ese sentido, se aprobó duplicar el incentivo por árbol renovado, bien sea por zoca o por siembra, de 120 pesos a 240 pesos.
Arias indicó que estos recursos se entregarán en especie y no en dinero, en su equivalente en fertilizantes. El nuevo monto del incentivo representa alrededor de un millón 440 mil pesos por hectárea y equivale al 24 por cieno del costo de fertilización anual por hectárea.
Según Silva, el AGC cuenta con un presupuesto de 40 mil millones de pesos, que de conformidad con el Convenio suscrito entre el Ministerio de Agricultura y la Federación de Cafeteros, deberá ejecutarse a través de un primer pago de 1.000 millones de pesos que ya fueron entregados a la FNC; un segundo pago de 19 mil millones que se desembolsará en abril de 2008, y un tercer pago de 20 mil millones de pesos, que se dará de acuerdo con la ejecución de los 20 mil millones iniciales.
Estos recursos (40 mil millones) más 22 mil millones de pesos asignados por el Fondo Nacional del Café, permitirán renovar 40 mil hectáreas tecnificadas.
En total, durante el presente año, se renovarán 100 mil hectáreas de café, correspondientes a 60 mil hectáreas con el esquema de ICR y 40 mil hectáreas con el esquema de incentivo a fertilizantes.
Durante una rueda de prensa, Silva recordó que el pasado Congreso Extraordinario Cafetero solicitó al Presidente de la República utilizar los recursos del AGC para apoyar la crisis de rentabilidad de los productores, en particular para la implementación de un incentivo a la renovación de cafetales y a la compra de fertilizantes.
De esta forma, se busca mejorar el ingreso del caficultor de manera sostenible como resultado de un aumento en la productividad.
El Gerente de la Federación, agregó que este nuevo mecanismo de entrega del AGC es revolucionario en términos de su impacto en los ingresos del caficultor.
En los últimos años, los caficultores que han renovado sus cafetales han aumentado la productividad por hectárea de 14 a 21 sacos de 60 kilos.
En ese sentido, según el Ministerio de Agricultura, es claro que la renovación de cafetales es una de las formas de afrontar la revaluación del peso colombiano. Los caficultores al renovar los cafetales no sólo obtienen una mayor producción sino una mejor calidad, reconocida hoy con un sobreprecio en el mercado. |
