De los 300 beneficiarios, 25 corresponden a personas desmovilizadas con discapacidad cognitiva o física y como parte de uno de los proyectos, 37 mujeres victimas de los grupos armados ilegales reciben formación técnica como secretarias ejecutivas.
Bogotá, 13 jul (SP). Cuatro proyectos de capacitación laboral que benefician a 300 participantes del proceso de reintegración de Medellín en formación técnica y tecnológica se desarrollan actualmente gracias a la coordinación entre la Alta Consejería para la Reintegración (ACR), el Programa de Paz y Reconciliación de la Alcaldía de la ciudad, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Con una inversión de 630 millones de pesos y tras seis meses de capacitación, los participantes habrán adquirido las competencias para insertarse en el mercado laboral, en el caso de los emprendedores, para crear y fortalecer iniciativas productivas.
Una vez finalizado el ciclo de capacitaciones, los beneficiarios serán referenciados laboralmente entre las empresas de la ciudad y, en algunos casos, por las instituciones formadoras ya identificadas por la ACR.
Estas personas reciben capacitación como técnicos en mecánica de motos y automotriz diesel; auxiliares de panadería y pastelería; técnicos en diseño grafico; asistentes de gerencia ventas y mercadeo; ayudantes de corte y manipulación de carne; ayudantes de mesa y bar; y auxiliares de servicios generales de hospitales.
“En el Gobierno Nacional creemos que las personas que abandonan las armas necesitan reconstruir sus relaciones familiares, conocer, asumir y ejercer sus derechos y deberes, aprender a resolver conflictos de manera no violenta y desarrollar competencias que les permitan vivir con calidad dentro de la legalidad.
“Por eso y para que sean capaces de generar sus propios ingresos de manera autónoma, a través de la formación para el trabajo y los programas para la generación de ingresos, los desmovilizados adquieren habilidades laborales y sociales”, explicó el Alto Comisionado para la Paz y la Reintegración, Frank Pearl.
Para Carlos Álvarez, un beneficiario del proyecto que se capacita en mecánica automotriz diesel, lo mejor de esta iniciativa ha sido el cambio que le ha dado la vida. Para el joven, que espera montar su propio proyecto al finalizar la capacitación, se trata de “una oportunidad para no ser conformista y decidirse a salir adelante”.
De los 300 beneficiarios, 25 corresponden a personas desmovilizadas con discapacidad cognitiva o física y como parte de uno de los proyectos, 37 mujeres victimas de los grupos armados ilegales reciben formación técnica como secretarias ejecutivas. |
