En una declaración, el Ministro Fabio Valencia Cossio destacó hoy la legitimidad del Congreso para hacer cambios a los referendos y recordó que la propia Corte Constitucional le ha reconocido al Legislativo la “libertad configurativa” para expedir las leyes y reformar la Carta Política.

Bogotá, 23 abr (SP). El Ministro del Interior y de Justicia, Fabio Valencia Cossio, destacó hoy la legitimidad del Congreso para hacer cambios a los referendos y recordó que la propia Corte Constitucional le ha reconocido al poder Legislativo la “libertad configurativa” para expedir las leyes y reformar la Carta Política.

Además, convocó a todos los colombianos para que ofrezcan su concurso en el propósito de “purificar la costumbres políticas”.

Tras la aprobación que le dio la Comisión Primera de la Cámara de Representantes a los referendos del Agua y de Prisión Perpetua para los violadores de menores, y al Acto Legislativo para la Reforma Política, el Ministro Valencia Cossio expidió la siguiente declaración:

Declaración del Ministro del Interior y de Justicia

El Presidente de la República y su Gobierno, en su esfuerzo por hacer prevalecer el equilibrio entre la Democracia Participativa y la Democracia Representativa, acompañó a las bancadas de la coalición que lo apoyan, en el trámite de los referendos del Agua y de la Prisión Perpetua contra los violadores de menores, aprobados en su primer debate por la Comisión Primera de la Cámara de Representantes, atendiendo a la voluntad de millones de colombianos.

Las modificaciones introducidas a los textos de ambos referendos fueron hechas dentro de la “libertad configurativa” que la Corte Constitucional le ha reconocido al Congreso, sin que se hubiesen incluido materias nuevas.

Afirmar que el Congreso no puede hacer dichas modificaciones es condenarlo a ser un convidado de piedra, pues bastaría con reunir las firmas suficientes para que el Registrador convocara los referendos. Si la Constitución hubiese querido limitar las posibilidades para la introducción de cambios a los referendos por parte de Congreso, lo hubiera hecho explícitamente. Por ello, que no quepa duda alguna de la legitimidad de esos cambios.

Una vez agotados los trámites para la aprobación de los referendos del Agua y de la Prisión Perpetua para violadores de menores en su primer debate, corresponde al Congreso otra misión histórica, la de depurarse a si mismo, desterrando de la política colombiana la influencia perversa de los grupos armados ilegales y de la delincuencia organizada, a través de la Reforma Política.

El Gobierno Nacional solo tiene un inamovible en este proyecto: la sanción sin contemplaciones a los partidos políticos y a los miembros de estos, cuando traspasen la línea de la Ley y la Constitución, por la influencia de los grupos terroristas y criminales.

Algunas organizaciones políticas, usando términos desobligantes y argumentos injustos e infundados, quieren presentar la Reforma Política como un instrumento para desconocer la voluntad popular en la próxima jornada electoral. Frente a ello, el Gobierno Nacional rechaza con firmeza cualquier señalamiento, reafirmando su respeto a la Constitución y la Ley.

En la purificación de las costumbres políticas se necesita el concurso de todos los colombianos. Cualquiera sea el marco legal vigente, nunca será suficiente si quienes eligen y son elegidos no asumen como una obligación moral el rechazo a la corrupción y al delito.