El Gobierno de Colombia, con ocasión del comunicado publicado el pasado 9 de febrero por los relatores para la libertad de expresión de la ONU y la OEA, manifiesta:
1. Sorprende la rapidez con la cual se expide un comunicado rechazando las declaraciones del Gobierno, sin hacer referencia a elementos objetivos que generan serias dudas sobre el proceder profesional del periodista Hollman Morris.
2. En ningún lugar del comunicado expedido los relatores hacen referencia a las condiciones de sometimiento e indefensión en las que se encontraban los secuestrados mientras se realizaba el reportaje. No se puede ignorar una situación en la que se atenta contra el derecho a la vida, a la libertad y a la libertad de expresión.
3. El Gobierno pedirá a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos la regulación de las medidas cautelares del periodista Hollman Morris, para ajustarlas al deber de protección consagrado por la Corte Constitucional. El señor Morris, a pesar de alegar riesgo extraordinario para su vida, se sometió a riesgo extremo, sin informar al Estado, del cual demanda protección.
4. La Policía de Colombia puso en conocimiento de la Fiscalía General de la Nación las declaraciones de los uniformados liberados, quienes señalaron públicamente manipulación y presión por parte del grupo terrorista de las Farc, para que fueran entrevistados por el periodista Morris. Corresponde a la Fiscalía investigar y definir las eventuales responsabilidades.
Bogotá, 11 de febrero de 2009 |