Agosto 21

   

Palabras del Presidente Uribe en la inauguración de edificio de Artes y Ciencias de la Universidad de Caldas

Manizales, 21 ago (SP). “Muchas felicitaciones a la Universidad de Caldas por este gran logro.

Da mucho gusto ver este entusiasmo en la universidad pública. Yo creo que el país ha dado un buen salto en eso.

Recordábamos esta mañana en la Universidad Autónoma de Manizales cómo durante muchos años existió ese agrio debate contra la universidad privada. Y lo que me preocupaba a mi es que la universidad pública estimulaba el debate, pero no hacía nada por mejorar.

Y vemos un buen resultado en estos últimos años. Vemos que el debate se ha superado. Hoy el país entiende, en una amplísima mayoría, que requerimos de ambas y se nota un gran entusiasmo por la eficiencia en la universidad pública.

La universidad pública ha entendido que solamente puede cumplir su misión social si es eficiente, que tiene que trabajar con gran imaginación, con gran austeridad de recursos, con gran integración con la comunidad.

Da mucho gusto que, cuando existía esa gran desconfianza del país productivo con la universidad pública y ese aislamiento de la universidad pública frente al país productivo, avancemos hoy en esta integración.

Constatar cifras que tiene la Universidad de Caldas de ingresos por los servicios que le presta a la Agencia Nacional de Hidrocarburos y a muchas entidades del sector productivo. Ahí se plasma la necesidad de una universidad integrada a la sociedad.

Cuando hablábamos hace algunos años de que las universidades públicas deberían aumentar, dentro de su estructura de ingresos, el porcentaje de ingresos provenientes de venta de servicios, inicialmente hubo una reacción muy negativa porque se pensó que íbamos a…. ¿Quieres decir algo? Allá atrás, dilo. Préstenle el micrófono.

(Habla estudiante de la Universidad de Caldas)

La niña que me dice allí ‘vendepatria’ tiene la palabra. Lo único que rogaría es…¿Cuántos minutos necesitas? Te escuchamos los dos minutos.

(Habla estudiante)

Cuando ustedes interrumpieron, me estaba refiriendo yo a los esfuerzos de la universidad pública por ser eficiente. Hago un paréntesis ahí para realizar unos comentarios sobre las dos intervenciones y después volveré al hilo que tenía para mi intervención.

Universidad crítica pero no violenta

Yo creo que la universidad tiene que ser masiva, las cifras de este Gobierno lo demuestran, científica, de acceso popular, crítica, pero no violenta.

Este Gobierno da todas las garantías para que la universidad sea masiva, crítica, científica, sea libre, pero también exige que no sea violenta. Jamás entraremos a la universidad para afectar la libertad de cátedra, pero mientras yo sea Presidente, la Policía estará en la universidad para evitar el vandalismo. Y eso se los quiero decir con mucha claridad.

Y a mi no me gusta mandar razones. A mí me enseñaron que el liderazgo se tiene que ejercer diciendo el mismo discurso en todas partes. Qué bueno, en los propios predios de la universidad pública, ante la intervención de los dos estudiantes, reiterar esto.

Siempre ustedes pueden ejercer el derecho a la libertad científica, a la libertad de cátedra, pero los colombianos, a través de la Fuerza Pública, exigiremos el cumplimiento del derecho de que la universidad no sea violenta.

Y allí donde haya violencia en la universidad, mientras yo sea Presidente, allí llegará la Fuerza Pública y eso no está en discusión. Y no tienen que asumir la responsabilidad gobernadores, alcaldes, rectores; yo la he asumido y los comandantes de policía saben que bajo mi exclusiva responsabilidad, donde haya violencia tienen que entrar.

La Patria no tiene un milímetro sustraído de la presencia de la Fuerza Pública, como tampoco tiene un milímetro sustraído de la obligación de los Derechos humanos. Como tampoco tiene un milímetro entregado a la negación de soberanía de los violentos. Que eso quede muy claro.

Avanzaremos en el acuerdo contra el narcotráfico, el terrorismo, con los Estados Unidos y con todos los países que nos puedan colaborar en esta materia, sin vacilaciones.

Defensa de reforma al Estado

Este Gobierno ha reformado 430 entidades del Estado y en todas las entidades reformadas ha derrotado politiquería, clientelismo. Háganme el favor de mirar Telecom, el mayor valor de Ecopetrol, lo que se ha hecho en las clínicas del Seguro Social y en muchísimos hospitales, en muchas universidades.

Recuerdo el debate que me propusieron en el Atlántico: que yo iba a cerrar la universidad pública, que íbamos a acabar con la Universidad del Atlántico. Lo que hicimos fue rescatarla de la quiebra. El desgreño y la corrupción la habían conducido a la quiebra. No era el Gobierno, era la corrupción en materia de pensiones, era el exceso de costos administrativos y el tiempo nos está dando la razón, hoy está en plena recuperación la Universidad del Atlántico.

Hemos ayudado en casi todas las universidades públicas para poder garantizar el pago de pensiones y lo seguiremos haciendo. Yo se que aquí se llegará a la decisión de cómo se va a compartir la carga pensional.

Este Gobierno introdujo el concurso de notarios, se ha aplicado y es el Gobierno que más ha avanzado en la carrera administrativa de la Cancillería.

Cuando se nombraron unas personas que eran parientes de parlamentarios y que estaban comprometidos con nuestra Política de Seguridad para defenderla afuera, yo después le dije a la opinión pública que enmendábamos ese camino. Que no se nombrarían parientes de parlamentarios a no ser que tuvieran su propio peso, sus propios merecimientos.

El derecho que si he ejercido es el de nombrar personas en la Cancillería que nos le dé miedo defender la política de Seguridad de Colombia. Porque durante muchos años se impuso la diplomacia paralela del terrorismo, ellos eran los que más vociferaban, distorsionando la imagen de Colombia en el extranjero.

Los temas de mi familia no, no me refiero a ellos. En mi familia todos son ciudadanos que están en el país, que obran de frente, que asumen todas las responsabilidades y que no tienen testaferros.

Volvamos al tema que nos ocupaba.

Más cobertura de la educación

Entonces veamos qué ha pasado con algunas cifras de educación superior en Colombia.

Cuando nuestro Gobierno empezó, antes de que empezara el segundo semestre de 2002, Colombia tenía menos de un millón de estudiantes universitarios sin contabilizar los 250 mil nuevos cupos, de técnicas y tecnologías que están en proceso en el Sena.

Apenas haciendo la contabilidad del primer semestre de 2009, Colombia tiene un millón 570 mil 447. Yo creo que es un gran avance en estos años.

Cuando nuestro Gobierno empezó, Colombia tenía una cobertura universitaria del 22, 24 por ciento. Hoy es del 35 y medio (por ciento). Yo creo que eso es importante mirarlo.

Cuando nuestro Gobierno empezó la universidad pública colombiana tenía 416 mil 722 estudiantes. Hoy, sin contar los 250 mil nuevos cupos del Sena, la universidad pública tiene 876 mil 089 estudiantes.

Este país ha hecho un gran avance. Una cosa es un Gobierno que en el mejor diálogo, sin determinar la elección de los rectores, exigiendo severamente que no haya violencia y en el mejor diálogo, ha incidido mucho para el ánimo de la universidad pública, para su eficiencia, para su austeridad, para que la universidad pública todos los días se vincule más a la comunidad; para que la universidad pública tenga mayor participación de lo que es la prestación de servicios a la comunidad como fuente de su presupuesto.

Eso lo ha hecho este Gobierno y creo que eso ha salido bien para la universidad Pública. Ejemplo, esta Universidad de Caldas.

Con el anterior Rector, doctor (Bernardo) Rivera, aquí presente, yo quiero recordar exactamente, -varios de los aquí presentes estaban esa reunión, yo creo que fue en un Consejo Comunitario allí en el Centro del Pensamiento- se habló de la necesidad de este edificio.

Con el liderazgo de Luis Alfonso Hoyos (actual Embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos, OEA) se tomó la decisión, que con la liquidación de los recursos del Forec (Fondo para la Reconstrucción y Desarrollo Social del Eje Cafetero) se haría un aporte, y los felicito por las otras fuentes. Por la estampilla, por los esfuerzos propios, etcétera.

El aporte del Gobierno no se puede medir solamente en el dinero que aparece en el Presupuesto Nacional año tras año. Hay que medirlo también sumándole los convenios con Colciencias, entidad que se acaba de reformar para el bien de Colombia. Y acuerdos con entidades estatales, como la Agencia Nacional de Hidrocarburos, que bastante le ayudan a la universidad.

Vamos a mirar el tema que ha pedido el Rector (de la Universidad de Caldas, Ricardo Gómez Giraldo), ese contrato con el Ministerio de Defensa.

Ahora, como no es un Gobierno que ha trabajado una chequera gruesa -hemos trabajado con escasez crítica de recursos-, en las diferentes reuniones con los rectores, yo sería un irresponsable si les dijera, sí aumenten la base, sí tomen esa plata, aquella.

Es que a nosotros nos ha tocado muy difícil con esta situación de recursos, pero siempre hemos buscado alternativas.

Ahora me contó, que aquel edificio del frente, emprenden la reforma, que les vale 7 mil millones de pesos y que ya tiene 4 mil (millones). Que no le regala el Gobierno Nacional, pero se los presta con un subsidio a la tasa de interés.

Cuando no es posible que a uno le regalen las cosas, por lo menos que le den una madeja de trabajo. Y yo creo que ese subsidio de tasa de interés es una madeja de trabajo. ¿Quién paga ese subsidio? Lo paga el Presupuesto Nacional.

Y quiero decirles a los dos estudiantes que obras son amores y no buenas razones.

Este país tenía en el Icetex 60 mil estudiantes financiados; hoy tiene más de 250 mil. Y yo creo que hemos superado unos problemas muy graves.

Certificaciones de calidad y pruebas

Por ejemplo nos decían, ‘como ustedes van a masificar la educación, se les va a caer la calidad’ No ha ocurrido. Pasamos de 420, 430 mil bachilleres graduados por año a 660 mil. Una masificación en favor de los sectores más vulnerables, y no se cumplió la predicción de los científicos: se les va a caer la calidad por el salto hacia la cobertura universal. Y además está aumentando la calidad.

Este país, después de México en el continente, es el segundo en exponer sus estudiantes a pruebas internacionales de calidad y el segundo después de México en cantidad de pruebas domésticas.

Sería muy bueno que ustedes miraran cuáles eran las pruebas domésticas en Colombia y cuáles son hoy las pruebas domésticas.

Nosotros teníamos el Icfes, hoy tenemos, reevaluación de profesores, las pruebas Saber, el concurso de maestros, las pruebas a los egresados universitarios, que se llama el Ecaes.

Tenemos el observatorio laboral de los egresados universitarios, y tenemos algo bien importante, las certificaciones.

Hablemos de tres certificaciones: la certificación básica, que se llama certificado de calidad; el registro calificado, que en esta universidad está en todos los programas. Enseguida la certificación de excelencia, de calidad institucional. Esta universidad la tiene.

¿Cuántas en Colombia tienen la certificación institucional? 16. Esta es una de las universidades que tiene esa certificación de calidad institucional.

¿Cuántos programas certificables esta universidad y cuántos tiene ya certificados con la certificación de alta calidad? 13 programas de 23. Y esa certificación no la hace Zaratustra ni la hago yo, la hacen las autoridades independientes y especializadas. O sea que eso es creíble.

Mire, sabe ¿por qué iba a la universidad pública? Además, yo me formé en la universidad pública y no me formé en una universidad pública mansitica. A mi me tocó todo ese lío de los 70. Eso ayudo mucho porque, a muchos los frustró: uno, dos, tres años de huelga. Una frustración para padres de familia y estudiantes.

Sustituyeron -que es lo que uno no quiere que ocurra ahora- la libertad de cátedra por la imposición de unos dogmas, que ojala no vuelva a ocurrir en Colombia.

A otros los formó. A mi me templó mucho en el combate. Yo no lo desconozco y eso sí que es bueno para un país que ha vivido tanta, tanta violencia.

Dialéctica en las ideas y rechazo a la violencia

Miren, apreciados estudiantes. Este país terminó la Guerra de los Mil días, por allá a finales del año 1902. Hubo tres actos para culminarla: uno en Chinácota, en Norte de Santander, allá estaba el señor general (Ramón) González Valencia. Otro en el buque Wisconsin en Panamá, allá estaba el general Benjamin Herrera. Y otro en una finca del Magdalena, Neerlandia, allá estaba el general Rafael Uribe Uribe.

Y dijo el general Rafael Uribe Uribe: ‘Hoy he renunciado a las armas de la guerra pero jamás renunciare a ser un revolucionario con las ideas’.

Por eso cada mañana toco la diana, paso revista de las ideas que he venido profesando, doy de baja aquellas que considero inútiles o obsoletas y las sustituyo por otras mas fuertes y robustas.

Nuestros padres y nosotros mismos nos equivocamos pensando que hacíamos Patria con los fusiles destructores. Hoy sabemos que solamente podemos hacer Patria con las herramientas fecundas del trabajo. Hay que tener dialéctica en las ideas pero total rechazo a la violencia.

¿Qué le han dicho de mi? Que paramilitar, que mafioso, que fachista, que de derecha, que el del Esmad (Escuadrón Móvil Antidisturbios). Gobierno que ha desmontado el paramilitarismo.

Ahora, volvamos a 1902. El país quedó destruido. Al año siguiente se separó Panamá y la historia no ha sido todavía suficientemente severa para decir por qué dejamos que se fuera lo que era la cabeza del país.

Cartagena en esta época no tenía sino la ciudad amurallada, Medellín tres chimeneas. Bogotá, La Candelaria.

Perdimos, perdimos lo que era la cabeza del momento y el país entró en un periodo de estancamiento, muy pobre quedó el país y hubo relativa paz hasta principio de los años 1940. De allá para acá no ha habido un día de paz. ¿Por qué no vamos a derrotar los violentos? Lo tenemos que hacer. Eso no deja que este país prospere.

Baja la deserción

Ahora, lo que es importante es que en este Gobierno la Seguridad Democrática ha estado acompañada de la Política Social. Yo creo que estas cifras indican claramente que a medida que hemos avanzado en seguridad hemos avanzado enormemente en un tema social de tanta importancia como es el tema educativo.

Miren, un temor que nos alberga desde septiembre del año pasado es que las ganancias en disminución de deserción universitaria se fueran a perder por la crisis económica. Hay crisis económica e inmediatamente se aumentan las cifras de deserción.

Esta mañana en la Universidad Autónoma (de Manizales) veíamos que la deserción les ha bajado del 17 al 12 (por ciento). Esta Universidad -me lo confirma el rector- tiene una deserción de un año a otro del 6. Empieza a ser muy baja. Y acumulada, en todo el periodo de formación, del 24 frente a un país que tenia una deserción del 50.

Yo creo que poder decir que se haya disminuido la deserción y que no se ha vuelto a aumentar la deserción en la crisis económica he mostrado un resultado bien importante de Colombia a pesar de todo lo que falta.

Ahora, lo que dice el Gobernador (de Caldas, Mario Aristizábal), hay que hacer renovados esfuerzos, todos los días, para superar la pobreza. Pero miren les cuento algunas cositas.

Hoy todos los municipios de Caldas como todos los Municipios de Colombia reciben los recursos de gratuidad de la educación incorporados por el Congreso en la ultima reforma.

Este año más de 5 millones de estudiantes se beneficien de los recursos de gratuidad de educación. Nosotros teníamos en los programas de Bienestar Familiar 5 millones de beneficiarios; hoy hay 12 millones de beneficiarios.

Se entregan 14 millones de porciones alimentarias al día. Tenemos un país de 46 millones de habitantes 2 millones 740 mil Familias en Acción; en un departamento de 1 millón de habitantes, 37 mil Familias en Acción.

Caldas, por ejemplo, en el tema de régimen subsidiado de salud ha pasado de una cobertura…Hombre, general, qué tristeza da que no hubieran entrado, tan conveniente haberlos escuchado aquí (estudiantes afuera del salón).

No eso está muy bien, pero mire. No le voy a hacer sino un reclamito sentido. Yo los invité y los mandé invitar a que entraran y que dijeran todo aquí con la libertad con que lo dijo su compañera y con que lo dijo otros de sus compañeros que han ejercido su libertad.

Yo también he refutado y creo que lo he hecho con todo el respeto personal porque me ata mucho a algo que dije esta mañana en Bogotá en la sede de la CTC (Confederación de Trabajadores de Colombia) ante el cadáver de Apecides Alvis (Presidente).

(Alvis) fue decente en el desacuerdo y eso sí que lo necesitamos y yo tengo que ser muy cuidadoso. No podría haber dicho eso a las 7:00 de la mañana y ser aquí indecente en la refutación a los dos estudiantes que han hablado.

Me duele que aquellos muchachos que se invitaron a que entraran aquí y que les habría dado la palabra y los habríamos escuchado con todo respeto, prefieran quedarse allá gritando. Bueno, llévenle ese mensajito: díganles que estoy dispuesto a volver a Manizales a un debate con ellos y que tienen toda la garantía del pleno respeto.

Cuando empezamos, este departamento tenia 252 mil personas afiliadas al régimen subsidiado de salud; hoy tiene 548 mil. Y se ha hecho un gran esfuerzo en restructuración hospitalaria. Este Gobierno no ha cerrado hospitales, los ha reestructurado.

Reforma del Estado sin desmantelarlo

Es que miren, es bueno mirar -cuando usted hacía la mención de Zaratustra sobre el Estado, usted lo leían como Estado comunitario-, es bueno mirar el papel del Estado. Este Gobierno no ha entrado ni en el programa de eliminación del Estado ni en el programa del sistema del fortalecimiento del social burocratismo.

America Latina en unas épocas estuvo en el desmantelamiento del Estado, nosotros no estamos en eso. Lo que si hemos hecho es reformarlo. El neoliberalismo y la social burocracia han coincidido los dos en eliminar el Estado. El neoliberalismo lo ha anulado por decreto y el social burocratismo lo ha eliminado porque lo ha quebrado.

Los unos cerraron los hospitales por decreto y los otros hicieron cerrar los hospitales porque los llevaron a la quiebra.

Este Gobierno lo que ha hecho es reestructurar 200 hospitales. Faltan muchos, que no son nacionales, que son departamentales y municipales. 17 en Caldas me confirma el señor Gobernador. Yo creo que ese es un balance respetable que muestra el compromiso del Gobierno con la política social. Responsable, serio. En lugar de cerrar esos hospitales, los reestructuramos.

Si usted mira el tema de Bienestar Familiar y el Sena. El Sena en Caldas en 2002 atendía a 28.737 personas; en 2008, 200 mil. Pasar de 28 mil a 200 mil es un salto muy grande. Reconocemos todo lo que falta.

Vamos a llegar a diciembre con un millón de colombianos estudiando ingles a través de Internet, gracias al Sena. Y como la mayor parte de la transmisión hoy es satelital desde San Andrés, se ha contratado la instalación de un cable submarino.

El Instituto colombiano de Bienestar Familiar atendía en Caldas a 138 mil personas, el año pasado 299 mil.

Ahora, uno reconoce problemas, por ejemplo nosotros tenemos que hablar con el Comité Nacional de Cafeteros con la Federación a ver cómo se acelera de renovación en el oriente de Caldas.

La zona cafetera, contra lo que predecía el país, contra lo que predijo el país, se nos empobreció mucho. Por eso el programa de renovación cafetero. Estamos invirtiendo una suma considerable del presupuesto, año tras año, para ayudar a renovar año tras año 60, 80, 90 mil hectáreas.

Y yo creo que nos toca en un próximo Consejo Comunitario examinar con rigor qué está pasando con la renovación cafetera en los municipios más pobres de Caldas. Porque la renovación cafetera es un programa de gran importancia para recuperar nivel de ingresos en la zona cafetera.

Me dice el señor Gobernador que la Gobernación también se ha vinculado a apoyarlo”.
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