“Cada vez que un ciudadano de un país industrializado consume cocaína está matando un ‘pulmón’ de la humanidad, que es nuestra selva amazónica. Cada vez que un ciudadano de un país industrializado consume narcóticos está produciendo derramamientos de sangre en un país como Colombia. El derramamiento de sangre que se causa por el asesinato de un ciudadano y el derramamiento de sangre que se causa por el empobrecimiento de un pueblo que ve destruir su medio ambiente”, subrayó el Mandatario.
Copenhague, Dinamarca, 18 dic (SP). El Presidente Álvaro Uribe Vélez pidió a los países participantes en la Cumbre sobre Cambio Climático, que se realizó en Copenhague (Dinamarca), fortalecer su compromiso contra la producción, consumo y tráfico de narcóticos.
“El narcotráfico ha destruido más de 2 millones de hectáreas de nuestra selva. El narcotráfico destruye la selva, empieza a introducir desequilibrios ambientales. Pedimos un gran compromiso de todos contra la producción, el comercio y el consumo”, indicó el Mandatario este viernes, al intervenir, entre 15 líderes del mundo, en las deliberaciones previas al documento final del encuentro multilateral.
El Mandatario colombiano fue uno de los 15 Jefes de Estado y de Gobierno seleccionados para participar este viernes durante las reuniones de alto nivel, el último día de la XV Cumbre de las Naciones Unidas para el Cambio Climático.
El Jefe de Estado enfatizó que “el narcotráfico es asesino del ser humano en todas las formas, porque asesina a la persona y también asesina al medio ambiente”.
“Cada vez que un ciudadano de un país industrializado consume cocaína está matando un ‘pulmón’ de la humanidad, que es nuestra selva amazónica. Cada vez que un ciudadano de un país industrializado consume narcóticos está produciendo derramamientos de sangre en un país como Colombia. El derramamiento de sangre que se causa por el asesinato de un ciudadano y el derramamiento de sangre que se causa por el empobrecimiento de un pueblo que ve destruir su medio ambiente”, señaló.
Recalcó, igualmente, que es necesario entender que el narcotráfico es un factor de la deforestación, del cambio climático, del desorden ambiental y de la pobreza.
“Cuando viene la utilización de los precursores químicos para transformar las hojas de coca en cocaína, entonces se contamina el suelo, los pequeños ríos, los grandes ríos; se asesina la fauna; se asesina la flora y finalmente el negocio criminal asesina al ser humano”, enfatizó.
Así mismo, subrayó que Colombia es un país que ha hecho el mayor esfuerzo, con recursos propios, para retirar a 90 mil familias rurales de la actividad de la siembra de narcóticos, y que hoy se encuentran incluidas en el programa Familias Guardabosques.
“Antes destruían la selva para sembrar narcóticos. Ahora cuidan la selva, están supervisados por Naciones Unidas, se comprometen a mantener las áreas libres de drogas ilícitas, y con el presupuesto escaso del Gobierno colombiano se les da alguna remuneración”, puntualizó. |