Socha, Boyacá, 28 jul (SP). Una extensa caravana conformada por un centenar de vehículos y motos, así como cerca de 300 campesinos a caballo y en mula, acompañaron hoy a los jinetes de la Ruta Libertadora que, en su novena jornada, arribó a la población de Socha, distante 15 kilómetros de la vereda Quebradas, donde los binomios descansaron la noche anterior.

A su llegada al casco urbano, los caballistas fueron recibidos por más de mil sochanos que se encontraban reunidos en la plaza principal de la población, la cual estaba adornada con banderas de Colombia y de éste municipio boyacense.

Posteriormente, las autoridades locales presidieron una serie de actos culturales entre bailes, cantos, coplas y bandas marciales, en homenaje a los integrantes de la Ruta Libertadora, que hoy completan 142 kilómetros de recorrido siguiendo los pasos de la campaña independentista de 1819.

Así mismo, se evocaron los hechos por los cuales Socha es considerada histórica y culturalmente como la ‘Nodriza de la libertad’, ya que hace 190 años, todos sus habitantes fueron reunidos en la iglesia de la población, para despojarse de sus prendas y vestir al Ejército Patriota que sobrevivió el cruce del Páramo de Pisba.

Sin embargo, este suceso de gran importancia en la gesta libertadora se llevó a cabo a 3 kilómetros de aquí, en el llamado Sochaviejo, pues desde 1870 esta población, fundada en 1540 por indígenas Pirguas y Boches, tuvo que ser trasladada de lugar debido a constantes deslizamientos que ponían en riesgo la vida de sus habitantes.

Y fue precisamente allí, donde según el recuento popular, la joven Matilda Anabay, muy célebre en ésta población, le entregó al propio Simón Bolívar, su mejor traje, como símbolo de solidaridad con el Ejército Libertador. Igualmente, en ese sitio se conserva un pedazo del árbol donde, según los pobladores, el General Bolívar amarró su caballo el 6 de julio de 1819, luego de cruzar el Páramo de Pisba.

En la actualidad Socha es una población de 8000 habitantes, dedicada a la ganadería, la siembra de habas, arvejas y papa, y al comercio de bienes y servicios. Aquí descansarán los jinetes de la Ruta Libertadora por 24 horas, para después partir a la población de Tasco en un trayecto de 24 kilómetro.