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Noviembre 02 Versión imprimible
Respuestas del Presidente Álvaro Uribe Vélez a afirmaciones de las comunidades indígenas del Cauca
"La reforma al Estado que hemos hecho es totalmente ajena al neoliberalismo"
"Nosotros practicamos un Estado al servicio de la comunidad, contrario al neoliberalismo"
"Es desproporcionado decir que le estamos entregando el país a las multinacionales"
"La política de Seguridad Democrática es para protegerlos a todos"
Este Gobierno es el primero en pedir investigaciones en casos de denuncias de violación DD.HH
Presidente pide a Defensor del Pueblo tramitar denuncias de indígenas sobre violación de DD.HH ante la Fiscalía

La María, Piendamó, Cauca, 2 nov (SP). “Lo primero que debo recordar es esto:

Este Gobierno, a lo largo de más de seis años, ha dialogado ampliamente con el pueblo colombiano y lo ha hecho respetuosamente. Si hay algo ajeno a este Gobierno es el espíritu de discriminación. Y nuestro diálogo permanente es con los sectores sociales y más desprotegidos de la Patria.

Como se ha mencionado la palabra ‘xenofobia’, la palabra ‘discriminación’, quiero recordar que, como Gobernador de Antioquia, asumí y desarrolle dos responsabilidades en el Cauca, en comunidades indígenas.

Cuando vino toda la avalancha del Páez, asumimos con afecto, con inmenso afecto, reconstrucciones en Mosoco y en Mondomo. Allá en la Cordillera me dijeron los indígenas, jocosa y afectuosamente: ‘No traiga a las Convivir que aquí lo protegemos con la guardia indígena del Cauca’. Y así fue.

Olvidémonos de temas de xenofobia, en un Gobierno que tiene un corazón genuinamente popular.

Hay diversas maneras de pensar. Yo no puedo decir que porque Feliciano (vocero de las comunidades indígenas del Cauca) no piensa como yo él no es popular ni el puede decir que como yo no pienso como él, yo no tengo un compromiso con los sectores populares.

Hoy he recibido una carta de comunidades indígenas de mi departamento reconociendo los esfuerzos que se han hecho allí, positivamente. Me la llevaron esta mañana a la casa y me dijeron: ‘Téngala, Presidente, para que tenga un testimonio de lo que se ha hecho por aquí, en una tarea sumamente positiva’.

Empecemos por los temas de Feliciano, vocero de la Minga:

Primero: hombre, Feliciano, yo no le puedo aceptar que usted ponga en igual nivel a aquellos colombianos que están secuestrados por el grupo terrorista de las Farc y a los colombianos que por órdenes de la Justicia están en las cárceles colombianas. Yo no le puedo aceptar eso.

Las cárceles colombianas están hoy abiertas a la vigilancia de los organismos nacionales e internacionales de derechos humanos. Usted sabe cómo han salido del cautiverio los secuestrados del grupo terrorista de las Farc.

Ahí tenemos una diferencia de principios: para usted -porque lo he oído en muchas ocasiones, no es la primera vez que lo escucho ni la primera vez que deliberamos- es fácil poner en el mismo nivel a los unos y a los otros. Para mí, una cosa es la institucionalidad de la democracia colombiana y otra cosa es el terrorismo de las Farc. Y no me venga a decir que les estoy diciendo terroristas, no.

Pero lo que yo no puedo admitir, no puedo conceder, es que se piense y se exprese poniendo a las Farc en el mismo nivel de las instituciones colombianas.

‘La reforma al Estado que hemos hecho es totalmente ajena al neoliberalismo’

Como son 40 minutos para contestar tantas afirmaciones, le voy a decir lo siguiente:

Algo que caracterizó al modelo neoliberal fue el desmantelamiento del Estado y la falta de regulaciones.

Nosotros hemos reformado 411 instituciones del Estado, sin desmantelar. La reforma que hemos hecho es totalmente ajena al neoliberalismo. Pero también ajena al burocratismo.

La izquierda, que tanto defendió el estatismo, finalmente logró que el estatismo en nuestros países se pusiera al servicio de excesos sindicales de corrupción y de politiquería y no al servicio de la comunidad.

Cuando en el Consejo Comunitario de ayer revisábamos cómo han venido mejorando las clínicas del Seguro Social, por ejemplo, es porque no las desmantelamos. Pero las hemos recuperado de esa privatización que habían sufrido por excesos sindicales, politiquería y corrupción; las hemos transformado del desgreño del Estado y las hemos traído a la eficiencia social.

‘Nosotros practicamos un Estado al servicio de la comunidad, contrario al neoliberalismo’

La crisis del mundo, la pirámide de Wall Street, del casino.

Este Gobierno resistió durante dos años la crítica porque manteníamos regulaciones y obstáculos a los capitales de corto plazo.

La historia nos dio la razón. Gracias a eso, Colombia, hoy, en medio de esas dificultades de la economía no tiene dificultades extremas de otros países. Gracias a que mantuvimos esas regulaciones, contrarias al tradicional concepto neoliberal. Gracias a que mantuvimos esas regulaciones, nuestro sector privado está menos endeudado en moneda extranjera.

Colombia se expuso menos a la negociación de lo que han llamado ‘los derivados secundarios’. El capital especulativo pudo hacer menos daño en Colombia. Si nosotros hubiéramos practicado ese modelo de darle rienda suelta al capital especulativo, hoy ese capital estaría saliendo al galope de Colombia y dejando al país en la ruina.

Tenemos dificultades. Pero gracias a que hemos tenido algún acierto en la orientación y en las regulaciones, estamos en condiciones menos malas que otros países.

Nosotros practicamos un Estado al servicio de la comunidad, contrario al neoliberalismo que lo deja todo en el mercado y contrario al burocratismo, que lo deja todo en el estatismo ineficiente.

‘Es desproporcionado decir que le estamos entregando el país a las multinacionales’

Afirman que les estamos entregando el país a las multinacionales, la tierra. Díganme un solo caso. Las afirmaciones hay que sustentarlas. Un solo caso de tierras que les estemos entregando a las multinacionales.

- La Salvajina (responden las comunidades indígenas)

La Salvajina, una represa que vendió el Estado colombiano para generar energía eléctrica; que lo hizo en el pasado. Ahora vamos a generar 4 millones de kilovatios de energía en Colombia para bien de todos los colombianos, en condiciones equitativas para el país.

Lo de La Salvajina lo hicieron anteriores gobiernos, pero sería yo injusto: ¿qué daño le hicieron al país con eso? Ningún daño. Otra cosa es que se le pueda seguir exigiendo a La Salvajina más compromiso con los sectores sociales del Cauca. Eso es posible y el Gobierno lo comparte.

Pero salir con eso que ocurrió en el pasado y que lo hicieron gobiernos anteriores en condiciones de equidad a decir que les estamos entregando el país a las multinacionales, yo creo que es desproporcionado.

- Urrá (le dicen nuevamente las comunidades indígenas)

Urrá, hoy, una pequeña represa; la segunda no se ha podido hacer y el Gobierno respeta la discusión. Cerrejón, lo vendieron anteriores gobiernos y yo creo que al país le está yendo bien con esa operación.

Si ustedes suman, queridos amigos, lo que recibe el país por impuestos municipales, por regalías, por impuestos nacionales, encontrarán que al país le está yendo bien en esa materia.

Ustedes empezaron atacando a nuestro modelo de xenofobia. ¡Por favor! No incurramos en el análisis de los temas económicos y sociales con xenofobia.

Por fortuna, gracias a esos acuerdos, que admiten toda la discusión, este país que no producía carbón y que estaba sobre un manto de carbón, para que en Colombia haya menos pobreza, está ya produciendo 80 millones de toneladas de carbón.

‘La política de Seguridad Democrática es para protegerlos a todos’

Que la Seguridad Democrática, que involucra a civiles. Lo que ha hecho es defenderlos. Veamos las cifras.

Primero, a mí me extraña que en la presentación de alguno de ustedes hablen del período 2003-2008 e ignoren lo que ocurría en este departamento, en manos de la guerrilla y con los paramilitares ingresando, cuando empezó nuestro Gobierno.

Este departamento. De aquí desalojamos el principio paramilitar y de aquí estamos desalojando la guerrilla. Entre unos y otros lo iban a acabar y eso sí se ignora. No nos dicen cómo estaba el Cauca cuando este Gobierno empezó.

Y veamos las cifras. ¿Quiénes eran las victimas de la guerrilla? Civiles. ¿Las victimas de los paramilitares? Civiles. La política de Seguridad Democrática es para protegerlos a todos.

¡Por favor! Analicemos todo el proceso histórico. Ustedes hablan de las diferentes masacres. Voy a referirme a las que han anunciado aquí: Nilo, 1991; Naya, abril de 2001; Gualanday, noviembre de 2001; San Pedro, 2001. Todas anteriores a este Gobierno.

Es que la política de Seguridad Democrática no se lo inventó el Comando Sur, como ustedes lo denuncian. A mí antes me acusaban allá. A mí me mantienen acusado allá, en Europa y en todas partes.

La política de Seguridad Democrática es una reacción de la base del pueblo colombiano contra 40 años de agresión terrorista que habíamos sufrido antes.

Y voy a referirme a una masacre que sí ocurrió en este Gobierno: la mascare de La Guajira, de Bahía Portete, abril de 2004; bajo el mando de los alias ‘Pablo’ y ‘Chemabala’, dispararon bajo las órdenes de ‘Jorge 40’, preso y extraditado por este Gobierno y ha confesado ese crimen.

Este Gobierno es el que viene con la Seguridad Democrática superando la impunidad y derrotando la violencia.

Y veamos otras cifras, que es bueno examinarlas en este debate público.

Cuando nuestro Gobierno empezó, Colombia tuvo años de 28.837 asesinatos oficialmente reconocidos. Y a eso hay que sumarle lo que ha aparecido ahora en las fosas encontradas gracias a la Seguridad Democrática de este Gobierno.

Todavía se dan muchos asesinatos, pero eso se ha reducido, todos los años va mostrando un descenso, un descenso.

El año pasado se registran 17 mil 198 asesinatos. Todavía es muy alto, pero hay una gran tendencia de descenso.

Este país sufrió, por años, tres mil secuestros. Quisiéramos cero secuestros. Estamos en 170 secuestros. Aquí mataban, en un año, 250 líderes sindicales. Todavía llevamos 31, 32 y es mucho. Quisiéramos cero. Pero hay una gran disminución.

En este país asesinaban 15 periodistas al año, distinguidos periodistas internacionales. Se ha acabado el asesinato de periodistas, gracias a la Seguridad Democrática, y están menos amenazados.

Este Gobierno ha derrotado el paramilitarismo y va a derrotar a la guerrilla. Que no quepa la menor duda.

El paramilitarismo. ¿De dónde surge la palabra? La palabra se utilizaba para señalar, denominar organizaciones privadas criminales, cuyo propósito era sacar a la guerrilla. Si algo importante ha sucedido es que el Estado ha recuperado el monopolio para combatir grupos delincuenciales.

Yo creo que esa es una ganancia para Colombia, como la ganancia de la recuperación del monopolio de la Justicia.

La Justicia había sido derogada, usurpada en muchas regiones, sustituida de facto y violentamente por guerrilla y/o paramilitares. Se ha recuperado el monopolio de la Justicia del Estado.

El Cauca. En el Cauca, que estaba totalmente preso, en manos del terrorismo de las Farc, en el Cauca se han venido recuperando las libertades, gracias a la Seguridad Democrática. Y esa incursión que estaba buscando el paramilitarismo se frenó, gracias a la seguridad de este Gobierno.

En el Cauca. El tema de homicidios. En el año 2001: 743. El año pasado todavía se dieron 646. Es mucho menor la disminución aquí que en otras regiones de Colombia. Lo reconozco.

En el Cauca hemos pasado de 91 secuestros a 18. Hay una gran disminución.

Las masacres nuevas que ustedes denuncian.

Miren, a este Gobierno no tienen que venir aliados internacionales de las Farc a darle clases de derechos humanos.

Nosotros, desde que planteamos la Seguridad Democrática la propusimos como un valor democrático. La propusimos para proteger la vida de todos los colombianos, los derechos de todos los colombianos. Hemos dicho que tiene que ser eficaz y que tiene que ser transparente.

Esta no es una de las dictaduras del sur. Esta es una democracia. Mientras en las dictaduras del sur, para enfrentar la insurgencia se cercenaron las libertades, se cerraron a la vigilancia internacional, se suprimió el pluralismo, Colombia es un país que gracias a la Seguridad Democrática ha profundizado el disfrute de las libertades, el respeto al pluralismo. Un país abierto a la vigilancia internacional.

El único riesgo que corre es el riesgo de discutir con el Presidente. Porque viene unos muy sesgados, que ni siquiera saben cómo pensamos. Simplemente llegan de manera totalmente atrabiliaria a condenarnos.

Esta semana no fue la primera en la cual reaccionamos en materia de derechos humanos. Recuerdo: aquí los casos de derechos humanos se han hecho públicos. El Gobierno es el primero que ha pedido investigación y verdad.

Lo pedimos en Guaitarilla, en Cajamarca, en Jamundí, en Arauca. En Arauca murieron dos sindicalistas; pertenecían al Eln. Pero los integrantes de la Fuerza Pública que los asesinaron están en la cárcel, porque no fueron bajas en combate, sino asesinatos fuera de combate.

Este Gobierno es el primero en pedir investigaciones en casos de denuncias de violación DD.HH

Este Gobierno es el primero en pedir que se haga las investigaciones administrativas y judiciales en los casos de denuncia de violación de derechos humanos.

Lo que no podemos permitir, apreciados compatriotas, es la acusación temeraria.

Primero, cuando había una baja decían: ‘No la hizo el Ejército, la hicieron los paramilitares y se la entregaron al Ejército para legalizarla’. Y ahora, cuando hay una baja, siempre dicen: ‘No, es que es un asesinato extrajudicial -que se debería decir: un asesinato fuera de combate-‘.

No señores. Así como a este Gobierno no le faltado diligencia para tomar todas las medidas que se requiera tomar para proteger los derechos humanos, tampoco puede permitir que se desmotive a la Fuerza Pública o que se desacredite la política de Seguridad Democrática, diciendo, ahora, que no hay progreso en el país en esta materia, ignorando lo anterior a 2003, que era un desastre.

Tantos años, tantos años una Fuerza Pública sin motivación y sin dirección. Unos grupos terroristas en avance, unos grupos terroristas que no habían sido debidamente confrontados.

Un país que ha sufrido tanto guerrilla y paramilitares no puede permitir la desmotivación de la Fuerza Pública. Los policías y soldados de la Patria son finalmente nuestra protección institucional.

Presidente pide a Defensor del Pueblo tramitar denuncias de indígenas sobre violación de DD.HH ante la Fiscalía

Le pido al Defensor del Pueblo, respetuosamente, porque es autoridad independiente, que las denuncias sobre violación de derechos humanos que se han presentado hoy, aquí, se tramiten ante la Fiscalía (General de la Nación).

Y le pido a mi general (Oscar) Naranjo que trasmita al Ministerio de Defensa que se adelante la investigación administrativa de estas denuncias, en un Gobierno que nunca le ha temblado la mano para tomar las más drásticas medidas en materia de protección de los derechos humanos”.