de la comunidad, para lo cual necesita eficiencia, transparencia, eficacia, es muy importante dar ejemplo desde la Presidencia de la República.
Muchas gracias al Icontec, por todo este esfuerzo de certificación de entidades de Gobierno.
Y quiero, apreciados compañeros de la Presidencia, felicitarlos de corazón a ustedes. Es motivo de orgullo. La verdad es que una de las menores preocupaciones siempre es por la propia casa, por la Presidencia. Uno vive tan presionado y tan angustiado por los problemas de afuera, que pocas veces piensa en los problemas de la Presidencia.
Hemos tenido sí obsesiones, para que haya una Presidencia con una gran promoción del talento humano, con un gran sentido de austeridad, con un gran sentido de sobriedad y con una gran disposición frente a los colombianos, que los colombianos encuentren en la Presidencia un ejemplo de disposición de servicio para todo el Estado.
Si los colombianos encuentran una Presidencia aperezada, una Presidencia no reactiva, una Presidencia sin iniciativa, pues los colombianos van a decir: ‘si esto ocurre en la Presidencia, ¿qué será de las otras entidades del Estado?’.
La promoción del talento humano. Me alegra mucho los esfuerzos que ustedes están haciendo, y es bueno este balance que el doctor Bernardo Moreno acaba de registrar.
En estos seis años, por supuesto, hemos disminuido la nómina, y cuando consolidamos esto con todo lo de los contratos que había y que se suprimieron para llegar a la fusión que hoy se da en cabeza de Acción Social, pues el ahorro es bastante significativo.
A destacar hoy que ha habido aquí un gran respeto dentro de la idea de promoción del talento humano, a una carrera administrativa al interior de la Presidencia, para garantizar antigüedad con motivación. Que no haya antigüedad con desmotivación, sino antigüedad con motivación, y uno de los elementos para garantizar la motivación, dentro de la antigüedad, es la posibilidad de la promoción. En eso tenemos que hacer todo el énfasis.
Tenemos que seguir haciendo todo el énfasis para estar en la vanguardia de la conectividad.
Ojalá pudiéramos, rápidamente, tener los mejores esquemas de conectividad con todos los ministerios y con las principales entidades del Estado. Ojalá pudiéramos, rápidamente, hacer Consejos de Ministros virtuales.
La verdad es que con el sistema ese, como el mensajero del Blackberry, el tiempo que se ahorra es mucho.
Una de mis vocaciones es responder las llamadas, y responderle la llamada a todos los ministros, de inmediato, que no puedan decir: ‘con Uribe era difícil hablar’. Pero hay días que se me pasa.
Por ejemplo, ayer estaba muy preocupado porque me había hecho la Ministra de Educación una llamada a las siete de la mañana, y solo se la pude responder alrededor de las dos de la tarde, mientras tomaba un avión para irme a Medellín.
El aparatito ese del mensajero, del Blackberry, es bien útil, bien útil. Yo les rogaría, perfeccionemos sistemas como éste, a ver si podemos tener en todo el Gobierno la comunicación más eficiente.
Yo todavía por ejemplo no tengo esa comunicación con algunos de los ministros. Y con quienes la tengo, las cosas fluyen más rápidamente.
Una de esas cosas que para los niños de ahora son elementales, para uno es un paso enorme. Por ejemplo, en el Blackberry redactar un mensaje antes de enviarlo, invitar al uno y al otro y al otro, para que ese mensaje llegue al grupo, eso es bien importante.
Todavía a eso le falta desarrollo, porque todavía para un grupo grande, si fuera de 15 personas, entonces tiene que invitar uno a cada uno de los 15 individualmente. Yo necesito aprender a descubrir cómo se maneja poder vincular los 15 de una vez.
Avancemos en eso, porque siempre hay que pensar hacia delante. Yo creo que eso ayuda enormemente, enormemente.
Qué bueno escuchar al doctor Bernardo registrar que ha avanzado mucho el tema de controles de gastos, el tema de administración e vehículos, el tema de mantenimiento de vehículos, el tema de suministro de combustible. Y donde tengamos una falla, corrijámosla.
La norma del Gobierno tiene que ser que el mismo Gobierno vaya adelante, para detectar y corregir fallas. No necesitar que nos tengan que criticar desde afuera, que nosotros mantengamos una actitud de autovigilancia, de autocrítica, para que allí donde haya una falla, nosotros tomemos la iniciativa para resolverla.
Qué bueno que se haya avanzado en el mantenimiento, administración, control de los vehículos y en el control del combustible. Eso es bien importante.
¿Qué tal que no lo hubiéramos hecho?, ¿cuánto significaría el costo del combustible?, cuando en estos años de nuestro Gobierno el precio interno del combustible ha pasado de un equivalente a 22 dólares el barril de petróleo, hoy el precio aquí interno del combustible equivale a 70 dólares el barril de petróleo y el precio de la gasolina, y el precio interno del diesel a 60 dólares.
Qué tal que ese salto que hemos dado no hubiera estado acompañado de un gran proceso de control y de austeridad. Quiero llamar la atención sobre eso.
Y es muy importante tener estas sedes bien tenidas. Yo particularmente tengo la preocupación de ir a estas sedes, más por darme cuenta que estén bien tenidas y que no se las vamos a dejar en mal estado a quienes habrán de sucedernos, que por gozarlas.
La gran preocupación mía en Hatogrande es ver que hubieran cambiado ese techo que estaba que se caía, allá en la parte de la cocina. Una inversión bien necesaria. Y aprovechando el clima, para que no se vuelva a podrir la madera y poder tener la belleza de la teja de barro vieja, esa teja añeja allí tan bella, entonces hicieron una cosa muy inteligente, que le pusieron entre el cielorraso de la madera, que es muy bonito y la teja de barro, le pusieron una especie de Eternit de por medio.
Me parece que es bien importante lo que se han hecho en la Casa de Huéspedes, y hay que revisar que lo completemos todo, porque tuvimos que enfrentar un problema de que el mar la estaba erosionando. Entonces ustedes le han hecho una especie de corona de piedra para defenderla de la erosión del mar. Hay que seguir mirando para que la dejemos totalmente defendida. Yy también las reparaciones allá, en esa casita del tesoro.
O sea que para tener esto como una tasita de plata, y que el pueblo colombiano este tranquilo por la administración de todos estos inmuebles, y poder salir nosotros de aquí tranquilos de que los hemos administrados bien, con gran sentido de responsabilidad, de patriotismo y que los encontramos en muy buen estado.
Quiero saludarlos a ustedes con mucho afecto. Paradójicamente yo creo que a los compañeros de todo el Gobierno que menos saludo es a los de la Presidencia. Uno está con ustedes más cerca y finalmente más lejos, porque lo que más presiona son los problemas externos. Pero quiero saludarlos de corazón, agradecerles mucho este esfuerzo, que es de todos ustedes.
Ustedes le entregan hoy al país alguna cosa que a muchos va a sorprender: una Presidencia de la República con unos certificados de calidad. Yo creo que muchos colombianos no esperarían eso. Y esa es una tarea de ustedes, ahora lo importante es sostener esos certificados de calidad.
Los invito a que sigan haciéndolo. No olviden: continuidad sin desmotivación, permanencia de la ciudadanía, de los funcionarios, sin desmotivación.
Hay que combinar eso: que permanezcan, pero todos los días motivados, para innovar todos los días; que todos nos demos cuenta, como decía una poetiza de mí tierra: “en cada nueva hora el alma se renueva”.
Así hay que amanecer en el Gobierno, con el alma renovada en cada nueva hora, al amanecer de cada nuevo día, para no estacarse uno. En este país ninguno de nosotros puede estancarse en su visión de Gobierno, porque esta es una Patria con muchas, muchas necesidades.
Avancemos en esa cosa de conectividad, sigamos avanzado en controles, en políticas de austeridad. Muy bien lo de los vehículos, lo de los combustibles, todo lo que se pueda hacer en eso. Y mantengamos ese esmero riguroso, ese esmero riguroso para tener bien, darle buen mantenimiento a estas sedes.
Cuando yo encuentro a algunos visitantes aquí, les digo: ‘entren, que esta casa es de Antonio Nariño y de ustedes’.
Cuando algunos va a Hato Grande, cuando fue el Presidente Lula, allá, le dije: ‘Siga Presidente, que esta casa es del General Santander y suya’.
En la Casa de Huéspedes les digo: ‘esta casa es del Presidente Turbay, Salmona y de ustedes’.
En la isla del Tesoro les digo: ‘esta casa es de Parques Nacionales y de ustedes’.
Esto es de todos los colombianos, tengamos esto, mantengamos esto como una joyita de todos los colombianos.
Los felicito de corazón, de verdad de corazón. Me emociona mucho. Y uno que es tan inexpresivo con ustedes, déjenme decirles hoy, desde el fondo del corazón, muchas, muchas gracias, porque no es fácil conseguirse un certificado de calidad para la Presidencia de la República.
Muchas gracias”. |
