El Ministro Óscar Iván Zuluaga explicó que al comparar el dato del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer trimestre de 2009, con el del cuarto trimestre del año pasado, la cifra tuvo una variación positiva en 0,2 por ciento, lo cual demuestra que no hay lugar a una recesión.

Bogotá, jun 25 (SP). Colombia no entró en recesión económica aseguró este jueves el Ministro de Hacienda y Crédito Público, Óscar Iván Zuluaga, al explicar el resultado del PIB durante el primer trimestre del año entregado por el Dane, que mostró una reducción del 0,6 por ciento en el indicador.

El Ministro Zuluaga fue enfático al asegurar que “técnicamente el país no está en recesión”, porque “la recesión se mide cuando dos trimestres tienen variación negativa, comparados con el periodo inmediatamente anterior”.

Dijo que al analizar los datos del crecimiento en Colombia se encuentra que el cuatro trimestre de 2008, que fue negativo en 1,5 por ciento, debe observarse contra la cifra positiva en el tercer trimestre del mismo año.

Así mismo, explicó que al enfrentar el comportamiento del PIB del primer trimestre de 2009 con el del cuarto trimestre del año pasado, la cifra tuvo una variación positiva en 0,2 por ciento, por lo cual no hay lugar para una recesión.

Sin embargo, consideró que la discusión no debe girar sobre si hay o no recesión, sino sobre la importancia de mantener el trabajo para lograr la meta de crecimiento para este año.

“El Gobierno considera que la discusión no es si hay una recesión técnica. Para el Gobierno lo importante es cómo mantener la política para lograr que en el año 2009 el crecimiento sea positivo, por lo menos en el rango que se ha establecido”, subrayó el Ministro.

Al respecto manifestó que el resultado del PIB en la primera parte del año permite pensar que Colombia alcanzará la meta de crecimiento positivo en medio de la crisis mundial.

“La política contracíclica del Gobierno está funcionando. Nos habíamos comprometido, al presentar el marco fiscal, que si el Gobierno garantizaba una ejecución adecuada de sus presupuestos, la demanda pública (consumo más inversión pública) podría crecer a tasas del 5,5 por ciento en 2009 y esto beneficiaría la economía”, dijo Zuluaga.

En ese sentido presentó como un buen signo el dinamismo en la demanda pública, que mantiene un crecimiento del cinco por ciento, lo que indica con claridad que la demanda pública está contribuyendo para que la economía tenga un deterioro menor y se oriente a una senda de crecimiento positivo.

De igual forma advirtió que una de las preocupaciones del Gobierno en este momento es el consumo privado, que se ha visto afectado por el aumento en la tasa de desempleo y el deterioro del ingreso de los colombianos, lo cual se está enfrentando con la política implementada por el Gobierno para contrarrestar los efectos de la crisis.

“Toda la política contracíclica está orientada a mantener los niveles de inversión que estimulen el empleo, y por esta vía recuperar el consumo de los hogares, el poder adquisitivo, que con la caída de la inflación tendrá un efecto positivo a lo largo del año”, afirmó el Ministro Zuluaga.

Concluyó que al comparar los datos de Colombia con la fuerte caída que han registrado otras naciones en el mundo muestra que la economía colombiana efectivamente se preparó mejor para los tiempos de crisis, y que la política económica del Gobierno ha funcionado, evitando un deterioro que sí han tenido la mayoría de las economías de América Latina y el mundo.

Análisis de los datos

Por su parte, el Director del Departamento Nacional de Planeación (DNP), Esteban Piedrahita, afirmó que aunque el dato del PIB presentado por el Dane es preocupante, Colombia no se encuentra en un periodo de recesión.

Destacó que pese a la cifra, se observa que muchos sectores de la economía mantienen un buen comportamiento.

Piedrahita resaltó el desempeño positivo que reportaron actividades como: explotación de minas y canteras, con un crecimiento de 10,6 por ciento en el primer trimestre; establecimientos financieros, seguros, inmuebles y servicios a las empresas, con 4,7 por ciento; construcción, con 4,1 por ciento; y electricidad, gas y agua, con 1,9 por ciento.